CAPITULO #12

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Narra Luis...

Me encontraba protegiendo a las enfermeras que hiban por los heridos, cuando un fuerte estruendo se escucho cerca de la casa donde se encontraban los niños del refugio.

Unos segundos después mas estruendos se escucharon cerca de donde me encontraba, al igual que unos disparos.

Escuche un grito familiar cerca de donde me encontraba sin embargo, no pude ver de quien se trataba puesto que el refugio estaba cubierto de una ráfaga de polvo, seguí los gritos hasta que una fuerte tormenta comenzó.

El polvo se había dispersado, haciendo que mi campo se visión fuera mejor, sin embargo, estaba muy oscuro pues las lamparas del refugio se habían roto por los fuertes impactos.

Corrí hacia donde se encontraban los niños pero cuando avance unos metros un grito se escucho demasiado cerca así que mire a todos lados y me detuve cuando vi a mi mamá en el suelo con un disparo en el abdomen la sangre color carmín saliendo de el y combinándose con con el agua.

Me acerque a ella corriendo y la tome entre mis brazos, su mirada reflejaba tristeza y las lágrimas inundaban sus ojos, intente ayudarla pero ella me detuvo.

—Necesito que encuentres a tus hermanos, y prometeme que protegeras de ellos y sobrevivirán todos juntos. Yo estaré bien, además seria un estorbo para ustedes y los retrasaría en su camino. Recuerden que los amo mucho y si logró sobrevivir los encontrare—. Dijo mi mamá con un hilo de voz y entre sollozos.

—Te lo prometo...nosotros también estaremos bien, cuidate, te quiero— beso su frente y me empiezo a alejar, por los zombies acercarse.

Mi madre me dio un arma y la agarre. De inmediato corrí hasta llegar al lugar donde se encontraban los niños, sin embargo, todo estaba destruido, camine entre los escombros esperando encontrar a algunos de mis hermanos pero no fue así en cambio encontré algunos zombies intentando salir de los escombros.

Mire hacia todos los lados con la esperanza de encontrar a alguno de mis hermanos, sin embargo, no encontré mas que zombies que se acercaban de diferentes partes y me hiban acorralando.

Comencé a disparar, sin embargo, la lluvias, el viento y la oscuridad hacia mas difícil la situación. Los disparos atraían más zombies y cuando creía que esto no podía empeorar mis municiones se habían agotado.

No tuve otra opción más que correr e ir esquivando a los zombies, se hiban acercando mas hasta que uno de ellos me alcanzo e intento morderme y yo le di un golpe en la cara pero eso no funcionó. Mi mano estaba cubierta de sangre y de un olor putrefacto. No me di cuenta cuando uno de ellos se abalanzo haciendo que cayera.

Escuche un disparo que no provenía de mi arma. El zombie que se encontraba encima de mi salpico sangre proveniente de su cráneo haciendo que yo cerrara los ojos y la boca para no infectarme, y empuje el cuerpo hacia un lado.

La lluvia limpiaba la sangre que  habia en mi rostro aquel zombie. Mas disparos  llegaban a los cráneos de los zombies que estaban mas cerca.

—¡Luis dirigente a las afueras ser refugio ahí nos vemos!— Dijo una voz conocida.

Nuevamente corrí esquivando a los zombies que se encontraban en el camino hasta llegar al lugar indicado ahí pude notar a una persona conocida...

Narra Cristián...

Me encontraba protegiendo a las personas que hiban por los heridos cuando una fuerte explosión se escuchó cerca del lugar donde se encontraban los niños.

Reacciones de inmediato y me dirigí hacia aquel lugar para buscar a mi hermana pero la oscuridad del refugio o lo que quedaba de el me lo impedía.

Mientras caminaba pude ver a un zombie tirado con un escombro encima de el impidiéndole levantarse, al lado de el había un arma y una linterna me agache y tome aquello.

Al llegar a unos cuantos metros de la casa estaba toda destruida y por ningún lado vi a mi hermana ni a suches, empecé a observar a todos los zombies que se encontraban entre los escombros para estar seguro de que mi hermana no se había convertido en una de esas cosas.

Después de checar todo el lugar encontré encontré una navaja y di media vuelta para regresar ya que pronto llegarían zombies por el olor a sangre fresca que aun se encontraba.

Al avanzar unos cuantos pasos escuche unos disparos provenientes del refugio. Note que un sujeto se encontraba en peligro puesto que estaba rodeado de zombies no pude detectar su rostro por la oscuridad que invadía el lugar, sin embargo, aun podía distinguir a los zombies.

Después de haber ayudado a la persona que se encontraba en peligro me di cuenta que era mi amigo Luis y le indique donde nos veríamos. Una vez estando en las afueras del refugio mi amigo me reconoció y nos dimos un saludo.

Los zombies se acercaban mas y nosotros corrimos en la misma dirección sin detenernos. Esto hiba a hacer un camino muy largo...

LA LLEGADA DE LOS ZOMBIES Donde viven las historias. Descúbrelo ahora