Hola, Chester.
El mes de noviembre ha sido el peor, y por eso no te he escrito.
Todos los días lloraba escuchándote cantar.
Todos los días.
Perdóname, por favor.
No quería hacerlo. Pero es inevitable.
Eres inevitable.
Y ahora, este es mi Diciembre.
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Hola, Chester.
RandomDesde el 20 de Julio de 2017, sentía la obligación de escribirte. Y que donde quiera que descanse tu alma, esté por fin feliz. Gracias a ti fuimos un ejército. Y ahora lucharemos por nuestro capitán.