The Mafia's Daughter »Terminada«

Capitulo 37

Cárter POV:

Ella se sentó en la cama y yo me recoste en la cama. La jale del brazo haciendo que cayera acostada. Subió la mirada y Sonreí.

-¿sabes que aun puedo matarte?.-me amenazó con la ceja levantada.

-lo se, pero no lo harás.-dije dejando de ver el televisor y mirándola.

-¿Como puedes estar tan seguro?.-me preguntó y me encogí de hombros.-soy peligrosa, agresiva, bipolar, impulsiva, podría hacerlo sin darme cuenta.-dijo sincera. Pero me sonaba mas como una advertencia que gritaba »DANGER«.

-se perfectamente quien eres.-dije seguro mirándola a los ojos.

-no, no lo sabes.-dijo sin despegar su mirada de la mía.-solo sabes de mi lo que yo quiero que sepas y de lo que te has dado cuenta los últimos meses que llevas aquí.-.dijo. Sentí como su mirada se oscurecía.
Su maldad comenzó a salir a flor de piel. Se paro de la cama y salió de mi habitación.

Hayden POV:

Me pare de su cama y salí de su habitación. No quería decir algo o hacer algo de lo que podría arrepentirme después.
No quería ser Diabla con el.
Quería guardar el rencor pero lo sentía mas que nada.
Baje las escaleras. Llegue a la habitación de Nani y toque su puerta. Ella me abrió en seguida.

-mi niña.-.dijo haciéndome pasar. Me senté en su cama y me recargue hacia atrás. Tome una almohada y me la puse en la cara. Ella se sentó a mi lado luego de haber cerrado la puerta y me puso la mano en el brazo dándome pequeños masajes.-¿que sucede?-.dijo tierna como solo Nani solía ser.

-soy un desastre.-.dije aun sin quitar la almohada de mi cara.

-hay mi niña-.dijo soltando una carcajada.

-te hablo en serio Nani, no te rías.-.dije aun bajo la almohada.

-haber dame eso y hablemos.-.dijo intentando quitar la almohada de mi rostro. Cuando por fin la quito ella se sentó pegada al respaldo de la cama y yo puse mi cabeza en sus piernas.

-siento algo raro por Cárter.-.dije mientras ella soltaba mi trenza y me peinaba el cabello con los dedos.

-te gusta Cárter.-.dijo traduciendo lo que yo le había dicho.

-pero he llegado a pensar que es algo mas fuerte que solo atracción Nani, cuando estoy con el quiero besarlo. Quiero que me abrase y no me suelte. Me siento tonta. Soy totalmente débil..-.dije y solté un suspiro.

-¡que patética!.-.dijo Amber abriendo la puerta. Me puse derecha inmediatamente.

-¿que haces escuchando lo que no te importa?-le reclame molesta.

-¡No es mi culpa que seas tan idiota, venia por Nani y tu estabas soltando tus cuentos de perra!.-.dijo casi en un grito.

-vuelve a decirme perra y te juro que te va doler.-.le dije levantándome y haciéndome una cola de caballo rápida.

-¡Perraaaa!-.dijo arrastrando la "a". No aguante mas y me abalance sobre ella. Ella tropezó y comenzamos a caer por las escaleras. Ella me tenia del cabello y yo le pegaba con el puño.
Entre la caída ella alzo la rodilla y me impacto el labio haciendo que se rompiera.
Al terminar de caer me subí en sima de ella. Le di varios golpes en la cara.
Escuchaba gritos desesperados y sentía los pasos rápidos pero estaba demasiado furiosa como para prestar atención.
Alguien me tomo de la cintura y me alzo.
A Amber igual. A ella la tenia agarrada Tobías y Dylan.-¡POR QUE NO LES DICES HAYDEN!.-.grito. Tobias abrió los ojos y Dylan igual. La sangre me hervía. ¿Como es que ella sabía mi verdadero nombre?. Luego recordé el día en que Nani me había regañado en la cocina. Me había llamado por mi nombre, y yo sentí que alguien estaba ahí. Había sido ella.
Mire al suelo y ahí estaba mi arma. Se me había caído mientras rodaba por las escaleras. Cuando intente soltarme para tomarla Cárter llego y también me sujeto.
Me alzo en sus hombro y comenzó a subir las escaleras. Yo solo pataleaba y golpeaba su espalda ignorando lo gritos he insultos de Amber. El abrió la puerta de su habitación y me soltó en su cama. Le puso seguro y guardo la llave en el bolsillo trasero de su pantalón.
Entro al baño y yo me quede sentada en la cama. Suspire y me acosté hacia atrás. A los minutos llego con una caja de primeros auxilios. El se sentó como anterior mente estaba Nani y yo puse la cabeza en sus piernas.
Al pasar el algodón por mi labio solté un quejido y cerré los ojos con fuerza hasta que termino.

-¿no tienes mas golpes?.-me pregunto. Sentí una punzada de dolor a un costado.

-me duele por aquí.-le dije intentando mostrarle.
El me jalo y caí en su regazo. Puse mis piernas a sus costados. Me alce la camisa, pero era grande así que me la quite toda. El tomo la pomada para golpes y el la aplico con delicadeza y ahí me di cuenta que estaba sobre el.
¡En sujetador!. El subió la mirada a mi cara y yo estaba roja. Nunca había estado en una situación como esta. Me miro como pidiéndome permiso. Se acerco a mis labios y empezó a besarlos lento. Sentí sus manos en mi trasero y de sus labios salio un gemido. Sus manos comenzaban a acariciar mi espalda. Quería más, necesitaba más. Comencé apretar su cabello con necesidad. El comenzó a besar mi cuello y sentía estar en el cielo. Con un rápido movimiento me puso debajo de el. Se paro y apago la luz. Luego se subió encima de mi desabrochándo mi pantalón y lo deslizó por mis piernas. Pero una parte de mi grito "¿QUE HACES?"

Me separe de el bruscamente. Y el abrió los ojos sorprendido. Se acostó en mi lado he intento controlar su respiración. Debe odiarme.

–lo..lo siento-.dije con la voz entrecortada y la respiración agitada.

–tranquila princesa, Disculpame tu a mi.-.dijo dándome un beso en la frente. Se paro y fue al baño. Tardo una eternidad así que supe que hacia. Después de un rato salió. Se acostó a mi lado y se tapó con las sabanas. No hablo más. Ya me había puesto la ropa. Y aún no pronunciaba palabra alguna.–Quiero hacer las cosas bien contigo.-.dijo de la nada mirando al techo.–En verdad me gustas, no soy el típico hombre que habla de sus sentimientos; pero no puedo más. Quiero hacerte feliz y aunque no sepa quien fuiste ni que hiciste. Se quien eres ahora y eso es lo que me importa.-suspiro.–¿Quieres ser mi novia?-el estaba nervioso. Al parecer mi respuesta era importante. No sabia que decir.

–Si.-el me miro sorprendido y me dio un beso.–pero sabes que no soy romántica, ni muy cariñosa y esas cosas.-le advertí.

–por esas mismas razones me gustas.-.dijo sonriente..