The Mafia's Daughter »Terminada«

Capitulo 46

"El Principio de mi Fin"

Hayden POV:

Tome mi traje y me lo puse, me puse mis botines. Me mire al espejo y en mi mirada se reflejaba mi rabia. Diabla ah vuelto.
Me tome el cabello en una coleta, tome mi casco, las llaves de mi moto y la fotografía y baje. Cárter ya tenia sus maletas ahí. Todos voltearon a mi y me miraron con ojos de suplica. Me acerque a Amber.

–siempre fuiste como la mie*rda en mi zapato.-acepté–pero eres de la banda, así que eres de mi familia.-dije y ella sonrió.–Tú.-dije refiriendomea a Shopia.–acepta tu edad y crece..- ella asintió.–cuida de ella.-le dije a Chris. Mire a los chicos.–Saben que ustedes son como mis hermanos, no dejen sola a Nani. Cuiden de ella como su propio cu*lo.-le dije a Matt, Logan, Tobias y Ale. Los abrase, y se que sonara raro. Pero me arrepiento de haber desperdiciado la oportunidad de abrazarlos todos los días.–deja de llorar viejita.-dije abrazando a Nani que lloraba sin parar.–no me lleve mucho contigo. Pero sal de esto, antes de que sea demasiado tarde. Eres un gran hombre.-me refería a Tonny.–Cuidate, cuida de el.-le dije a Ryan, refiriéndome a Cárter.- asintió y me acerque para abrazarlo.

Gire sobre mis talones dándome cuenta que solo me faltaba Cárter.
Me acerque y desvío su mirada de mi. Tome su mentón y mire sus hermosos ojos miel. Los cuales estaban llenos de lágrimas, las cuales amenazaban con salir, me acerque a sus labios sin juntarlos.–me diste la mejor noche de mi vida.-le susurré. Le di un pico y al separarme, el cerro los ojos con fuerza. Pero una lágrima recorrió su mejilla.–un hombre que yo conozco, me dijo que los hombres nunca lloran.-dije limpiando su mejilla. El dio una media sonrisa y me abrazo. Nani cada vez lloraba más.
–ya huí una vez, y esa no es mi estilo. Esta vez no. Nací para esto.-me aleje de Cárter. Abrí la puerta y ellos salieron conmigo.

Busque con la mirada a mi fiel amiga. Estaba tapada con una cortina plástica. La destape y Sonreí al montarla. Me puse el casco que cubría todo mi rostro. Deje caer todas las lágrimas que guarde desde hace mucho tiempo. Encendí la moto y me despedí como militar. Ese era mi fin. Y que mejor hacerlo como más me gusta.

Salí a alta velocidad sin mirar atrás. Las lágrimas salían sin control. Y recordé toda mi vida. Siempre fue así. Mi vida en riesgo, mi familia en riesgo.

Mire hacia delante, no había vuelta de hoja. A lo lejos vi el camino de tierra, mis ojos se secaron. Me adentre a donde me habían citado y estacione mi moto debajo del árbol de siempre. El almacén estaba sólo. Entre sabiendo que llegarían de repente, o que me golpearían o algo. Sentí una mano en mi boca y nariz. No luche ya no más, solo sentí el pesar de mi ojos y los cerré.