cap 98

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Narra Mateo

La cena fue mas agradable sus primas y primos tenían su casa cerca y solo quedamos los que vivíamos lejos michelle y yo nos retiramos temprano a dormir michelle estaba agotado a pesar que teníamos camas individuales se acostó a mi lado no era consciente que tenerlo pegado a mi era demasiado tentador.
Pero estaba agotado de lidiar con gente tan irritante mas lo del viaje caímos en un profundo sueño desperté con los golpes en la puerta era mi madrastra diciendo que el desayuno estaba preparado que nos diéramos prisa.
Michelle estaba dormido aferrado a mi agarre mi celular mire la hora eran apenas 6:30 de la mañana envidiaba a michelle que no despertaba con nada todo somnoliento hice a un lado a michelle y estaba por levantarme, pero se aferro de nuevo bueno cinco minutos mas dije pero no pude dormir comencé a ver el rostro durmiente de mi chico tan lindo tenía las pestañas largas, acaricie sus labios tan suaves no podía dejar de recordar cuantas veces esa linda boquita había hecho una mamada y bebido todo mi semen no pude evitar besarlo sus tetillas de inmediato se pusieron duras sobre saliendo de su playera la cual levante ahí estaban sus pezones firmes pidiendo atención de mi boca.
Si con esto no despiertas te haré mío le dije al oído comencé a lamer para luego succionar fuerte hasta que mordí una tetilla y pellizcaba la otra.
Por que me atacas mientras duermo dijo michelle mientras jadeaba aferrándose a mi cabeza, le di los buenos días luego lo bese fuimos interrumpidos por la voz de su abuela que el desayuno se enfriaba nuevamente fui empujado michelle corrió a la puerta dijo que ya íbamos no quedo de otra que salir en la mesa ya estaba mi padre conversando de política con los tíos de michelle en pleno desayuno; todo estuvo delicioso mi padre dijo que hoy en la noche volveríamos que si yo deseaba podía salir a conocer el lugar y me dio la llave del auto.
La abuela de michelle dijo que había lugares muy bonitos que ver que sus nietos podrían mostrarme cuando lleguen.
Tengo que salir antes dije en mi mente fui a la cocina tome algunas cosas las lleve al auto fui en busca de michelle sin decirle nada lo subí al auto.
Ya en el camino le dije que me gustaría que me mostrara sus lugares favoritos, su cara se iluminó no sabía donde ir se notaba lo indeciso, tome su mano para ayudarlo a calmarse le dije que teníamos tiempo para ir a todos los lugares tomó aire exhalo y me comenzó a guiar llegamos a un río bajamos nos quitamos los zapatos nos sentamos en la orilla la vista era relajante le dije que entráramos a nadar me quite la ropa quedando en bóxer entre esperando que michelle me siguiera pero michelle no se movió desde lejos le grite que entrara pero no se movía me acerque vamos!! le insistí.
Fue entonces que dijo que no sabía nadar que su madre lo sobre protegía y nunca le permitió entrar al río o piscina que siempre miraba de lejos.
Ahora estas conmigo le dije no tengas miedo no dejare que nada malo te pase te lo prometo.
Le insistí mucho que  se quito la ropa entro de la mano conmigo era como un niño temblando de miedo cuando sus pies no sintieron tierra se asustó se aferró a mi abrazandome fuerte gritando que deseaba salir estaba al borde de las lágrimas.
No se tranquilizaba con nada no me escuchaba así que solo pude besarlo seso su pánico le susurré al oído que todo estaba bien luego de a poco fue tomando confianza cada momento decía que no lo soltara.
Le enseñe lo básico a mantenerse a flote cuando notaba que estaba por soltarlo se ponía como gatito aferrándose a mi con todas sus fuerzas.
Aveces lo hacía a propósito disfrutaba verlo tan desesperado abrazandome casi siempre al borde de las lágrimas.
Michelle se percató se enojo comenzó a hacer pucheros se veía malditamente lindo.
Le pedí disculpas le prometí no volver hacerlo pero michelle estaba enojado no me miraba así que le dije que me iría lo solté y me di la vuelta no paso ni un minuto michelle se aferro a mi.
Lo tome de la cintura haciendo que sus ojos quedaran viendo a los mios por leves segundos nos miramos para luego besarnos michelle se aferro a mi cuello y con sus piernas rodeo mi cintura era como si hubiera pasado años sin besarnos pero eso no era suficiente para mi.
Mis manos fueron a su trasero bajando su boxer apreté sus redondas y bien formados glúteos michelle pidió que me detuviera que alguien podría llegar que en domingo este lugar era muy frecuentado.
Pero no tenía la intensión de detenerme introduje mi dedo en su culito michelle gimió dulcemente a mi oído al meter el segundo michelle mordió mi hombro para no dejar salir su voz le dije que no se contuviera que nadie lo escucharía mordi su tetilla me excitaba oírlo y mas si gritaba mi nombre no quería esperar mas baje mi bóxer sujete sus caderas y lo penetre michelle volvió a aferrarse a mi cuello.
Sus gemidos en mi oído me incentivaba a penetrarlo mas duro michelle busco con desesperación mi boca todo su cuerpo ardía en mis brazos apretaba tan rico ahí abajo que me corrí michelle de pronto se alarmó dijo que se acercaba un auto.

Solo contigoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora