04.

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3ra persona pov

     El día había pasado con rapidez, los dos hermanos habían logrado visitar a su amado abuelo, durante la visita hicieron las típicas actividades que hacían, tanto como charlar, bromear, comer croquetas con té, jugar un juego de mesa, robarse golosinas de la cocina; hasta habían logrado hacer una cena entre los tres juntos, aún que no fue la mejor de todas, pero se divirtieron en el proceso al igual que disfrutaron de la comida. Aún que como siempre la diversión tiene su fin. La noche había llegado con rapidez indicando a los menores que debían partir y dejar que el mayor de los tres se vaya a tener su largo descanso, más los dos menores ya tenían planes para esa noche.

     —¡Adiós Tetera, descansa!— se despidió Mugman del mayor que hacía un ademán de despedida antes de bostezar y cerrar la puerta con lentitud. Cuphead soltó una leve risita mientras hacía un ademán de despedida al mayor para segundos después darse vuelta en los talones. —Bien, ¿estas listo para ver el espectáculo de Sally?— cuestiono Cuphead con una gran sonrisa a su hermano menor. Mugman por su parto lo observo con una mirada confusa —espera ¿iremos asi?— dijo el menor refiriéndose a la vestimenta que poseían, pues ambos usaban sus típicas camisas negras con sus típicos pantalones cortos, —claro, ¿que tiene de malo?— cuestiono Cuphead mientras empezaba a caminar siendo seguido por los pasos del menor —Bueno, es solo que iremos a un lugar de alta clase... No crees que debamos usar algo más... No sé ¿elegante?— decía Mugman tratando de explicar su punto, Cuphead por su parte rodó sus ojos sabiendo que Mugman era alguien que se preocupa a mucho por el como otros lo veían.

     —¿estarás feliz si vamos a casa y nos ponemos un par de esmoquin?— cuestiono el mayor mientras detenía su caminata para así mirar al menor el cual sonrió con algo de nerviosismo —¿sí?— respondió el menor mientras jugaba con sus propios dedos, Cuphead suspiro antes de voltearse para así caminar en dirección a la casa que las tazas compartían, —¡yey!— celebró el menor, pues este quería tener una buena apariencia frente a la actriz aún que estaba consciente que ella nunca se dará cuenta de su existencia, pero nunca se sabe lo que pase.

     Al cabo de unos 40 minutos o más el par de hermanos ya se encontraban frente al famoso teatro donde se realizara la presentación de la actriz. Mugman gritaba internamente de la emoción mientras que Cuphead se aburría de tanto esperar, pues la fila era exageradamente larga para su agrado. Al cabo de otros 15 minutos en los cuales Cuphead luchaba por no dormirse parado, ambos lograron entregar los boletos y entrar al tan anticipado lugar, Mugman pareciendo un niño pequeño que estaba apunto de recibir su caramelo mientras que Cuphead lo seguía de cerca.

     —Aun no puedo creer que estemos aquí— murmuró con una gran sonrisa el menor mientras tomaba asiento siendo seguido por Cuphead el cual reía ante su felicidad —pues créelo, por que aquí estamos y se que te va a gustar— dijo Cuphead con una leve sonrisa mientras miraba a su entusiasmado hermano. Aveces le parecía adorable el ver como el menor se emocionaba por simples cosas pero ¿que podía decir? ¡Así era Mugman! Y le gustaba que sea de esa manera.

     Al cabo de unos minutos las luces del teatro se habían opacado haciendo que las personas presentes mantengan el silencio, a los pocos segundos las luces se centraron en las cortinas rojas que lentamente se abrían dejando ver el detallado escenario. Cuphead soltó un silencioso suspiro mientras se acomodaba para dormirse, pues sabía que esto iba a ser aburrido para él, la única razón en la que compro esos boletos era para hacer a su hermano feliz, y quien sabe, eso lo podía distraer sobre los malos sueños que obtiene en las noches.

     Esas pesadillas, aveces le incomodaban al mayor, pues este se preocupaba mucho por su hermano menor, sabía que aquellas pesadillas habían comenzado desde que involucro a Mugman en sus problemas, lo cual había sido un grave error al cual no puede regresar y corregir, aveces se preguntaba como era que su hermano aún lo perdonaba aún después de todo lo que tuvieron que lidiar.

     Cuphead miro a su hermano viendo como el menor ya estaba completamente sumergido en la actuación, este no pudo evitar el sonreír ante tal vista. Aveces quisiera poder mantener una sonrisa en el rostro del menor, pero sabía que siempre arruinaba las cosas, trayendole problemas y molestias al menor. Típico de Cuphead.

[...]

     Ya habían pasado alrededor de una o dos horas y la actuación aún continuaba, Como se había dicho Antes Cuphead se había quedado dormido, por suerte que el mayor no roncaba con frecuencia, Mugman por su parte observaba la presentación con alegría e intriga, pero esos sentimientos cambiaron a una de incomodidad al ver un personaje disfrazado de un tipo de demonio Morado, claro era parte de la actuación, pero lo hacía sentirse raro pues era similar a los secuaces del diablo cuando habían luchado contra el y su hermano. El menor decidió no hacer nada al respecto y continuar prestando atención, pero mientras más proseguía la actuación más "demonios" se presentaban haciendo que hasta el fondo falso cambie a unos de flamas y rocas tratando de hacer una imitación del inframundo. Digamos que eso no ayudo de mucho, pues tan solo le trajo desesperación e incomodidad al menor.

     —Cuphead...— murmuró el menor mientras meneaba el cuerpo de su hermano mayor con lentitud, pues ya no quería quedarse a ver más de la actuación, sabía que era un acto tonto o estúpido, pero desde lo ocurrido con el diablo no quiere saber nada que esté relacionado con demonios o criaturas demoníacas.

     —¿hmm? ¿Ya termino?— murmuró el mayor mientras abría lentamente sus ojos viendo que la actuación aún continuaba, este volteo su rostro para ver a su hermano con una expresión no muy alegre. '¿acaso no le gustó la actuación?' Esa fue la primera pregunta que paso por la cabeza mayor, —¿podemos irnos a casa?— murmuró el menor lo cual confundió al mayor, el mayor volvió a poner su mirada en el escenario viendo los personajes que salían y entraban a la actuación al igual que el fondo animado, en eso se dio cuenta del problema, al parecer si que había dejado traumado a su hermano con todas las cosas de demonio y diablos.

     Cuphead suspiro levemente antes de levantarse siendo seguido por su hermano, a los pocos minutos ambos estaban caminando por las solitarias y obscuras calles en dirección a la casa que compartían. —Perdón, siento que te hice desperdiciar el dinero en los boletos de entrada— se disculpo el menor con la mirada baja escondiendo su expresión de tristeza, Cuphead por su parte sonrió antes de rodear su brazo alrededor del cuello del menor acercandolo hacia él —¡Bah, tonterías! Tan solo es dinero, es algo material que puedo remplazar, pero no puedo remplazarte a ti— dijo Cuphead con una leve sonrisa haciendo que el menor suelte una leve risita ante tal acción —tampoco te pongas sentimental— comento el menor en sarcasmo a lo que Cuphead río.

     —¡Seré lo más sentimental que quiera y no me podrás detener!— demando Cuphead en un tono juguetón haciendo que el menor vuelva a reír. El resto de la caminata a casa fue similar a esa, solo dos hermanos caminando y hablando sobre cualquier tontería que se les viniera a la mente, no había mejor manera en hacer la noche mejor.

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Sho y mis ideas escasas huehuehue (??

Nightmares |CupheadXMugman|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora