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Acabo de llegar a casa.

La ansiedad me está consumiendo, ya no puedo sostener mi propio peso.

Estoy ahora mismo, observando el cuchillo que amenaza con cortar mi brazo izquierdo.

¿por qué llegué a esto?

Quiero pararlo, quiero pararlo, quiero pararlo.

...

Ya no puedo hacer nada bien.

¿por qué no puedo amarme a mi mismo?

Las lágrimas caían por mis mejillas, ya no puedo mas con esto.

¿cuál es la razón por la que sigo vivo?

Mi familia está muerta, no tengo trabajo, y una puta le da ideas equivocadas a el amor de mi vida.

Oh, Alex.

Alexander, no sabes cuanto te amo.

No sabes cuanto he dejado atrás para estar junto a ti.

No sabes cuanto he ocultado para que tu seas feliz.

...

Siento que mí final está cerca.

Quiero confesar antes de mi posible muerte.

Pasé el frío cuchillo por mi muñeca y corté un poco.

Primero, nunca quise tener un hijo, me repugnan los niños.

Volví a cortar un poco mas abajo, esta vez mas profundo.

Segundo, no me arrepiento de todas las veces que te golpeé, ya que funcionaron.

El tercer corte hizo que soltara un gritó algo fuerte.

Tengo miedo tengo miedo tengo miedo tengo miedo tengo miedo tengo miedo tengo miedo tengo miedo tengo miedo tengo miedo tengo miedo tengo miedo tengo miedo tengo miedo tengo miedo 
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...

Oh, Alex llegó.

Síndrome de cotard;; JamiltonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora