Daddy Jungkook. 💥

Capítulo 26

—¿Como puedes ser tan bonito?— le susurré a Jungkook en el oído mientras acariciaba su espalda.

El solo sonrió medio dormido.

Ya habíamos vuelto a Corea después del concierto en Tailandia. Fue precioso cuando cantaron 'Two Three' ellos y Armys.

Ahora mismo nos encontrábamos en mi cuarto. Tae también se había quedado dormir y a hacer.... bueno, ya sabéis a hacer el qué.

Jungkook vino tan cansado que lo primero que hizo fue echarse a dormir mientras le daba un masaje y le proporcionaba mil besos por su espalda desnuda.

—Ven a dormir conmigo— me susurró Jungkook cansado para que dejara de masajearlo.

—No estoy cansada todavía. Déjame tocarte un rato.

—Eso sonó tan mal Min— sonrió el y yo solo reí.

De su espalda comencé a subir a su cabeza y proseguí a rascarsela. Era la parte favorita de Jungkook para que se la rasquen.

De repente Jungkook soltó un gemido de placer y supe que había dado en el punto clave.

Después de un rato, supuse que Jungkook se había quedado dormido por lo que yo también me eche a dormir.

—Lo hiciste muy bien, mi amor— le susurré besando su frente.

Me acosté de espaldas a el y de repente le sentí que me abrazaba.

—Tu también lo hiciste muy bien, 'mi amor'— me susurró en el cuello remarcando lo de 'mi amor'.

Escondió su cabeza en mi pelo y unimos nuestras manos. Y así dormirmos toda la noche. Como una pareja feliz de solo 3 días. Suena gracioso en verdad.

Al cabo de un rato me giré para mirar la cara de Jungkook y el aún así mantuvo su agarre. ¿Porque nunca quise darle una oportunidad? Seguro tiene un montón de cosas que darme. Pero pensar en lo de Yen, en qué se acostó con 2 estilistas y alguna vez se llevaba putas a casa.

Comencé a acariciar su cara y está la arrimo más a mi mano. Me acerque y bese su frente.

—Jungkook...

—Mmmm...

—Cuando tuviste sexo con tus otras dos estilistas... ¿lo disfrutaste?¿y con las putas?

Jungkook comenzó a abrir un poco los ojos y a sonreír.

Necesitaba asegurarme de que  de verdad me quería y no todo era el sexo.

—¿Me lo estás preguntando enserio?

—Si...

Ahora Jungkook volvió a reír y me sentí avergonzada.

—No recuerdo haberles dicho a ninguna de mis estilistas 'Te quiero' y menos a las prostitutas.

Lo miré sonrojada e insegura y este lo pudo notar.

—Al principio se que nos odiabamos y nos llevábamos fatal. Y que siempre te hacía de rabiar porque adoraba tus reacciones. Pero un día me di cuenta que podias ser algo más que sexo y reacciones graciosas. Y que estabas muy perdida por la vida y que debia guiarte— suspiro.—Min, me gustas, y mucho. No te sientas insegura— finalizó posando un beso en mis labios el cual correspondí rápidamente.

Le sonreí y este me retiro un poco el pelo de la cara.

—Ahora hasta me gusta tu sonrisa de conejo, ¿que me hiciste?— le pregunté agobiada y reímos los dos.

—Lo se, soy un puto dios griego.

Le pegue un codazo en el pecho y este río.

—No te podrás quejar de mi. Este cuerpazo no lo tiene cualquiera— dije subiéndome encima de él mientras besaba su cuello y el me agarraba del culo.