-¿Eso que oigo es un ronquido señorita Noah?
La voz del profesor me despertó de golpe, haciéndome tirar todos los libros.
Varias personas a mi alrededor soltaron una risita
Los recogí con el rostro tan rojo, que cualquiera podría haber freído un huevo en él.
Beau, que se encontraba un par de asientos más, adelante del mío, alzó la vista tan solo un instante, irguíendo la espalda para buscar mi mirada, algo que yo evité a toda costa, tapando mis ojos con el cabello.
Si había algo que no soportaba acerca de mi novio era su estúpida obsesión con controlar cada movimiento que hiciera, aunque eso significara, comprarme una correa para perros, y un bozal.
Siempre era la misma estúpida pelea.
"No se te ocurra hacer eso Noah, ya sabes lo que van a pensar" "Ni pienses comer así delante de mi madre"...
Lo sé Beau era exigente la mayoría del tiempo, aunque se podría decir que tenía sus motivos, ya que la única razón por la que permanecíamos juntos era el trabajo de nuestros padres.
Todos lo sabían, si, aunque les gustase fingir lo contrario.
-pst, Noah. Susurró Kelsey en mi oído.
Me giré, no sin antes hacer una mueca y enfrenté, a mi gran amiga "nótese el sarcasmo".
-¿Qué quieres Kels? Pregunté sin mucho ánimo, a la morena.
-Recuerda que... Empezó Kelsey.
-Tenemos que ir después... La cortó Ashley.
-No me cortes idiota. Bufó Kelsey.
-Que tenemos el ensayo de las animadoras después de clases. Finalizó Zoe, a lo que las otras dos volvieron a protestar.
Kelsey, Ashley y Zoe, eran por así decirlo, mi séquito, por mucho que me odiaran y yo a ellas, me seguían a todas partes, se reían de todo lo que decía y estaban obsesionadas, como al parecer todo el mundo, con planificar mi vida social al 100%.
-Claro iré. Dije sin opción a elegir, dando por finalizada la conversación.
-Señorita, Noah. Habló de repente el profesor. No querrá que las expulse de clase.
Rodé los ojos internamente, para contestar momentáneamente:
-No volverá a ocurrir, señor.
El profesor pareció quedar contento con mi contestación, ya que se dio la vuelta y continuó con la explicación.A eso de las dos y media, ya habiendo sonado el timbre, me dispuse a salir de clase, algo que no conseguí con mucho éxito ya que Kelsey-Bruja-sociopata no me dejo.
Estúpidas animadoras. Bufé.
-Corre o llegarás tarde. Me recordó la muy rata, riendose al ver mi mirada de resignación.Corrí a los vestuarios a sabiendas de que si no se pondría muy pesada.
-Vaca del infierno. Murmuré una vez sola, apoyando mi cabeza en la puerta.
-Vaya, me han dicho cosas bastante raras. Susurró de repente una voz grave en mi oído. Pero nunca me habían llamado eso.Hice amago de girarme pero descarté la idea al vislumbrar la ancha espalda del chico y su cabello azabache empapado.
Mis mejillas adquirieron un tono carmesí y volví a hablar sin apartarme de la puerta.
-Eres un tío ¿Qué haces aquí?
Vi por el lateral del ojo como alcanzaba una toalla blanca y se la enrrollaba en la cintura y barrajé la posibilidad de girarme de nuevo cuando volvió a acercarse a mi.
-Querrás decir, que haces tú aquí preciosa. Este es el vestuario de chicos.
Abrí la puerta de golpe y salí tan rápido como había entrado pegando un portazo a mi paso.
-Mierda. Argumente corriendo por el pasillo.
ESTÁS LEYENDO
Bad Girl
RomanceNoah Thomson siempre fue la chica perfecta, la chica buena, familia ideal, calificaciones impecables, animadora, intachablemente hermosa... Pero, ¿Qué pasaría si llevara un diablo escondido? ¿Qué pasaría si lo sacara a relucir? Nickolas Pearson, muj...