Capítulo 6.

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Luego de ir a comprar toda la comida para nuestra pijamada nos dirigimos a casa de Amara donde pasaríamos la noche.
Su cuarto era perfecto para hacer este tipo de reuniones, principalmente por el espacio, frente a su pantalla estaba su cama y entre ambas había un espacio bastante amplio donde poníamos cobijas en el suelo y un montón de almohadas, al lado de su cama tenía un sillón muy cómodo de dos asientos y en medio de estos tenía un pequeño refrigerador donde metíamos las gaseosas y algunos chocolates.
Del otro extremo tenía su mesita de mesa, su closet que era bastante grande y una puerta que daba a su baño.
Además sus padres siempre nos recibían a Dalia y a mí con mucho gusto. Y me sorprende que nunca hayan regañado a Amara después de nuestras reuniones, porque vaya que hacíamos ruido, incluso a altas horas de la noche era muy común que aún siguiéramos jugando Just Dance o cantando con su karaoke a todo pulmón.
Está seria mi primera noche sola con ella y eso me tenía preocupada, me preocupaba que en algún momento de la noche la situación se pusiera incómoda, que no debería porque nos conocemos desde hace años, pero extrañamente ahora hasta me resultaba incomodo cambiarme en frente de ella o que ella lo hiciera, cosa que nunca me había pasado, ya que siempre nos hemos tenido muchísima confianza.
Me molestaba el hecho de que todo fuera tan raro ahora, no entendía que pasaba conmigo y me preocupaba que eso afectara nuestra amistad a largo plazo.
Todo iba muy bien hasta el momento, siempre lo primero que hacíamos en las pijamadas era preparar las botanas y bebidas; esta vez no iba ser la excepción y llevamos un montón de comida a su cuarto como papas fritas, palomitas, chocolates, caramelos, waffles, malteadas y algunas gaseosas.
Después decidimos que antes de ponernos la pijama escucharíamos un poco de música, eso me alegraba ya que hasta en música teníamos gustos similares, escuchábamos un poco de todo pero nuestras canciones favoritas eran las de "twenty one pilots", incluso nuestra canción favorita era la misma, "screen", siempre la contábamos a todo pulmón.

Quiéreme como soy.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora