Daddy Jungkook. 💥

Capítulo 5

¿Dimito? Era la pregunta que se me formaba todos los días en la cabeza.

No podía darle el placer a Jungkook de dimitir, pero tener que soportar a un niñato como el era horrible. Debo contratacar. Si a Jungkook le molesta que le alabe, lo alabaré entonces y me dejara en paz.

Fui a observar como iba con el videoclip y solo tenía que hacer varias figuras mientras que salian pájaros alrededor. No me gustaba su videoclip, la verdad es que no me gustaba nada que tuviese que ver con el. Es que le odiaba tanto.
Cuando terminó el videoclip me acerque a el y le entregué una toalla para que se quitase el sudor.

—Podéis iros a casa. Terminamos más rápido de lo esperado. Y Jungkook, acompaña a Min a casa— dijo el chico de ayer.

Es chico me estaba empezando a caer mal de verdad. Comencé a desmaquillar a Jungkook en silencio. ¿Como haría lo mismo que el? Yo no sé besar ni abrazar ni poner nerviosa a la gente como hace el. No tengo casi nada de experiencia en el amor.

—Ya esta— dije retirándome de el.

Se levantó y seguí sus pasos atentamente. Que cuerpo tan bonito tenía, que piernas tan musculosas...¡No! Para el solo soy una chica de la que quiere aprovecharse.

—No hace falta que me acompañes— dije sinceramente.

—Me da igual lo que quieras, necesito tu coche para ir a casa— dijo acercándose a mi mientras cogía mi bolso.

Era mi momento. Me acerque a el y le agarre de la mandíbula mientras sonreía.

—¿Portandote así conmigo te sientes superior?

Le costó reaccionar, pero en cuanto lo hizo, me empujo para atrás.

—¡¿Que haces?!— pregunto avergonzado.

—Lo que tú me haces todos los malditos días— reí mientras me dirigía a la salida.

Jungkook seguía mis pies desde atrás. Llegamos al coche y lo abrí. Me senté en el copiloto.

—¿Entonces te tengo que dejar en casa?— pregunté arrancando el coche.

—Haz lo que quieras.

Le mire con mala cara pero este solo miraba por la ventana.

—Si quieres te llevo a un prostíbulo para que alquiles a otra chica.

De repente se giró y me fulminó con la mirada.

—¿Sabes que? Cogeré un taxi— dijo bastante enfadado.

¿Me habría pasado? Antes de que saliera del coche le agarre de la mano.

—Perdon, tal vez me haya pasado— le sonreí pacíficamente.

Este solo me volvió a mirar mal y se sentó otra vez en su asiento. Todo el camino fue en total silencio, ni puso la música. Aparque enfrente del edificio y baje con el.

—¿Porque vienes?— me pregunto sin dirigirme la mirada.

—Necesito mi vestido— le contesté y se abrió el ascensor.

Llegamos al final del pasillo y Jungkook llamo a la casa. No se oyeron ruidos, no se oyó nada. Al parecer no había nadie en casa.

—¡Joder!— grito dando un portazo a la casa.

Le mire confundida. ¿Le decía que si venía a mi casa o le dejaba aquí? Si le llevaba a casa corría el peligro de que me acosase más fuertemente, pero, si le dejaba aquí me convertiría en alguien como el. Le agarre de la mano y nos dirigimos al ascensor.