Capitulo 8

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-Estas de pie- es lo único que logro decir, no tengo más palabras que pueda soltar, la emoción inundaba mi ser.

La veo caminar lentamente aun desnuda para sentarse al lado mío con una sonrisa adornando su rostro, poco a poco con señas me dice "Te amo".

Mis lágrimas siguen bajando como si no pueden detenerse y lo único que hago es abalanzarme sobre ella y enrollar mis brazos alrededor de su cuello para sentir sus brazos alrededor de mi cintura acariciándola lentamente.

Mi corazón se hincha de felicidad al saber que el amor de mi vida, puede volver a caminar y tengo la misma fe de que volverá a pronunciar palabra, pero por ahora quiero disfrutar de ella de nuevo caminando.

-¿Cómo paso esto?- pregunto mientras acunaba sus mejillas en mis manos y dejaba besos por todo su rostro mientras veía como su sonrisa no se apartaba de su rostro. Mi cabello había caído hacia mis pechos y me hice consciente de ello cuando sentí que lo pasaba detrás de oreja y dejaba un beso en mi mejilla para lentamente ir llegando a la comisura de mis labios y así atraparlos entre los suyos. Lento y suave, sin apuro de hacer algo que nos encanta. Éramos solo ella y yo en nuestra burbuja de amor.

-¿Cómo?- vuelvo a preguntar y ella solo tiene un encogimiento de hombros, sé que se lo guardara para otro momento, pero mi felicidad no se acaba.

Como puedo me siento a horcajadas encima de ella y aun con mis manos en su nuca le tomo un beso, del cual yo me hago cargo (Claro que me hago cargo yo soy la escritora) introduzco mi lengua en su boca y juego con la suya, es un beso que domino y me encanta sentir sus manos hundirse en mi piel.

El beso va subiendo poco a poco de tono y con ello mi excitación a un nivel más allá de lo esperado, o mejor dicho de lo que pensé.

Sus manos fueron subiendo gradualmente mientras enterraba mis manos en su cabello para atraerla más a mí, y así como subió lento bajo de la misma forma hasta tomar mis glúteos entre sus manos y apretarlo.

Un gemido involuntario se escuchó desde mi garanta cuando sentí su miembro erecto justo cuando me apretó hacia ella. Mis movimientos se incrementaban al movimiento de su cuerpo debajo de mí. Lentamente baje mi mano tocando así su clavícula, su pecho izquierdo, pase mis dedos por su abdomen y así pude ir sintiendo lo acelerada que se estaba tomando su respiración hasta toparme con su pene erguido entre su cuerpo y el mío.

Solté sus labios con un delicioso sonido mientras incrementaba mis movimientos, mientras yo tomaba su miembro en mis manos, ella traslado su mano derecha hasta toparse con mi clítoris hinchado.

-¡Ohh Dios!- sentí el revoloteo de mis parpados, para así incrementar el moviente de mi mano en su pene y restregarse en su mano.

Mis movimientos se estaban acelerando cada vez más y justo sentí un nalgada – ¡SANTA MIERDA!- prácticamente grite y cuando abrí mis ojos para encararla vi su sonrisa de lado y antes de decir algo otra palmada dio directo en mi trasero, por un momento quise protestar pero cada nalgada hacia que en vez de quejarme, lograba hacerme gemir.

Palmada tras palmada en mi trasero rojo hicieron mis movimientos más necesitados de ella, dejando a un lado seguir masturbando su miembro, sé que ella disfrutaba de la vista que tenía de mí, dejándome hacer lo que a ella le placía. Y justo cuando pensé que no podía hacer nada más que dejarme venir su brazo derecho rodeo mi cintra y alzo y cuando abrí mis ojos sentí como me penetraba de una sola estocada.

-¡CAMILAAAA!- un gemido alto se escuchó con el golpe del orgasmo en mi cuerpo, estaba muy sensible y solo basto que me penetrara para ver el cielo y las estrellas de un solo golpe.

Mi respiración estaba acelerada, deje caer mi frente justo en sus labios y así sentir el beso delicado que dejo para girarnos y quedar encima de mí, separo mi pierna colocándose de rodillas entre ellas y así alzando las mías entro fuerte y duro dentro de mí.

