Mi Querido Tom 🐾

De una vez por todas.

-Felicidades Nuevo Ministro!- decía Gellert admirando al joven Tom que ya había cumplido varios de sus "encargos" asesinando a esos "Sangre Sucia" especialmente ahora que contaba con un cargo importante después de haber acabado con Bartemius dejándolo completamente loco en el hospital San Mungo.

-Bella me a ayudado bastante- decía dándole créditos a aquella Slytherin que había sido su compañera durante seis años en Hogwarts.

-Ahora les tengo otra "misión"-

-Usted dirá amo- decía Bellatrix mientras pasaba su varita por sus labios.

-Este ejercito debe crecer-

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Poco a poco fueron juntando más personas que tenían un objetivo en común Acabar con los traidores, con los impuros.

Sus filas fueron creciendo, Tom busco a algunos de los compañeros que tuvo en sus años en Hogwarts a aquellos que tenían los mismos ideales que él.

A sus filas se unio un joven tan frío y distante que mantenía un desprecio hacia todo, Severus Snape.

También se unió uno de los amigos de Tom, el joven Abraxas Malfoy junto a su esposa Narcissa hermana de Bellatrix.

Barty Crouch JR. Fue convencido por Tom Grindelwald pues su amistad hacia que él siguiera a Tom hasta el fin del mundo si fuera necesario. 

Su propósito ahora era acabar con todo, para ellos eran los salvadores del mundo, gracias a ellos no tendrían que volver a ocultar su magia, podían ser completamente libres.

[....]

Bellatrix era una joven hermosa con aires de grandeza pues era perteneciente de la familia Black, la familia más influyente del mundo mágico, la mayoría de ellos estaban orgullosos de su estatus de sangre pura a excepción de su tía Andromeda, su prima Nimphadora y su primo Sirius, su hermana Narcissa se había unido a su causa "Acabar con los impuros y con los traidores", ella junto a su marido Lucius les servían al amo Gellert Grindelwald quien, deseaba la inmortalidad, quería ser el amo de la muerte pero para serlo tenia que derramar miles de litros de sangre.

[.....]

-Que pasa Albus?- preguntaba Minerva McGonagall al observar a su amigo abatido.

-Es esta guerra- respondió con frustración.   -No logro entender porque estas terribles cosas están pasando- se sentía impotente ante la situación.

-Tranquilo albus, tu enfado no nos ayuda en nada-

-Ya lo sé minerva... Pero mi tranquilidad tampoco!. No sé como puedes pedirme que me tranquilice, cada mago que conozco esta muriendo... O más bien... Lo están matando, ¿Entiendes? Logras entenderlo Minerva?-

-Basta!- minerva salio de la oficina.

-Tengo que acabar con Grindelwald de una vez por todas-. Dijo para si mismo, tomo su varita y desapareció del colegio.