21 | Paulo Dybala

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29/09/2017

– Se pusieron celosas eh —grita Ezequiel mientras nosotras caminamos por los pasillos del estadio—.

– Ay no —Candela se tapa la cara—.

– Que pendejo de mierda —susurro—.

– Candela, pelotuda te conozco desde que naciste y a la otra también —grita riendo—.

– Mete un gol y hablamos —ni siquiera lo miro—.

– ¡Pendeja te voy a cerrar el culo! —grita—.

Caminamos hacia los palcos en los cuales hoy estamos solas porque al parecer no vino casi nadie. Raro, no pasa nunca.

Hoy con Neymar quedamos en salir, obviamente no solos, con amigos de él y amigas mías.

[...]

El partido finaliza 1-1.

Los jugadores salen y después nosotras bajamos a los pasillos.

Espero a que los chicos se terminen de bañar y todo lo que hacen dentro del vestuario.

– Se calentaron —Ezequiel nos saluda riendo—.

– Que gracioso —Cande lo mira riendo falsamente—.

– Se les vienen encima las boquitas —ríe—. De los pelos.

– ¿Y el chiste? —lo miro sería—. Yo las voy agarrar de los pelos si siguen jodiendo.

– Ta celosa —Masche ríe—.

– Patada en la piña —miro el celular—.

– ¿Eh? —Cande me mira—.

– ¿Como sería una patada en la piña? —pregunta Ezequiel—.

– Que se yo, pero tu novio Dybala te quiere a vos —Masche me señala—.

– No, vez —mi hermano lo mira—, eso ya no da risa. Eso no.

– Que pelotudo —miro a Ezequiel—.

– ¿Vamos? —pregunta Cande—.

–Si —me levantó del sillón—. Me voy de joda.

– ¿Dónde? Vamos.

– Anda a cuidar a Yani —lo miro—.

– Ohhhh —la grita Masche—.

– Mi acompañante —señaló a Neymar sonriendo—.

– ¿Qué? Ah no —Ezequiel niega con el dedo—. No, no puede ser.

– Si —Neymar sonríe—.

– Pero sos como mi hermano menor, yo te quería, tenía confianza en que no la unas a tocar —lo señala—. Ni la toques... Hasta prefiero a Dybala.

– Boe —lo miro—.

– Vamos —Neymar pasa una mano por el cuello de ambas. Él en el medio—.

– Ganador —le grita Masche—.

[...]

El nombre del boliche ni idea, lo único que se es que esta muy bueno.

Oportunidad de "estar" con Neymar no me falta, pero no pasa nada.

En la cabeza me resuena Paulo ¿Por qué? No idea, si no somos nada más que dos personas que estuvieron una vez, nada más.

Si sigo así, rechazando a pibes por la ilusión que tengo con Paulo voy a terminar sola.

Cuando se hace tarde, saludo a Neymar con un beso en la mejilla, él corre la cara y termina dandomelo en la comisura de los labios.

Llegamos a mi casa, me hago un rodete y me saco los zapatos.

– ¡No le diste, pelotuda! —Candela me grita mientras me tira almohadones—.

– ¿Qué? —pregunto—.

– El pibe estaba entregado en bandeja con moño y todo y no activaste —contesta—.

– Ehhh —miro al piso—.

– ¿Dybala? Si es por eso sos una tarada —niega con la cabeza—.

– Bueno boluda, ¿Pensas que es facil? No —respondo—. Si, rechazo a pibes por él y no es porque quiera hacerlo, es porque no quiero a nadie más que no sea él, punto.

– Estas hasta las manos Sofía —se tapa la cara—.

– Si... Y no quiero porque se que es imposible —me acuesto en el sillón—.

– No es imposible, si se quieren fue —alza los hombros—. ¿Dudas de tus sentimientos?

– De los míos no, de los de él si —señaló la nada—. Barcelona, Turín ¿Te dice algo?

– Que la distancia les chupe un huevo. Van a estar juntos.

– Dios te oiga.

Paulo Dybala.

– Che, ¿Sofi salió con Neymar? —me pregunta Gonza—.

– Creo que no ¿Por qué? —lo miro—.

– Nada... Salieron juntos del partido.

– ¿Para que me lo contas? —lo miro mal—.

– Boe Paulo, te pregunté algo —tira el celular en la mesa—.. No te debería molestar si...

– Bueno, pero me molesta ¿Estamos? Me jode —alzó los brazos—.

– ¿Por qué? —pregunta—.

– Porque si, Sofía no se si me gusta o que, pero no la quiero ver con nadie más.

– Joda —me mira riendo—. Chocolate por la noticia de que de gusta.

– ¿Tanto se nota? —pregunto—.

– Re, como la miras y como le hablas —sonrió—. Igual, todavía es como una nena.

– Nena —río—.

– No nena, pero recién tiene 18 —alza los hombros—.

– ¿Vos que decis? —lo miro—.

– Yo digo que actives porque las minas se cansan... Además de que va venir Neymar o algunos de esos y se la va llevar.

– Sisi, ya se la van a llevar —sonrió falsamente—. Uh para, ¿Y si estuvo con Neymar cuando salieron?

– Todavía no sabes si salieron o no, le tenes que preguntar.