Tomaba todo lo que yo le daba de mí, entraba y salía de mí, al estar sensible del orgasmo anterior podía sentir como se iba formando de nuevo mi próximo orgasmo, como pude abrí mis ojos y me encontré con su rostro casi cerca del mío dejando un casto beso para entrar fuerte de una estocada luego de salir casi completamente de mí, lleve mis manos hacia la cabecera para poder responder sus embestidas, mis pechos se movían las ras de los movimientos que se realizaba y la cama hacia el ruido del golpeteo.

Pobre de nuestra vecina, creo que pensó no volvería a escuchar estos sonidos en un buen tiempo, en fin pobre por ella y afortunada yo.



Abrí mis ojos lentamente, estire mis brazos para encontrarme sola de nuevo en la cama, estaba prácticamente como cuando estábamos en el sofá, mire alrededor y no la encontré acostada al lado mío, me senté en centro de la cama y estaba debatiéndome entre ir y buscar a la latina mía o quedarme aquí un rato más, paso mi mano por mi cabello acomodándolo un poco y justo allí caí.

-¿Todo fue un sueño? Siento que hice esto antes- dijo en voz alta y cuando estaba tratando de sentir felicidad por que su novia podía caminar, caigo en cuanta que todo pudo ser un sueño.

Poso su manos en la frente tratando de contener las lágrimas, era un sueño bastante real había creído que su novia de verdad había estado de pie nuevamente pero no fue así. Enterró su cara en sus manos y sus lágrimas comenzaron a bajar.

Poco a poco quito sus sabanas y se levantó de la cama aun desnuda. –Me la había creído- se decía a su misma mientras habría el grifo de la ducha para así sentir el agua fría correr por su cuerpo, no era amante del agua fría (Yo si :v) pero la necesitaba para despertar todo aquello que pensó era real.

Bastaron unos minutos para salir de aquel baño y limpiar un poco el espejo luego de enrollarse en su toalla de baño.

Ya vestida y saliendo del cuarto se le paso una pregunta por la mente "¿En todo este tiempo en donde estuvo Camila?" aun así siguió caminando hasta toparse con la nevera y tomar una lata de coca cola y sacar de uno de los cajones unas galletas oreos de chocolate, su favorita y sentarse en el sillón.

-Juro por Dios que fue muy real- dijo mientras dejaba el aperitivo en la mesa de centro que volvió a colocar en su sitio y cuando se quedó caer en el sofá acuno su rostro mientras revivía a Camila caminando justo delante de ella.


Fue cuando sintió abrirse la puerta del departamento, sabía que era Camila pero no quería alzar la mirada y volverla a ver en silla de ruedas y que todo aquel sueño de verdad haya sido una mentira de su conciencia por ver a su novia de nuevo de pie.

Entonces vio como un par de converse, las favoritas de su novia estaban delante de ella, y así gradualmente quito las manos de su rostro y fue alzando la mirada para recorrer desde la imagen de los zapatos deportivos, ver las piernas de su novia y alzar la mirada para verla completamente de pie, estaba allí con algunas bolsas de comida rápida en sus manos.

-¿Fue real?- dijo lentamente mientras la miraba de arriba abajo.

Vio como la morena ladeo la cabeza y asentía lentamente.

Y justo allí supo entre lágrimas y rodeando a su novia en un fuerte abrazo que poco a poco su vida volvía a tomar el rumbo que tanto había deseado.




***Espero les guste y disculpen si existe algún error, lo digo porque estoy escribiendo de la compu de mi hermana y se siente raro, así como cuando sabes que no es tu laptop y sabes que no tiene los mismo truquitos que la tuya***

***Disculpen además la tardanza, el que está leyendo mi libro de O.S sabe lo que ha estado pasando en mi vida y que no ha sido nada fácil volver a retomar la escritura luego de la depresión, las ganas de cerrar la cuenta de wattpad luego de varias cosas y la muerte de mi madre***

***Así que espero lo disfruten y espero retomar mis dos historias como lo iba realizando, recuerden este mini fic consta de aproximadamente 10 u 11 cap así que ya casi casi termina***

"La Nerd" 2da Parte (Camila G!P)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora