Loki, de Asgard
-Hableme Doc-. Fury caminaba hacía el Dr. Selvig, que trabajaba en una máquina para manejar la energía del Tesseract. Jane caminaba reacia a acercarse mucho a las personas que estaban allí. Le hacían recordar su vida pasada, y a todo el daño que le habían causado. Vio una cabeza asomarse, y saludar entusiasmado a Fury, suponía que debía ser el Doctor, aunque no lo pareciera.-Director-. El hombre se bajó de la plataforma en la que estaba trabajando con la máquina y el Tesseract, aliviado de que Nick Fury este allí y a su vez algo asustado por lo que estaba pasando con el proyecto. Jane seguía detrás de Fury, sin dejarse ver, prestando poca atención a lo que los hombres hablaban. El lugar le recordaba a la sala en la que la sumergían en ese espantoso tanque y también observó al hombre junto a aquella cosa metálica.
-Doc, le presento a Jane Hopper-. Jane observó como Selvig le tendía la mano y dudosa la tomo.- o Eleven-. Con el ceño fruncido miró a Fury, Selvig saludo a la joven con entusiasmo, pensando que algo dudoso de por qué le llamaban como un número y también que Fury la había llevado allí porque podría ayudar o simplemente nueva en el trabajo. Selvig no estaba muy lejos de la verdad.
Los dos hombres se adelantaron y conversaban sobre el resiente problema que tenían con el Tesseract, mientras Jane veía como un hombre (vestido como aquellos científicos que la estudiaban), con una varilla de metal trataba de tocar el cubo azul que se encontraba en el centro de una cosa redonda, más grande y que parecía ser de metal. Estaba curiosa, no tenía idea de lo que era esa cosa, pero sentía como su energía la afectaba.
Unas chispas salieron del cubo azul cuando el hombre logró acercar lo más que pudo las varillas, Jane se sobresaltó y se alejó buscando a Selvig y Fury con la mirada. Al menos, creía que ya sabía que podría ser el Tesseract.
-No tiene nada de gracioso. El Tesseract no sólo está activo, está...comportándose-. Mencionó Selvig. Jane volvía a perderse en la conversación, 《 ¿qué era lo que no era gracioso?》 Fury le había dicho que no le pasaría nada, pero aún no sabía para que estaba ella allí y todo le parecía algo (muy) sospechoso.
-¿lo desconectó?
-Es una fuente de energía. Le quitamos la energía y la vuelve a conectar-. Explicó Selvig, no era fácil de entender lo que estaba sucediendo y ninguno de ellos se imaginaba con exactitud la magnitud de aquella energía y lo que vendría con ella.
-¿Que está pasando?-. Jane preguntó en voz baja a Fury, Selvig se había volteado y hablaba con algunas personas que lo ayudaban en el laboratorio, Fury y ella le seguían a paso lento, esperando nuevas noticias o a que simplemente se les diera el resto de la información.
-El Tesseract, aquella cosa cúbica, azul y brillante que ves en el centro de esa máquina. De eso hablamos. Mantente alejada de esa cosa, pronto nos iremos y podremos aclarar todo lo que necesites saber-. Fury se alejaba dejando a Jane parada justo en donde estaba, ella corrió hasta él y le siguió el pasó mirándolo fijamente.
-Fury-.
-¿Qué?-. Se había volteado a verla, hablándole a la chica algo exasperado por qué nunca iba directo al punto.
-Entiendo-. Fury la observó por unos segundos y luego rodó los ojos, volteandose a Selvig, tratando de ignorar a Jane y ponerle su total atención a la cosa que podría matarlos en cualquier momento.
-Si su energía llega al pico...-. Selvig comenzó a decir pero al instante fue cortado por Fury.
-Nos preparamos para esto. Podemos usar energía del espacio-. Jane se sentía rara. Ninguno sabía que Eleven, alteraba un poco la energía del Tesseract y hacía su proceso más rápido. Nadie tenía idea, puesto a que no se sabía que era lo que Jane podía causar y tampoco lo que estaba causando. Ella no tenía idea de lo que vendría más adelante, y de lo importante y dañino que iba a llegar a ser todo.
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𝐄𝐥𝐞𝐯𝐞𝐧 || 𝘈𝘷𝘦𝘯𝘨𝘦𝘳𝘴 || PAUSADA | [1]
Fanfiction"Soy un monstruo..." "El, nos salvaste a todos. No eres un monstruo...eres una Vengadora." Jane llevaba siete años escapando. De los enviados por su padre, de los que la buscaban por parte de laboratorios, escapaba de un monstruo, que no era más qu...