Enamorada De Los Bennett

Lo prometo (parte 2)

Liam me dejo sola para que pudiera descansar, me quede dormida no se por cuánto tiempo hasta que sentí que acariciaban mi cabello, abrí mis ojos para ver quién era.

— Lo siento no quise despertarte — Connor estaba sentado junto a mí en la cama

— Tranquilo — me senté

— ¿Te sientes mejor? Liam me dijo que sangraste otra vez

— Si, aunque la verdad últimamente me duele un poco la columna y me canso con facilidad, fuera de eso estoy bien

— Entiendo, te traje algo — me mostro una pulsera con un dije en forma de cámara

— Es hermoso, gracias — lo abrace

— Dakota — me miro fijamente y puso su mano en mi rostro — Yo... — me beso

— No — lo aparte de mi — no puedo hacer esto, no otra vez

— Lo siento es mi culpa — se levanto de la cama — te dejare sola

— Connor — me miro — También te amo pero no es el mismo amor que siento por Andrew, es diferente y no quiero hacerte daño

— Lo sé — y se marcho

Me acosté nuevamente en la cama, mi vida era un desastre que no sabía cómo arreglar. Mi madre entro de repente despertándome.

— Cariño, baja a comer

— Estoy cansada mamá, no tengo hambre

— Te traeré la comida, no te acostaras sin comer — salió de la habitación

Al poco rato entro con mi comida Andrew, me la dejo en la mesa de noche y se sentó a mi lado en la cama.

— Sigo despierta — le dije

— Creí que dormías, aquí está tu comida

— Gracias y mi madre

— Yo le dije que te la traería

— Gracias

— Lo hago con gusto — se paro

— Andrew — lo tome de la mano antes que se fuera — quédate conmigo

— Esta bien, mientras comes — se sentó otra vez y me paso la bandeja, me acomode y empecé a comer — ¿Y eso?

— ¿Qué?

— Tienes un collar con la letra A pero tu nombre empieza por D

— Si es cierto — me lo quite y se lo di para que lo viera mejor — Tu me lo diste

— Yo... — cerro los ojos — lo siento me siento un poco mal — se paro y se fue llevándose el collar.

¿Qué le había pasado? No entendía, me quede sola comiendo y al terminar deje la bandeja a un lado y me quede dormida nuevamente, estaba realmente agotada.

Andrew

Me senté en la silla que estaba en mi balcón, mirando fijamente el collar, sentía que había algo que tenía que recordar pero no sabía que, quizá se lo había regalo como bienvenida a la familia pero ¿Por qué la letra A? ¿Por qué con la letra de mi nombre? Tocaba el dije como si eso me ayudaría en algo, me sentía sumamente frustrado, sin una parte de mi memoria. <<Recuerda Andrew, recuerda>> me repetía una y otra vez pero nada venia a mi mente, era molesto, quería recordar, tenía que hacerlo. Sabía que este collar me ayudaría a entender porque razón me dolía tanto que Dakota estuviera enferma. Al escuchar esa noticia no supe cómo reaccionar, sentía que una parte de mi, una que no recordaba estaba muriendo y jamás la podría recuperar. Me pare y camine por la habitación con el collar aun en la mano buscando una respuesta, me recosté en la cama y cerré los ojos, tenía que relajarme esto se estaba saliendo de mis manos.

— No se muevan, eso es ¡Listo, lo hice! — esa chica saltaba de emoción, al fin había podido lograr tomar la foto y los pájaros se fueron volando. Jamás había visto tanta emoción por una simple foto en mi vida, su alegría era contagiosa y desde ese día la quise en mi vida.

Creí que era un sueño, uno que se sintió muy real, ya la conocía, ya la había visto y había quedado totalmente intrigado de quien era. Abrí mis ojos, era ella ¿Cómo pude olvidarla? Sentía que aun me faltaban cosas por recordar pero esta vez sabía que si era posible recuperar esa memoria que ya no estaba, esto que siento no es cariño de hermano, me duele el hecho de saber que tal vez la pierda, porque siento algo más por ella. La olvide y la perdí por un momento pero esta vez haría todo lo posible para recuperarla y haría todo lo posible para no perderla otra vez. Fui corriendo a su habitación, estaba sentada leyendo un libro en el balcón, que hermosa era, me acerque y puse el collar frente a ella, me miro y me regalo una sonrisa, dios ¿Cómo pude olvidarme de ella?

— Creí que no me lo devolverías — me dijo

— Es tuyo — se lo di y me senté a su lado — Dakota, Te amo

— ¿Qué dijiste? — vi como lagrimas empezaron a correr por su rostro, me acerque a ella

— Te amo — le repetí — y no dejare que la vida me aparte de ti otra vez, te lo prometo.