Como te conocí

"Una tarde de lágrimas y la llegada de un ¡¿Bebé?!"

Capítulo 2: "Una tarde de lágrimas y la llegada de un ¡¿Bebé?!

-Oe Tsu-chan- nombro mientras se acostaba de lado para verle –estaban en el cuarto del castaño, ella en la cama y el en el suelo-, el otro recargo su mentón en la cama y le miro- ¿Nunca has tenido esa sensación de que algo gran va a pasar?- cuestiono mientras jugueteaba con uno de sus mechones castaños-.

-Si te soy sincero algunas veces sí, pero no le tomo mucha importancia- respondió aburrido.

-Mnn- murmuro para mirar a la ventana, y por un segundo creyó a ver visto algo brillando en el árbol.

-Es temprano para cenar aun- comento Tsuna- ¿Por qué no me cuentas de tu familia?- pregunto mientras movía los pies de la chica para sentarse frente a ella.

-Bueno- se sentó de igual manera- Soy la hija mayor y primera nieta de mis abuelos, tengo una única hermana llamada Alena, ella me lleva cinco años y vive conmigo y mi madre- suspiro con desgano por lo que diría a continuación- Mis padres están divorciados, casi no lo veo a él, cada tres o cinco domingos le veía cuando era niña- sonrió con amargura- Sabes, él no quería hijos – abrazo sus rodillas- Pero aun así acepto criarnos a mí y mi hermana hasta que cumplió cuatro, en eso su relación termino de explotar – una lagrima bajo por su rostro- a los pocos meses de ser oficial él me dijo lo de no querer hijos, yo no dije nada, solo lo escuche y me fui con mi madre –Tsuna se acercó para abrazar al ver que comenzaba a temblar- No quería que mi hermana se enterara de eso, por lo que se lo oculte hasta que un día me escucho llorando en el cuarto y le dije – le miro a los ojo mientras el otro le sonreía en señal de apoyo- ella me escucho y lloro conmigo, nos hicimos más unidas ese día.

-No es necesario que sigas- murmuro Tsuna.

-No descuida- negó con la cabeza- Me llevo muy bien con mis abuelos maternos, mis tías abuelas paternas y mis abuelos paternos, podría mejorar –miro hacia la cama- No tengo primos de mi edad por lo que estoy acostumbrada a estar entre niños pequeños, capas y eso fue lo que hizo mi actitud tan maternal –sonrió- Por eso cuando te vi llorando algo me dijo que te ayudara.

-¿Y por qué aceptaste una transferencia a un lugar tan lejano de tu hogar?- pregunto Tsuna intentando aligerar el ambiente.

-Siempre me intereso viajar y cuando me entere de las transferencias pensé, ¿Por qué no?, y aquí me tienes –explico con un suspiro- Además una tía ama viajar, ahora mismo debería de estar en Italia visitando a un amigo por lo que se-.

El cuarto quedo un rato en silencio mientras ambos seguían abrazados, la castaña no podía dejar de pensar en el hecho de haber llorado al contar eso, "Pensé en verdad que lo había superado", se repetía una y otra vez mientras cerraba los ojos fuertemente. Mientras Tsuna solo pensaba en como alegrar a su amiga-casi hermana-, hasta que se le ocurrió una idea.

-Ahora yo te contare- dijo Tsuna- Mi madre es quien me ha cuidado la mayor parte de mi vida, por no decir toda, hasta ahora – comento riendo- No tengo hermanos, y mi padre nunca está en casa porque viaja por el mundo buscando petróleo –suspiro- Aunque por lo que dijo mamá la última vez creo que murió y siendo sincero no me agrada mucho.

-Tenemos una suerte lago parecida con los padres- comento Zoe más calmada.

-Creo que si- admitió para reír, junto a su amiga.

-¡Zoe-chan, Tsu-kun, hora de comer!- grito Nana desde la cocina.

-¿Vamos?- pregunto Tsuna mientras se paraba de la cama y ofrecía su mano.

-Vamos- tomo su mano y le siguió.