"La Nerd" 2da Parte (Camila G!P)

Capitulo 6

Dos meses después...

-Camila ¿Cómo vas?- pregunto la profesora de lenguaje de señas.

-Mejorando- hizo la seña que correspondía.

-Lauren- la profesora llamo a la ojiverde que hablaba animadamente con uno de los chicos que estaba aprendiendo el lenguaje de señas.

-¿La amas?- pregunto la profesora lentamente mirando hacia Lauren, logrando el asentimiento de la morena mientras bajaba la mirada.

-Hola tu- dijo Lauren sorprendiendo a la morena sentándose en las piernas.

Sintió la caricia de la morena por su espalda mientras acariciaba su brazo desnudo con su nariz.

-Camzi- dijo bajito la ojiverde dándole un besito en la nariz sacándole una sonrisa a la morena –Te amo- dijo silenciosamente mientras sonreía.

-Ustedes dos son adorables- comento la profesora para retirarse de aquel lugar.

-Venga yo quiero empujar- dijo emocionada la ojiverde comenzando a empujar a la morena que tenía una sonrisa.

Comenzaron su recorrido hasta llegar al auto de la ojiverde.

En estos dos meses las cosas estaban entre mejor y peor, para lo morena fue un reto bastante inmenso llegar y ahora ser notada como la Nerd, muda y además paralitica, por los pasillos más de una vez mientras rodaba en su silla escucho que la ojiverde solo estaba con ella por lastima, lo que ocasiono en innumerables veces peleas entre ellas.

Lauren por su parte trata de solucionar todo eso, actuando de la forma más radical posible que fue dejar de hablar con aquellas personas y sobre todo dejando un anuncio por toda la universidad, en el que consistía de que si en algún momento volvía a escuchar ese tipo de frases su padre iba a demandar a cualquier por cualquier cosa insignificante.

A la morena de primeras le cayó mal, pero no escuchar eso fue un alivio para sus oídos ya que no tenía palabras para defenderse.

En el transcurso de esos meses la ojiverde de encargo de ser la mejor novia del mundo y por eso luego de pelear y verla llorar la morena entendió que ella no era un mujer cualquiera, era suya y la debía hacer feliz así que todo fue disminuyendo y más cuando la morena comenzó hacer terapias para poder caminar.

Al inicio llegaba agotada a tal punto que los músculos de sus brazos terminaban adolorido, en ese tiempo de casi 3 veces a la semana hacer terapia los avances fueron esplendidos y más cuando logro caminar toda la extensión de la barra en el menos tiempo durando esas semanas.

Por otro lado estaba las sesiones de lenguaje de señas, al inicio fue lo más tedioso y fastidioso a lo que la morena podía asistir, pero al ver el gran entusiasmo de la ojiverde y la felicidad de poder comunicarse con ella, sus expectativas de eso cambio.

Por un lado Lauren aprendía cada palabra nueva con señas y lo practicaba con la morena que al ser tan buena estudiante aquí no fue una excepción, aprendió cada una de las señas y formulaba palabras y frases muy complejas, logrando confundir a la ojiverde hasta entender.

Hasta ahora la morena aun con sus miedos de ahora ser poco para Lauren y la alegría de Lauren de intentar ser todo para Camila, la relación iba de bien en mejor y más cuando veía a la ojiverde sonreír porque la llevaba a algún sitio sentada en sus piernas.

Palabras textuales de Lauren "Si estarás allí, saquémosle provecho" cosa que en vez de molesta a la morena le sacó una gran sonrisa, sabía que su chica estaría con ella pase lo que pase.

Pero aunque ella dijera estar bien a veces recordaba todos esos momentos que pasaban y ahora se limitaban, no, no hablo de sexo porque a pesar de todo a la morena el apetito sexual no se la había ido y a la ojiverde le crecía cada vez más.

-Venga Camila, llegamos a la terapia a donde está el doctor buenote- comento la pelinegra sonriendo sabía que a la morena le molestaba ese terapeuta porque parecía que se comía a su novia con la mirada, pero a diferencia de le doctor Lauren se la comía a ella mientras hacia sus ejercicios.

