friends ➳ taekook

dos

Todo dentro de Jungkook se aceleró. 

Sus mejillas rápidamente se enrojecieron y estuvo tentado a devolverle el gesto a su amigo, pero Taehyung no parecía estar igual de emocionado que él. Cuando giró para verlo, TaeTae estaba con la vista clavada al suelo, en silencio e inexpresivo. Jungkook abrió la boca para decir algo pero sólo emitió un suave suspiro, decepcionado y triste. Quizá a Taehyung no le había gustado besarle y con sólo pensarlo sentía cómo su corazón se deshacía. 

El resto del camino a casa fue silencioso entre ellos. Sus madres notaron la evidente tensión y preguntaron quizá un millón de veces qué ocurría, Taehyung sólo murmuró que estaba cansado y Jungkook asintió, estando de acuerdo con el mayor. Al llegar a la esquina de la calle donde se encontraba la casa de Taehyung, Kook se sintió peor que antes. Tae no lo había abrazado como hacía cada vez que se despedían, sólo dijo un simple "Descansa, Kook" sin ni siquiera mirarlo a los ojos. Él sólo agitó su manita y a continuación, la sonrisa que puso Tae, que más bien era como una mueca, le hizo saber a Jungkook que su amigo no estaba realmente enojado, si no triste.

Y aquella noche tardó en conciliar el sueño. 

¿Por qué TaeTae estará triste? ¿Habré hecho algo mal? ¿Qué dije? De seguro le dio asco tocar mi rostro con sus labios. Eso fue porque no me lavé la cara esta mañana. Prometo lavarme la cara todos los días para que Taehyung vuelva a besarme.

***

¿Por qué hice eso? Seguro se enojó conmigo. Pero es que ya no podía resistirlo más, tiene mejillas muy lindas. Estoy cien por ciento seguro de que le doy asco y por eso no me ha hablado en todo el camino. Tendré que disculparme por besarlo. Aunque no me arrepiento. Aunque haya estado mal, me ha gustado hacerlo.

Un pensativo Taehyung no dejaba de darle vueltas al asunto del beso. Aquello había sido un impulso, algo que no pudo contener y en un momento se vio obligado a hacer, porque es que, Jungkook es tan lindo y adorable, y cuando le dijo que ya no estaba enojado, no pudo sentirse más satisfecho y PUM, lo besó.

El sentimiento inmediato al choque de sus labios contra la mejilla del menor, fue miedo, ¿y si Jungkook gritaba? ¿y la señora Jeon lo tomaba como un niño loco y abusador? ¿y si Jungkook le golpeaba? 

Pero el caso fue otro. 

Ambos se quedaron totalmente mudos y hasta ese momento, mientras cenaba cereales y leche, Taehyung no había podido interpretar ese silencio. Se quedó en blanco, no supo cómo romper el hielo luego de eso. A juzgar por la expresión de Jungkook, Taehyung creía que estaba asqueado y seguramente, enojado. Esa era una de las opciones más probables, ya que hacer enojar al pequeño Jeon Jungkook era bastante sencillo. 

Terminó su cena, deseó las buenas noches a su madre, depositando un beso en su frente y se fue con pasos lentos hasta a su habitación.

Acurrucado en su cama, mirando fijamente al techo, Taehyung sonrió.

Porque a pesar de que seguramente su amistad con Jungkook se había terminado, había hecho lo que estaba queriendo desde hacía un buen tiempo. Era algo inexplicable para él, pero Jungkook le hacía sentir cosas. Él, un pequeño de ocho años, no sabía cómo interpretarlas, pero Jungkook le hacía sentir cosas. 

Tenía muchos amigos en la escuela, y ninguno era como Kook. Ese pequeño de mejillas rosadas y ojos de conejito, aceleraba su corazón con sólo una sonrisa y cuando estaban juntos, todo el mundo a su alrededor desaparecía y lo único que sabía era que, no quería estar en otro lugar que no fuera con Jeon Jungkook.

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