Osomatsu-san no me pertenece, solo uso sus personajes con el fin de saciar mi pasatiempo.
_______________________________________________________________
Karamatsu ha pasado un largo tiempo con el cabello largo, se ha dado cuenta lo terriblemente cansado que es cuidar de él; al ser algo narcisista siempre lo peina y lo tiene libre de enredos.
Pero fue al ser hombre, era corto y practico, cada mañana necesita por lo menos media hora (como el narcisista que era) para desenredarse; ahora siempre se le enredaba y va al tocador checar si no existe alguna imperfección. Obtiene tips tanto de Totoko y Jyushiko, pero ninguno le llega a convencer.
El verano está a la vuelta de la esquina y eso significa que el próximo domingo sus hermanos se cortarían el pelo entre ellos.
―Karako-neechan ¿te ocurre algo?
― ¿Qué tan difícil es corta el cabello largo?
Todos le miraron fijamente, era como si dijo una palabra prohibida.
―Absolutamente no...
― ¿De qué hablas, Choromatsu-niisan?
―Ella no puede cortarse el cabello, la preferimos con ese corte.
―Pero me muero de calor, Osomatsu.
―Eso lo puedes arreglar con tu novia...―ante esas palabras Ichi le pateo.
― ¿Por qué tan interesados?
―Kusoko, ¿Qué paso con la hermandad?
―Exacto, la hermandad...―replico Totty―Los Matsu prefieren el largo en el cabello de las mujeres.
Estúpido código de prepa, recuerda con exactitud que lo hicieron ―por una razón en particular, que ahora la veía ridícula― le preguntaron a él sobre sus gustos en mujeres, fue una chica; al contárselos a sus hermanos tuvieron la epifanía que serían populares hasta el punto donde siempre tendrían que responder las mismas preguntas.
Así que Choro hizo un protocolo que todos dijeran lo mismo y no habría complicaciones; generalizaron sus gustos y cada uno tenían una preferencia que los identificaría. Eso nunca sucedió, solo se quedó en una propuesta floja de una chica para una encuesta:
―Eso fue absurdo―zapateo y se fue furiosa.
Todos tuvieron que resguardar a Jyushi, cada uno tenía su peluquero personal desde que su madre hizo consciencia de ser más económico un corte en casa, ninguno cambia Kara despunta a Jyushi y viceversa. Descartaron la idea que iría a una peluquería, ellos tenían principios que no podían romper y Karamatsu nunca los decepcionaría.
Pero ella no era ahora Karamatsu, era Karako...
Escapó de casa y fue a la peluquería más cercana, para su mala suerte los precios eran altísimos ¿Qué tanto podían cobrar por un mendigo corte? Regreso rendida, pero cuando llego a la ventana donde escapo se topó con Ichi con tijeras en mano. Reacciono de inmediato.
― ¡Dame las tijeras!―gritó mientras se abalanza sobre él.
―Ni en sueños, Kusoko.
―En serio necesito ese corte.
La cosa nunca iría acabar por el simple hecho que con esa forma no lograba alcanzar las putas tijeras, el cuarto parecía divertirse con demasía sobre esa forma. Ella le hubiera dado una patada en los huevos, pero no llegaría tan bajo. Él era un hombre (no por ahora).
Pero el respeto a las bolas ajenas, es la paz.
Un código sagrado de tiempos antiguos.
Así que usaría otra estrategia...
― ¿Sabes qué...? Me rindo
― ¿Tan rápido?
―Es decir, solo estaba pensando que el calor me sofocaría. Pero como ustedes dijeron el protocolo es el protocolo; no somos los únicos que aman el cabello largo de las beauty girl's...Eso devastaría a muchos hombres al no verme en esa máxima expresión de belleza...
No logró terminar cuando Ichi azotó una silla, y pidió que se sentará en ella en silencio.
―No te muevas, porque te corto una oreja.
El sonido de la herramienta sonaba y era calmante, Kara se puso a divagar en lo sencillo que fue engañarle; solo tenía que decir de forma indirecta que tendría más pretendientes tras de él (ella). Ese pensar se mezcló con otras ideas dispersas sobre Ichi, pronto comenzó a sentir las mejillas arder ante la cercanía de su hermano.
La cuchilla dejo de sonar, Kara se incorporó con la intención de agradecerle, pero el quedo en silencio con un sonrojo creciendo de oreja a oreja.
― ¿Tan mal se me ve el corte así?―hablo el segundo tocando su nuca despejada.
Ichi negó y con la mano temblorosa acarició una de las mejillas de la azul.
―Te vez hermosa...
La cercanía se hacía más obvia y el sonido de ambos corazones fundirse en la habitación. El morado tuvo suerte que sus hermanos llegaran de manera escandalosa antes de darle un beso.
Lo regañaron y dijeron un montón de estupideces, de las cuales la mayoría venían de Osomatsu. Ichi se sintió bien de que los interrumpieran, aún no estaba preparado para expresarse de esa manera...
Tampoco Kara.
_______________________________________________________________
¿Gustan reviews?

YOU ARE READING
Karako
Fanfiction[[Serie de drabble's y one's-shoot]] Kami te puede conceder tu deseo, aunque no de la manera que tu deseas... {Hecho por: Gotti Calavera}