— A ti... — su tono de voz seductora me estaba enojando — Lucia.
El solo verlo me dio un escalofrío que recorrió toda mi espina dorsal, solo un año se fue, dolió tanto que se fuera que sentí que mi corazón jamás volvería a ser de una sola pieza, ahora está aquí parado como si nada hubiera pasado, como si yo siguiera siendo el juguete que puede utilizar de consuelo, ya que, la que verdaderamente amaba era a Daisy. Lo mire a los ojos tratando de ocultar la rabia y las ganas de lanzarle un golpe en estos momentos.
— ¿Qué haces aquí? — crucé mis brazos y seguí observando su rostro.
— Vine por ti Lucia — se acerca poco a poco en mi dirección y mantiene su postura seria, pero relajada al mismo tiempo — para cumplir tu sueño, para que estemos juntos, para que siempre lo estemos — me mira con atención, simplemente se concentra en mis ojos, pero luego de unos poco segundos baja su mirada hasta mi cuello y se acerca con lentitud hacia él, mientras abre su boca y deja ver como sus colmillos, estaba impacientes por morderme.
— ¿Y a ti quien te dijo que yo quería ser una de ustedes? — ese pequeño susurro ocasiono que el detuviera su acto y que nuevamente sus ojos se posaran en los míos.
— No juegues Lucia — soltó una risilla, se alejó un poco de mí y me observó con su ceño fruncido — tu siempre has deseado con todo tu ser, volverte algún día, una vampiresa, eso lo sé a la perfección, te conozco mejor que a mí mismo.
— ¿Por qué te mientes a ti mismo? — su ceño dejo de estar fruncido y se trasformó en una expresión confusa y triste — no me conoces, crees que sí, pero ni tú, ni Daisy me conocen — lo señale con mi dedo índice.
— ¡Valla! tan poco tiempo que no estoy contigo y ya me desprecias — el enojo se hacía notar en su tono de voz y sus manos se estaban apretando en puños.
— ¿Y qué? — lo rete y me acerque a él — ¿Que te importa lo que yo haga con mis sentimientos o con mi vida? — ahora el enojo estaba en mí, yo solo estaba controlándome para no matarlo, a pesar de que él sea inmortal — no te importo cuando te fuiste y ahora que te va importar.
— Tú siempre me has importado y siempre me importaras — su cuerpo al igual que su rostro aparentaban estar tranquilos, pero sus ojos expresaban inquietud y miedo — cuando me fui yo... yo... yo solo — y no salió nada más de sí boca.
— Tú solo pensaste que yo estaría bien sin "ti" y sin mis "amigos" — mi vista se estaba en pesando a nublar dejando evidenciar que poco a poco las lágrimas se acumulaban en mis ojos - pues no lo estuve, yo los amaba a todos ustedes, a pesar de que no me trataran como una igual — mi respiración se estaba agitando y las lágrimas amenazaban con salir, pero no las dejé, no le voy a mostrar mi debilidad a él — ¿Sabes por qué quería ser vampiro? — el negó con su cabeza — Porque no quería que me dejaran sola, ese siempre ha sido mi miedo, quedarme sola — una lágrima salió de mi ojo derecho, se resbalo lentamente por mi mejilla y termino en mi mentón dejando mi rostro — Pero ya no tengo ese miedo, porque ya estuve sola ¿Sabes? Eso era lo que más necesitaba — tomé aire y sequé el rastro de lágrima que tenía en mi mejilla — porque así comprendí que no los necesito, jamás los necesite.
— Lucy — suspiro — yo solo quería... — alargó.
— No quiero explicaciones, solo quiero que te vayas, ¡Ahora! — le ordene.
La puerta aún estaba abierta, empuje a Mirco fuera de mi casa y lo lleve hasta el frente de la carretera.
— No nos iremos sin ti — se hizo presente la voz de la mujer que se supone era mi "mejor amiga".
— Sí lo harán — afirme con dureza — tomaron una decisión hace un año y yo no hacia parte de ella, ahora yo tome mi decisión y ustedes no están incluidos en ella.
ESTÁS LEYENDO
Continúan Nuestras Vidas (CHV)
FanfictionDaysi mordió a Max y ambos están en el Mundo Vampiro mientras que Lucia y Belinda están en el mundo mortal tristes debido que sus familias, amigos y amores están en el Mundo Vampiro y ellas no pueden verlos. Esta es una versión inventada 100% por...