Rico Aroma

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A la mañana siguiente Cholé se había levantado temprano, ya que le había pedido a Yaxyax que le ayudara a cocinar unos crossaints, para sus compañeros de clase, lo hacía ya que se preocupaban mucho por ella. Al finalizar de prepararlos, los envolvió en una bolsa de celofán, se sentía como una niña pequeña, ya que su mayordomo la había advertido de que estaba prohibido de que ella tocará la cocina, todo por órdenes de su padre. Al momento de terminar de envolverlos todos, se acordó que había uno especial, ese especial era para Adrien, así que le escribió una carta al rubio, agradeciéndole todo lo que ha hecho por ella.

Para Adrien:

Querido Adrien, muchas gracias por las cosas que has hecho por mí, se nota que has sido un gran amigo, sin importar mi actitud, gracias por aceptarme tal y como soy.

Muchas gracias por acompañarme en mis travesuras, me gusta que estés a mi lado espero que nuestra amistad dure para siempre.

Atte:
Tú querida amiga, Chloé Borgueous.

Al finalizar de escribir la carta, la enrrolló y lo amarró justo con el listón que estaba en la bolsa.

Acto seguido, la rubia guardo todos los crossaints en su bolsa amarilla, uno por uno para que no sufrieran daño alguno.

- Yaxyax, alista el auto por favor.

- Como usted ordene mi señorita Chloé.

- Ahh, antes de que se me olvide, ten- le entrego una bolsa con crossaint- muchas gracias por preocuparte por mi- lo abrazó.

Él, al momento se sentía muy raro, pero al final le correspondió el abrazo, ya tenía tiempo que no la abrazaba, desde pequeña no lo hacía, todavía se acuerda de esa pequeña inocente, muy traviesa, pero que con el paso del tiempo necesitaba el amor de una madre, ya que el padre lo único que hacía era regalarle cosas, ya que no sabía cómo darle el amor que ella necesitaba. Se separaron pero al momento ella le dió un beso en la mejilla.

- Bueno, ya vámonos, muchas gracias Yaxyax, hasta luego - dijo mientras estaba entrando a la limosina

- Hasta luego, señorita - se limitó a decir.

La chica hiba rumbo a la escuela, cuando en eso vió de que un anciano se había caído por acto de magia. Así que le dijo al chófer que se detuviera por un momento, y eso hizó. Ella se bajó rápidamente de lugar en donde estaba para poder ayudarlo.

- Déjeme ayudarlo, por favor- lo levantó del lugar en donde estaba, haciendo un poco de fuerza para que al final el estuviera en pie.

- Muchísimas gracias señorita- agradeció

- No es nada, espero que no le haya sucedido nada, ¿Necesita que le ayude en algo más?.

- No, pero muchas gracias por la molestia.

- No es nada, hasta luego.

- Hasta luego- él sonrió con malicia, al parecer ya había escogido su próxima vida.

La chica corrió hacía donde estaba el auto, ya que se le hacía tarde para ir a la escuela.

Llegó a la escuela sana y salva, se sentía tan feliz, que lo único que quería hacer era verlo solamente a él, bajó inmediatamente del auto sin ayuda de nadie, pero esperen, ¿Sin ayuda de alguien?, Si tal y como lo oyeron, ya que Chloé le dijo a Sabrina de que no se tomará la molestia, ya había hecho bastante por ella, al momento que sus pies rozaron el piso, ella caminó directamente hacia su salón, pero no sin antes despedirse del chófer y agradecerle por su compañía, para el chófer era algo nuevo, ya que no sabía que reacción tomar, así que lo dejó pasar y siguió con su vida rutinaria, ya cualquier cosa la señorita le hiba a marcar.

Nunca Fue Así [EDITANDO]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora