Otro Zodíaco de Diabolik Lovers

.~Acuario x Laito~.

El sonido de la puerta resonó por todo el salón principal, lo cual desconcertó a los seis hermanos. Por otro lado, T/N se levantó de su asiento, emocionada por la llegada de los visitantes.

-Bien, esta es la primera vez que mis amigos vienen de visita. Por favor compórtense lo más normal que puedan- les suplicaste a los Sakamaki.

Ninguno respondió pero asintieron vagamente con la cabeza.

Ya segura, te abalanzaste sobre la puerta para que pasen los invitados. Al abrirla, se presentaron cinco personas; para ser más precisos, tres chicas y dos chicos.

Les dejaste el paso libre a tus amigos para que se adentraran al hall de la mansión. Todos te saludaron felizmente mientras se frenaban al notar la presencia de los hermanos.

-Mhmh, T/N, ¿no piensas presentarnos?- te dijo picaramente una de tus rubias amigas quien no quitaba la vista del ojiazul.

-¡Por supuesto! Chicos, ellos son los Sakamaki. Shu, el mayor, Reiji, el segundo, Laito, Kanato y Ayato, los trillizos, y Subaru- terminaste de introducir a los residentes.

-Encantada de conocerlos- habló la pelirroja a tu lado.

-El gusto es nuestro- respondió el azabache educadamente.-T/N, es tu turno de presentarnos a los invitados- te dijo expectante.

-Bien, ellos son mis amigos. Sienna,-señalaste a la rubia embobada con Shu.-Akira,- acercaste a tu otra rubia amiga.-Gina,- apuntaste a la pelirroja.- Kane,- señalaste a tu amigo azabache.- Y Ryuu- nombraste por último al castaño.

Luego de las presentaciones, todos se dirigieron al salón principal.

-Wow T/N, me hubieses dicho antes que vivías en un lugar tan genial como este. Si me lo ofrecieras, no dudaría en mudarme contigo- dijo Ryuu mientras pasaba su brazo derecho por tus hombros.- Y... ¿cuál de todos ellos es tu novio?- te preguntó curioso.

-Oh, es ese de allá- dijiste señalando al castaño de fedora.

-Más le vale que te cuide o si no yo mismo me encargaré de darle su merecido- dijo haciendo que ambos rieran.

Laito estaba completamente ajeno a la conversación que tenían estos dos, sin prestarles atención en lo absoluto.

-Pss, Laito. Oe, Laito- le susurró su hermano menor.

-Ayato... ¿qué sucede?- preguntó ingenuo el castaño.

-Ven conmigo- dijo el pelirrojo haciendo señas para que ambos se dirijan a la cocina.

-¿Qué ocurre? ¿Acaso quieres hacer alguna de tus bromas a los amigos de T/N?- dijo dudoso Laito esperando la explicación de su hermano.

-¿Qué? ¡No!... O al menos no ahora. Escucha, ese chico Ryuu parece muy unido a T/N, ¿no lo crees?- le respondió Ayato.

-Pues sí... eso creo. ¿Hay algún problema?- preguntó el castaño encarnando una ceja.

-Sí, sí lo hay. ¿No te parece que está demasiado cerca de ella para ser su "mejor amigo"?- el pelirrojo siguió insistiendo.

-Ayato-kun, ¿qué estás insinuando?- Laito ya se encontraba un poco confundido.

-Sólo digo que si fuese tú, tendría un poco más de cuidado con ese idiota. Puede que intente robarte a tu novia- terminó de decir su hermano.

-No lo creo, T/N no es así. Sólo estás siendo paranóico- se defendió el de fedora.

-Tsk, como quieras- respondió Ayato antes de marcharse hacia la sala, dejando a un Laito desconcertado.

🌟🌟🌟

Te encontrabas muy animada hablando con todos tus amigos. Hacía un buen tiempo que no los veías y querías saber como había ido todo estos últimos meses. Sin embargo, tampoco podías ignorar el hecho que habías notado hace algunos minutos; tu novio te observaba muy detenidamente, como si algo le molestara profundamente.

Mientras tú te mantenías sumergida en tus pensamientos, no te percataste de que Ryuu se abalanzó sobre tí para darte un abrazo. Laito, al ver esto, se levantó de su asiento para ir al Hall con una expresión decepcionada.

Tú inmediatamente te percataste de esto y decidiste seguirlo para ver qué era lo que le ocurría a tu novio.

-Laito... ¡Laito!... ¡LAITO ESPERA!- terminaste gritándole al castaño.-¿Qué te sucede? ¿Pasó algo malo?- le preguntaste preocupada.

-¿Hace cuánto conoces a Ryuu?- te respondió con otra pregunta.

-Pues desde que tengo memoria. ¿Por qué?- seguiste con las preguntas.

-¿Y siempre es así de afectuoso contigo?- dijo con un tono ofendido.

En ese momento, reaccionaste enseguida.

-Un segundo... ¿estás celoso de Ryuu?-.

El castaño no respondió pero sabías que ese silencio valía más que mil palabras.

-Laito, no tienes que preocuparte por nada. Ryuu es mi mejor amigo- dijiste tratando de hacer entender al mayor.

-¿Cómo puedo estar tan seguro? ¿Sólo porque se conocen de toda la vida? ¿O porque "no es esa clase de chico"? ¡¿O es porque él tien...?!-.

-Es gay- finalizaste sin dejar terminar a tu novio.

Laito se vio sorprendido por esto.

-Oh... lo siento.- te dijo el de fedora muy apenado.

-No te preocupes pero... ¿quién rayos te metió esa idea en la cabeza? Tú no sueles ser celoso- dijiste extrañada.

-Ayato suele ser muy convincente a veces ¿sabes?- respondió en tono de burla.

-¿En serio? ¿Ayato? ¿El hombre más posesivo y egocéntrico del mundo? ¿A él le hiciste caso?- aclaraste con el mismo tono burlesco.

-Lo sé, lo sé. Lo lamento.- dijo Laito abriendo los brazos en señal de que te unas en un abrazo con él.

Tú te acercaste y lo abrazaste por la cintura muy suavemente. Laito te completaba en todo.

-Aunque... ¿sabes? tendré que castigarte por hacerme creer que me engañabas... nfu~-.