-No- dijo bajo y freno de golpe la silla.

-A ver Camzi bebé- dijo como si lo que había dicho no tenía otra insinuación.

-¿Te gusta? Lo sé- fue lo único que comento la menor, mientras comenzaba a rodar más y más rápido la silla.

Sabía que Lauren corría detrás de ella, hasta que la freno de golpe –Eres boba ¿Verdad? Si lo mirara a él como te mirara a ti, estaría con él, pero te miro a ti como si fueras mi mundo, un mundo en el que deseo vivir ¿Te queda claro? Nerd- negando comenzó a tirar la silla de ruedas para poder llegar a aquel gran salón.

-Señorita Cabello y señorita Jauregui- dijo el hombre mirando a la chicas -¿Comenzamos?- pregunto. De algo si estaba segura la morena el hombre estaba muy distante con ellas y no le importaba en absoluto siempre y cuando alejara sus ojos de su mujer.

La morena como pudo se colocó en la barra, el doctor la ayudo a levantarse y a comenzar la terapia para poder caminar, dar pasos lentos y seguros eran su fuerte, pero costaba tanto como tomar agua con la garganta sangrando, sin embargo, dar pasos era un avance tan grande que emocionaba a la ojiverde.

Paso tras paso, lento pero seguro, los nudillos pasaran de su color normal hasta quedar blancos, su rostro mostraba un fuerte trabajo, incluso gotas de sudor comenzaban a bajar por su frente el esfuerzo que estaba realizando era sin duda agotador.

Lauren observaba como Camila, daba toda su fuerza por comenzar a caminar, sabía cuándo lo deseaba pero aunque las cosas iban lento, eso era un avance bastante grande.

Que una persona que este inmóvil pueda sentirse dar sus pasos sin ayuda alegra su corazón. El único pensamiento de la morena era poder caminar, quizás así aunque estuviera muda podía caminar de la mano de su chica.

Sus ojos apretador por la fuerza ejercida le hacía saber tanto al doctor como a la ojiverde que presenciaban todo la gran motivación que tenía, y cuando abrió sus ojos se dio cuenta que había llegado al final de la barra. Alzo su mirada y giro la cabeza sus lágrimas salían de las mejillas cuando escucho al doctor.

-Has hecho tu propio record, cada vez vas más rápido a este paso caminaras muy pronto Camila- sus palabras pasaron a la morena mientras se ayudaba para ir a la próxima sección en donde le harían algunos ejercicios para relajar y fortaleces los músculos de las piernas.

La próxima fase del tratamiento acabo rápido así que en una hora aproximadamente ya el doctor ayudaba a la morena a sentarse en su silla.

-Necesito que vengas más seguidos- le comento al oído cuando vio salir un momento a la ojiverde –El avance es rápido, pero ven sola ¿Bien?- pregunto con una sonrisa logrando que la morena asintiera.

-Bueno doctor gracias Feliz día- se escuchó la voz de la ojiverde en aquel vacío salón alertándolos de cualquier conversación pendiente.

-¿Te ayudo?- pregunto Lauren a la castaña, sabia lo orgullosa que era para pedir ayuda y aun refutando mentalmente logro ayudarla. –Camz ¿Has pensado en casarte?- pregunto de nuevo mientras la sentaba en la silla de ruedas y cerraba con seguro el auto.

La morena asintió mientras sonreía y le tomaba la mano a su novia, quería decirle muchas cosas pero a veces se sentía con cohibida incluso luego de haber aprendido el lenguaje de señas.

Al entrar al ascensor y cerrar las puertas Lauren se sentó en regazo de ella y comenzó a moverse lentamente –Yo te ayude ¿Me ayudas a mí?- pregunto mientras comenzaba un movimiento sensual hasta que el Ding del ascensor sonó y saco a la pareja de la burbuja. –Venga Cabello que hoy me tienes que complacer- y entrando al departamento se formó una burbuja sensual que ni en las peores situaciones dejaba de existir.

***Espero les guste y disculpen si existe algún error***