Escapemos Juntos. (Springtrap x Puppet)

Capítulo XII.

Un viernes normal como algún otro, las clases ya habían finalizado y cada alumno se marchó a sus respectivos hogares. Claro que para cierto par de individuos habían sido demasiado incómodas y pesadas todas esas horas de clases.

Lo que había sucedido un día antes aun los incomodaba, no porque no lo hubieran querido, si no porque era la primera vez que esa extraña sensación se hacía presenta en ambos. Trataron de pasar la mañana tranquilos, sin intenciones de tocar el tema, sobretodo por la cita pendiente para este sábado.

Una vez en casa, cada quien le pidió ayuda a sus respectivos consejeros.

-Tengo algo de mis ahorros, pero, ¿a dónde la llevo?. - decía nervioso el rubio.

-Tú la conoces bien, ¿que le gusta?. - respondía el pelirrojo.

-Veamos... Los libros, el misterio, lo paranormal...

-Y tú. - menciono burlón el mayor.

-¡Rojo!. - reprochó con ese tono carmesí en sus mejillas. -Se supone que debes ayudarme, no ponerme peor. -

-Vale, vale, lo siento. - río por lo bajo. - Bien... Libros ¿eh? Habrá una feria del libro, llévala, o tal vez a una casa embrujada, si se asusta tendrás un pretexto para abrazarla. - comento con una sonrisa burlona.

- Son muy buenas ideas...

-¿¡Lo del abrazo!? ¡Picaron!.

-¡No! Yo hablo de los lugares.

-Ahhh... Ya me había emocionado.

Ambos chicos rieron por la conversación. A pesar de que el mayor se la pasaba haciendo chistes y burlándose, daba muy buenos consejos. Comieron algo rápido antes de que el pelirrojo se fuera.

- Me cuentas como te fue. - dijo antes de salir de la casa.

-De acuerdo. - respondió su contrario. -Por cierto, ¿y la enana?. -

-Dijo que tenía que arreglar un problema... No lo sé, se veía molesta.

-Es mejor no empeorarla.

-Sí, se pone como Hulk cuando se enoja. - menciono el mayor haciendo algunas muecas graciosas.

Volvieron a reír, finalmente el pelirrojo salio de la casa de su amigo camino a la suya. El rubio se sentó en su "cama" y observó detenidamente por la ventana. Un mal presentimiento llego, pero decidió ignorarlo y enfocarse en la salida del sábado con su "princesa" de cabellos plateados.

Mientras tanto.

Al otro lado de la ciudad, el par de gemelas se encontraban en una tienda de ropa. La menor había sido obligada a ir por la mayor. Pero no estaban sola, una persona más se encontraba con ellas.

-¿Qué tal este?. - dijo la mayor mostrandole otro vestido a su contraria.

-No. - respondió la menor por milésima vez. -No utilizaré un vestido, es muy... Descubierto.-

-Vamos, te verás hermosa.

-Ya dije que no.

-¡Ay! ¡Puppet!

-¡Ay! ¡Mai!

-Regresé... Lamento la demora.- anuncio la tercera persona, una chica de ojos azules y cabello castaño claro.

-¡Joy!. - gritaron las gemelas al unísono.

-¿Cómo va la compra?

-Puppet se rehúsa a usar un vestido. - acusó la mayor acercándose a su amiga.