Anaís

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Relato inspirado en la obra Los amantes de Anaís. Un libro intenso y que toca cada fibra de tu piel. Sabes mi querida amiga que es uno de mis preferidos luisnai

Hoy quiere unirse al calor embriagante de un cuerpo cualquiera.

Esta noche desea desgastarse pensando en ella.

Caminar por las calles arañando el suelo que pisa, tan solo para olvidar que su piel tibia alguna vez, destrozó la suya.

Hoy quiere embriagar su alma con unos labios anónimos, efímeros, como aquel aroma.

Se encuentra desojando el adiós que llegó mucho antes de lo acordado.

Está a merced del desvelo y el llanto, encadenada a su recuerdo, agazapada a su adiós.

Ese amor que llegó un día y le contó todo ese dolor, toda esa decadencia de su alma rota.

¡Ay dolor que le prohibiría amar!, porque ella ya había perdido toda esperanza.

Hoy desea mirar el mar, ese mismo océano inmenso que la arrancó de allí una tarde de primavera; pero que le tentaba y le apaciguaba toda esa culpa que siempre sintió.

Caminar en desvelos mientras el recuerdo de su nombre le golpea la cara y le desgarra el alma, es como sentarse a orillas de un gran risco, oscuro y sin fin.

Pues su nombre era esencia, vida, sueños y camino de piedras, ¡ay su nombre! Ese que ni siquiera le pertenecía, pero que lo hizo tan de ella.

Hoy se desprende de él  y trata de caminar sin ella, pero es imposible y tarde;

Pues Anais se encuentra ya en cada fibra de su desolada piel.

Un café y mil estrofasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora