T-Min y G-Jung {HopeGa}

«1»

Agarra una gran bocanada de aire para abrir
sus ojos. Sabía que hoy su día no sería tan fácil los primeros días nunca son los mejores.

Baja los escalones con plena vagancia. Los lunes nunca fueron sus favoritos especialmente cuando llovía. Su deseo era quedarse en su hogar y no ir a clases, lamentablemente no podía ya que su hermano insistía.

– Vamos Ho Seok que llegaremos tarde. No tengo culpa de que nunca tengas ganas de salir.

Jung Ho Soo, hermano menor entre los gemelos Jung. Era tímido, no tenía amigos solamente a Ho Seok y un chico que estudiaba con él. Ama los cómics, literatura, entre otras cosas materiales pero su mayor amor va para su hermano. Su famoso paño de lágrimas o su mejor consejero.

Hablaba solamente con su hermano al sentir que lo ignoraban, cuando solían sacarlo de los grupos por ninguna razón, cuando nunca conseguía amigos ahí estaba su hermano.

– Ya voy pequeño. – Ho Seok entra a la ducha después de haberle gritado. Él era el mayor por lo que era normal que lo llamara pequeño.

Al finalizar su ducha decide bajar listo, con todo y su mochila, para desayunar y vaya que olía delicioso.

– Te hice panqueques ya que tardabas. Siéntate, te serviré. – Ho Seok tenía que aceptarlo, su hermano sabía cocinar y de maravilla.

– ¿Puedo preguntar el por qué quieres llegar al colegio tan rápido? – un plato con el desayuno es dejado frente a él y el olor inunda sus fosas nasales.

– Ya sabrás cuando lleguemos. – sonríe mostrando sus dulces hoyuelos.

Cuánto quería a ese pequeño.

El colegio estaba repleto de alumnos por doquier, ambos pensaban que no habría nadie al ser el primer día, todos solían faltar ese día sin embargo parecían haber más personas de lo usual.

Ho Soo escuchaba murmullos provenientes de Ho Seok. Solía hacerlo, siempre que detestaba algún lugar o alguna persona murmuraba miles de cosas sin sentido.

– Nunca te comprendo. Eres tan extraño. Estás hablando solo.

– En realidad tú eres el extraño. No emites palabras durante casi nueve horas.

– Sólo cuando estoy en este lugar, lo sabes. – ambos alzan sus hombros como si fuera normal murmurar cosas sin sentido y dejar de hablar por nueve horas. – Llevo años así y me has aceptado tal cual. – agarra la mano de su hermano y salen corriendo hasta la biblioteca.

– ¿Qué hacemos aquí? – no respondió.

Las puertas estaban cerradas, solo habían unos papeles pegados en ellas. Cada uno tenía diferentes avisos: sobre la banda escolar, los de cuarto año, los horarios escolares, la colección masiva de cómics que se dará éste sábado en el centro comercial y una venta de autos.

Ho Seok ya entendía el por qué de tanta prisa. Los cómics del centro comercial, claramente Ho Soo querría ir.

– ¿Podrías acompañarme? – señala el papel mientras hacía un puchero con sus labios. – Si no tienes planes con tus amigos claro está.

– Claro que iré. – Ho Seok comprendía que tenían la misma edad pero ¿como no tratar a tanta ternura con delicadeza? Su hermano podría ser menor por minutos pero debía protegerlo como si de un bebé tratara.