Capítulo 2

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11 años después.

Todos se hallaban en los amplios pasillos de los vestuarios, se encontraban en el torneo de las artes marciales después de tanto tiempo. La última vez Bardock salió victorioso, este año venía como espectador, ya que quería disfrutar de su pequeña, la cual tenía un gran potencial. Note a su 14 años había rozado el ki de su padre, resultado de duros entrenamientos junto a el grupo. Esto trajo graves problemas en el matrimonio de Bardock, pero todo fue superado. Esta vez el torneo infantil había sido eliminado por quejas de los participantes más pequeños, motivo por el cual, la niña se encontraba muy emocionada.

El tiempo transcurría con emocionantes peleas en las cuáles las chicas del grupo de los guerreros Z iban ganando. Último asalto, Pan y Note. Ambas tranquilas hasta llegar a la plataforma, allí ambas inclinaron su cuerpo hasta hacer un simple gesto de respeto. Todo comenzó, Pan mandaba golpes, patadas, puñetazos, sin pensar que la menor allí presente era más fuerte y tenía un as bajo la manga. La mayor dio un golpe fuerte sobre Note estrellándola en la plataforma, ésta sentía la sangre caer desde su nariz hacia su boca, sintiendo un sabor metalizado en su garganta. Pero no se iba a dejar vencer por una híbrida tan fácilmente, levantándose rauda lanzó un kamehameha directa hacia su contrincante. Antes de dejarla esquivar se teletransportó tras de ella y le propinó un puñetazo en la espalda. La pelea transcurría, ambas daban lo mejor de sí, pero Note se encontraba peor así que aprovechando que Pan estaba despistada agarró su pierna y le absorbió toda su energía quedándose la ella, era su poder oculto que pocas personas sabían que tenía.

-Ante eso, la hija de Gohan se sobresaltó. -¿qué has hecho maldita? -su enojo era claro. 

-Deja de comportarte como una niña pequeña. -Pan tiró de la cadena de oro de Note que Gine y Bardock compraron con todo su cariño en su cuarto cumpleaños. La más pequeña estalló en ira y le lanzó una bola de energía que la sacó de la plataforma. Bajó a por su cadena y anunciaron que ella era la ganadora. Entraron a los vestuarios, entre los brazos de Gine se encontraba su pequeña hija, que lloraba desconsolada por su cadena ahora rota por la mitad. 

-Note, lo siento, de verdad no esperaba que mi hija fuera a hacer tal cosa. -Videl suspiró abochornada. -Deja que me la lleve y que pueda arreglarla. -La pequeña salió de su pequeño escondite entre los brazos de su madre, para observar a la mujer frente a ella. Secándose las lágrimas y enderezándose asintió. 



𝐓𝟐. 𝐁𝐚𝐫𝐝𝐨𝐜𝐤 𝐲 𝐆𝐢𝐧𝐞 • 𝐮𝐧 𝐚𝐦𝐨𝐫 𝐝𝐞 𝐯𝐞𝐫𝐝𝐚𝐝Donde viven las historias. Descúbrelo ahora