CAPITULO 12

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El rubio agradecía mentalmente que su tocayo haya tomado su calmante antes de salir de la casa con sus padres, pero por las dudas se ubicó más cerca de él, listo por cualquier repentino ataque de ansiedad. Yakov también se acercó al Omega por lo mismo, dejándole en el medio y los tres se sentaron pendientes de lo que el señor Lirbakova tenía para decir.

El representante tomo el sobre y, en posición solemne comenzó a leer cláusulas y cláusulas interminables y aburridas que en un lenguaje básico decían que "el señor Nikiforov" dejaba todas sus pertenencias dividido entre los presentes y que no podían negarse, en caso de ser testarudos y no querer aceptarlo, ese porcentaje iba dividido por mismas partes a las otras dos personas pero para ello el que se negara tendría que pasar por un montón de papelerío legal y burocrático para dar una buena excusa de porque no quería la herencia. En caso de que ninguno aceptará - cosa difícil por todas las clausulas y burocracia que pedía que hicieran si es que así lo decidían - todo iba a donarse a distintas ONG de todo el mundo.

Para el señor Yakov Feltsman le dejo el 25% de mis bienes monetarios, tanto para su mantenimiento económico propio como el mantenimiento de la pista. Siendo una suma de 500 Mil Millones de Rublos (U$D 8.480 Millones). - El alfa mayor se llevó una mano a la cara suspirando, sabía que su pupilo nadaba en plata, pero para que eso sea tan solo el bien monetario y tan solo una cuarta parte del mismo solo para él, sentía que no lo merecía. Sin embargo asintió con su cabeza para que el abogado siga leyendo. - Para el jovensito Yuri Plisetsky le dejo el restante 25% de mis vienes monetarios, para que pueda mantenerse tanto a sí mismo como a su abuelo con sus tratamientos. - Al rubio se le abrieron los ojos, nunca le dijo a nadie lo de su abuelo mas que a Beka por vivir con él, pero el calvo igual lo sabia.. ¿no se le escapaba nada a ese idiota verdad? Aunque lo agradecía, sentía que era una suma exagerada de dinero y que podría no trabajar un buen tiempo, no le gustaba la idea. Frunció el seño pero asintió con su cabeza. - A mi esposo Yuuri Katsuki le dejo el restante 50% de mis bienes monetarios, siendo una suma de 1.000.000.000.000 de Rublos (U$D 16.960 Millones). Además de lo más importante, la custodia de mi leal perro Makkachin. 

Decir que Yuuri se paró como un resorte cuando escucho la suma de dinero y empezó a intentar buscar palabras para negarse era ponerlo muy simple. El omega estaba nervioso, de por si con Victor en vida no le gustaba que gaste mucho en él, no se sentía merecedor de ninguna de esas atenciones, aunque termino cediendo a algunas pocas, mientras ayudaba a su alfa a ahorrar. Él también tenia sus propios trabajos de comerciales o modelaje desde que ganó el GPF hacía un par de años, no necesitaba esa exuberante cantidad de dinero para seguir viviendo.

- Antes de que diga nada Señor Katsuki - dijo Lirbakova  haciéndole un gesto de "stop" con su mano libre - tengo que informarle que el señor Nikiforov pide en la clausula junto a su nombre que a pesar de que, tanto la casa como los autos hayan quedado a su nombre por ser algo de ambos, lo venda lo antes posible y se consiga una casa propia y un automóvil propio, como mucho en el plazo de un año, si no el 51% que pertenece a su esposo quedará en manos del banco con la orden ya establecida de que se venda al mejor postor.

Los ojos del nombrado se aguaron al escuchar eso, Victor básicamente lo estaba echando de su propio hogar, del que crearon juntos y dejándolo sin nada mas que un montón de billetes que en su mente no servían para nada. Si tendría a Makkachin, pero eso tampoco iba a ser para siempre. No, pensar en eso no estaba ayudando en nada... Sus manos empezaron a temblar y Yurio ya estaba sosteniéndolo para que no entre en un estado peor mientras lanzaba al aire sus feromonas. 

-¿¡Que clase de estúpida clausula es esa!? - El rubio fulminó con la mirada al representante bien vestido y con cara estóica - No puede sacarle su propia casa! Eso es.. -

- Esta bien - el mayor de todos tomo la palabra para que no haya una discusión mas fuerte luego  - tiene sentido que así sea Yuri. - Suspiró profundamente y  al ver la cara de ambos Yuris prosiguió - ¿No recuerdan lo que dijo el médico?¿Que Katsuki tenia que cambiar de ambiente para no estar siempre con el olor de su alfa o podría caer en depresión? Seguramente Vitya decidió esto por si él - dijo señalando al omega - no lograba superarlo. Es un poco cruel, pero a la larga lo agradecerá. Lo que menos querría Vitya es que su pareja termina mas lastimada de lo que está por toda la situación.  

El menor entendió entonces eso, pero el asiático termino sentándose derrotado mientras evitaba que salgan lagrimas de sus ojos susurrando un ahogado: "no me quedará nada de él"  mientras se tocaba por encima de su collar la marca que estaba desapareciendo de su cuello.

Ambos alfas lo vieron preocupados, Lirbakova parecía entender la situación porque esperó un tiempo hasta que el omega se calmara con los vasos de agua que le otorgaban los otros dos acompañantes. Luego de lo que habían parecido infinidad de minutos, el abogado preguntó si iban a aceptar la herencia o iban a ir por la vía difícil y rechazarla. Nadie quería mas líos o papeleríos para el moreno, así que antes de que alguien diga nada, el mas viejo y sensato del grupo asintió por los tres y firmaron los papeles. 

El rubio seguía sin estar convencido de que quitarle todo a su omega sea algo bueno, por mas buenas intenciones que tenga; el mas bajo estaba sumido en su burbuja de pensamientos depresivos y solitarios, solo quería irse de ahí y acurrucarse en su cama para llorar abrazado al caniche.

 ᴥᴥ 

 Al llegar a la casa el japonés  se fue directo a su habitación como se había prometido a si mismo internamente. Makkachin se unió a él lamiendole las lagrimas que bajaban por su cara. 

Jugaba con su anillo girándolo y moviendolo por su dedo, estaba frustrado, se sentía encerrado y además tenia que dar todo sin siquiera poder hablar (aunque tampoco tenia el valor para hacerlo). Ahogó su cara en la almohada, odiaba ser él, su condición de omega, y el hecho de que era un estúpido que se dejaba vencer rápidamente por su ansiedad y emociones negativas. Ahora era una carga para todos y él habia decidido volver a Japón. Cada segundo se arrepentía más... que sacaría de bueno estar rodeado de gente a la que molesta con su presencia angustiosa...
Todo su cuerpo temblaba, estaba entrando en un ataque de pánico nuevamente. Intento tomar un poco de ropa de Victor que tenia al borde de su cama para que su olor lo ayude a calmarse pero no contó que Makkachin también gustaba de oler las antiguas ropas de su dueño mientras estaba acostado sobre la misma. Sintió un pinchazo en su pecho, y rapidamente, tomo la ropa descuidadamente tirando al viejo perro de la cama. La olió y, efectivemente como su sentido común supuso, el olor de Victor desaparecía mas rápido debido al pobre can que lo miraba desde el suelo mientras le ladraba. Su lobo interno lo dominó al no sentir el olor de su alfa en la ropa y lo único que sabía era que ese perro era una amenaza que le sacaba su alfa. Le gruñó de vuelta mientras se paraba.

   ᴥᴥ   

Bueno hasta acá el capitulo de hoy. 

Gracias por leer y las estrellas y los comentarios! 

Como siempre, si ven que algo este raro escrito o redactado haganmelo saber!

Nos vemos en el proximo capitulo !

DESPUES DE ÉL [YUYUU - #DavaiAwards]Where stories live. Discover now