Las Mentiras de Annabelle (LQNSDB #2)

Capítulo 27

Jeremy

Realmente nos parecíamos, aunque no éramos idénticos. Si alguien nos viera hasta creerían que éramos hermano. Por supuesto, eso no era lo más importante en ese momento.

—¿Qué significa esto? —Necesitaba respuestas.

—Señor Bacconi, por favor baje el arma, no haga esto más difícil —ignoro por completo nuestras palabras y más agentes aparecieron con el. No sé de de donde, pero actuaban como policías o algo parecido.

—¿Estás vivo?

—Este no es el momento para eso, Guil —le dio una mirada de advertencia a su hermano.

—¿Por qué? —Guiliano no escuchaba. —Yo te vi, estabas muerto. Me pediste que cuidara de ella... ¡Me mentiste! Eres un maldito mentiroso —Guiliano se exaltaba cada vez más.

La tensión aumentaba.

—¡Maldición! ¡Baja el arma Bacconi! — el cañón finalmente se alejó de mi piel y se puso en dirección a Luca.

—Habla con tu hermano... Creo que merece respuestas, todos lo hacemos —exigió. —Dile como me traicionaste, como los descubrí a los dos y fingiste tu muerte. No hiciste nada para detener la muerte de Bernier... Dejaste a tu hermano solo... Tu madre... ¿Lo sabías? No soportó la presión de haberte perdido...

—Tu... —Guiliano se abalanzó sobre Luca y uno de los hombres con él le disparó.

La situación simplemente no podía empeorar más, pero continuaba desarrollándose frente a mi. Bacconi hirió igualmente a aquel hombre y la cadena fue más y más grande, por lo tanto me agache y alcance a Dan que no estaba muy lejos, para arrastrarlo lejos de la situación. Lo fui moviendo con cuidado y mi hermana se me unió al poco tiempo, tratamos de escondernos detrás de una pared.

—Nuestra familia es un desastre — comentó mi hermana. —Danny, del uno al diez ¿qué tan grave crees que es tu herida?

—Me quedaré con un cuatro —su voz fue forzada.

—Bien, sigue presionando la herida —Mallory miró de un lado a otro buscando por una salida. —Parece que papá aun sigue vivo, solamente espero que resista lo suficiente.

—Tenemos que salir de aquí —dije.

—Toma —mi hermana puso una pistola en mis manos. —La tomé de ese... —me señalo a un hombre en el suelo. —Ve con nuestro padre, necesitamos saber como esta.

Me moví con sigilo, evitando atraer cualquier tipo de atención hasta llegar con mis padres. Aunque no estaban lejos de nosotros, una revuelta se desarrollaba en el medio. Había mucho en lo que pensar, en cómo Annabelle nos había lanzado a los lobos, las cosas que Bacconi había dicho de ella y también, si mi padre llegaba a morir o Dan, sería en parte su culpa. ¿Podría amarla aún así?

—Todo esto es mi culpa, lo sé...

—Shh, no, yo elegí esto, yo te elegí... Siento todo lo que dije. Te amo, te amo Cecil, mi Cecil —la voz de mi padre era apenas un susurro.

—Thommy, mi Thommy. No quería que nada de esto pasará

—Mamá, ¿cómo está papá?

Ella apenas y me escuchó, estaba allí, pero al mismo tiempo no lo estaba. Mi padre aún seguía lúcido y fue el único en responderme.

—Es malo Jer, muy malo hijo —me miró preocupado. —Necesitas llamar una ambulancia, necesitamos...

—¡Todos bajen sus armas ahora! —Me volví ante la voz de mando de Max, quien llegaba con refuerzos, lo que incluía a Ryan. —¡Dije...! —Al ver que nadie lo escuchaba procedió a disparar al aire, atrayendo la atención de todos. —Si no cooperan con nosotros tendremos que proceder a la fuerza —explicó.