Capitulo 4

13.9K 904 114
                                    




Lauren entro a la habitación encontrándose a la morena mirando al techo, imagino que estaría realmente mal al hecho de perder la voz y al mismo tiempo las piernas, no es algo para digerir tan rápido.

Se acercó lentamente a la cama, ganándose que la morena la mirara y guiara su mirada de nuevo al techo mientras una lagrima recorría su mejilla.

-Hola Bebé, no has dado un buen susto- dijo la ojiverde intentando tomar la mano de la morena, que la parto rápidamente, girando su rostro al lado contrario de Lauren –Camila, he estado preocupada- dijo lentamente a ver si la morena reaccionaba, pero solo escucho un leve sollozo.

Apunto a la mesita en donde había una pequeña libreta, Lauren capto todo rápidamente y ya le estaba estirando el pequeño objeto con el bolígrafo.

"No estas atada a mí, ahora menos" fue lo que escribió ganándose una mirada severa de la ojiverde.

-¿Qué te pasa Camila?- dijo lo mas calmada porque estaba segura que su paciencia se iría al caño.

"Estoy invalida y además muda ¿Qué haces aquí conmigo?" le mostro de nuevo la libreta mientras miraba con molestia. La ojiverde por su parte respiraba profundo para no pegarle la libreta en la cabeza.

-No pienso irme, ni porque me lo pidas, entiendes Cabello- fue la respuesta de la ojiverde dejándose caer en el sillón.

"Claro que puedes, soy inservible" escribió causando que la pelinegra de verdad echara fuero.

-Eres estúpida no, no es una pregunta es una afirmación, Somos pareja y no pienso dejarte- comento con un tono de voz de demanda.

"Puedes tener a cualquiera, ahora más que nunca, además de llamarme Nerd puedes sumarle muda e invalida" le paso la libreta cuando Lauren alzo la mirada vio como las lágrimas caían de ella.

-Arrímate- como pudo la chica lo hizo y Lauren se recostó al lado de ella, al principio la morena estaba algo rígida al sentir a la ojiverde –Somos una pareja ¿Lo sabes?- pregunto ganándose el asentimiento –No me importa nada, te amo a ti Camila, nadie puede ser tu así que poco a poco saldremos de esta, lo prometo- fue lo único que dijo la ojiverde para sentir el rostro de su novia encajarse en su cuello, podía sentir la humedad de las lágrimas y el leve sollozo que causo que ella misma llorara.

Paso su brazo por encima de la cabeza y el otro tomo la mano de la chica la que no estaba enyesada y entrelazo sus dedos.

-Aunque no estemos casadas, aun no pero estaremos juntas hasta que la muerte nos separe- dijo con calma dejando un beso en la sien de la morena causando que se acurrucara como podía con su novia.

La puerta se abrió lentamente, casi inaudible, eran los padres de ambas que al entrar se encontraron con la imagen más preciosa que habían visto.

Los padres dela morena sabían los sentimientos de la mayor hacia su hija, al igual que los de Lauren, así que sabían que sola nunca iban a estar.

Con un respiro profundo terminaron de entrar y despertaron poco a poco a las dos chicas que se habían dormido abrazadas. El doctor entro y se dio cuenta de lo que los padre lograban hacer y solo dijo –Si no puede dormir, tráiganme a esta chica- apunto a Lauren causando la sonrisa de los padres.

Media hora más tarde Lauren se encontraba en el cafetín hablando con Dinah que había venido a ver a la morena, y luego de eso mientras el doctor revisaba a la castaña. Ese tiempo paso volando así que la ojiverde entro y se encontró con el doctor hablando con la chica.

-Debes hacer terapias de las piernas- comento causando el asentimiento de la morena que giro su mirada a la ojiverde que ahora se posaba al lado de ella.

-Existen buenos especialistas en ello ¿Cierto?- pregunto Lauren.

-Si hay un amigo mío que es muy bueno, se los recomiendo- acoto –Pero es muy caro así que...- el hombre quedo a media cuando escucho a la ojiverde.

-Eso es lo de menos, siempre es mejor optar por lo mejor, ya que lo mediocre no permite avanzar- dijo con seguridad mirando al hombre.

La morena veía todo divertida, sabía que no tenía voz pero estaba segura que con Lauren al lado eso no sería problema –Entiendo joven- el hombre anoto el nombre en un papel junto al número de teléfono y se lo paso a la morena.

-Está más que claro que ella no podrá llamar- acoto la ojiverde causando que por primera vez desde que despertó la morena se riera, joder esta mujer seria su muerte una preciosa muerte.

El hombre se retractó y extendió el papel a la pelinegra que lo guardo en su bolsillo –Las dejo- el doctor salió de la habitación causando que Lauren se acercara y dejara un beso lento en los labios de su chica.

-En dos días sales de aquí- le informo causando el asentimiento, estirando la mano hacia la libreta que fue pasada por Lauren.

"¿Segura que aun así deseas estar conmigo?" pregunto dudosa la morena.

-Otra vez Nerd, otra vez- contesto con una sonrisa contagiándosela a su novia.

"Solo pregunto" se encogió de hombro cuando Lauren leyó.

-Deja de preguntar- fue la escueta respuesta de la ojiverde.

Luego de eso Lauren le conto que había ocurrido en el accidente y que al parecer no fue un accidente como tal, así que las preguntas llegaron a la mente de ambas sobre quien podía hacerle daño a Camila o a las dos en sí.

Darle la comida a la morena si fue gracioso para ambas, dado que recordaron las veces que Lauren le había dado de comer solo por juego y ahora si lo ameritaba, ya después de mucho tiempo juntas le cedió el paso a los padres de la morena.

Lauren había dejado de asistir a sus clases para hacerlas en el hospital mientras ayudaba a la morena, que cada día era un infierno para ella, ya que no mover las piernas, ni hablar y tampoco hacer tareas era un dilema, pero con Lauren allí todo era más llevadero.

Era el momento de ir al departamento una semana después, ya que le habían extendido por los dolores los días de estancia en aquella clínica.


-Hogar dulce hogar- dijo Lauren al pisar el departamento con Camila en la silla de ruedas y los padres detrás.

-Debo admitir que tienen el departamento en condiciones aprobatorias- dijo Mike causando la sonrisa a la morena –No lo había dicho antes por motivos de correr, corre- comento el hombre mientras se sentaba en el sofá del sitio acompañado de su mujer.

-No nos queremos sentir muy cómodos, porque nos vamos ahora- comento Sinú la madre de Camila, entendían que ellos habían dejado su trabajo por venir así que era de esperarse.

-Sin embargo, si necesitan cariños maternos nos llaman- comento Clara levantándose y llevándose a su marido con ella.

Solo bastaron unos despidos para que el departamento quedara de nuevo en silencio. -¿Deseas comer pizza?- pregunto Lauren sentándose en el sofá cerca de Camila.

Asintiendo llamaron a la pizzería cercana y luego de varios minutos estaban llevando la pizza a la cama. Con un poco de ayuda la morena se acostó aún tenía la pierna enyesada así que no podía quejarse de las atenciones de su novia, solo bastaron varios minutos y una caja de pizza en el suelo para que Lauren terminara acurrucada durmiendo en los brazos de su novia.


****Espero les guste y disculpen si existe algún error***

"La Nerd" 2da Parte (Camila G!P)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora