𝐓𝟐. 𝐁𝐚𝐫𝐝𝐨𝐜𝐤 𝐲 𝐆𝐢𝐧𝐞 • 𝐮𝐧 𝐚𝐦𝐨𝐫 𝐝𝐞 𝐯𝐞𝐫𝐝𝐚𝐝

Capítulo 22

Después del gracioso momento, Goku no paró de perseguir a Jiren, quería luchar con el pero siempre se topaba con alguien. Ahora que Hit lo estaba distrayendo, Goku vio el momento perfecto para acercarse a el. En un momento se encontraban los dos peleando, Goku en super saiyajin dios azul y Jiren sin ningún tipo de esfuerzo. Los golpes de Son no eran nada comparados con el auto-control y agilidad del enemigo. 

-¡Esta vez te derrotaré! -gritó Goku, llamando la atención de todos en la pista. -todos, préstenme su fuerza. -dijo levantando sus brazos. 

-Hazlo, quiero ver que técnica sacas ahora. -al enemigo se le notaba tranquilo, no había ni una sola pizca de miedo ante la gran bola de color azul que se alzaba ante la cabeza de Son. Pronto estuvo lista. 

-¡AHHH! -Kakarotto lanzó la Genkidama, logrando despistar a Jiren y acorralarlo, pero con un solo movimiento la genkidama fue devuelta a Goku. Con un poco de esfuerzo trató de volver a intentarlo, pero resultó como anteriormente, haciendo que la bola se trague a Goku y ante ello una gran explosión en el ring. 
Gine miraba asombrada y sin salir de su asombro el espectáculo que acababa de suceder, no se lo creía. 
-No es posible, la genkidama se tragó a mi hijo...

Desde las gradas, un ángel hablaba con su dios destructor. -Es una lástima que Son Goku haya sido derrotado tan pronto. Dado a que su pilar espiritual se ha desmoronado, el universo 7 caerá con mucha facilidad. 
-Era de esperarse... -murmuró el Dios- esa bola de luz me llegó a preocupar un poco, pero no fue nada para Jiren como era de esperarse.
-Estoy asombrado de la creación de tal técnica, pero lo terminó perjudicando a él.

De repente, en el ring se hicieron visibles unos truenos, seguidos de un gran estruendo azul y rojo que venía del mismo sitio donde había explotado la genkidama. Jiren aún no bajaba la guardia.  Entonces Bills habló. 
-Un gran flujo de energía llega desde el centro de la pista. No, el reino de la Nada entero. Y está muy claro que es. -Entonces cerró sus ojos. -Aquí viene. 

Después de decir eso una gran columna blanca que trajo consigo un gran viento, acechó en el medio del ring. Se podía visualizar al saiyajin, en una postura parecida a la posición fetal. Poco a poco su cuerpo se fue inclinando y estirándose. Los ojos totalmente en blanco mientras su cuerpo se veía rodeado de un aura azul, morada y blanca. Se dio la vuelta poco a poco para encarar a Jiren, dando a ver su nueva transformación.  El asombrado enemigo se acercó lentamente a el, para empezar la batalla.