Capitulo 9

5K 459 35
                                    

Después de golpear a Kageyama, me disculpe con Daichi, tome mi bici y salí corriendo ¿como puedo ser tan débil con alguien como el? No se, ni yo sabia. A lo lejos, escuchaba las voces de Yamaguchi, un amigo muy cercano a mí llamándome. No quería regresar, porque si regreso, lo más probable correría a auxiliar a Kageyama y es lo que menos quiero.
Llegue a mi casa, deje la bici y entre en mi hogar con mi mochila colgando de mi brazo. Deje mis zapatos y entre, abrí la puerta de el living. Hay estaba Nansu viendo caricaturas, al escuchar la puerta corrió a mi.
— ¿como te fue el entrenamiento?— me dijo mi hermanita. La cargue en mis brazo ya que ella estaba alzando los suyos.
— me fue muy bien— le dijo— estaba practicando el paw.
— ¿y donde está Kageyama?— me preguntó mirándome, les cuento, Kageyama siempre me venía dejar a la casa y entraba saludaba a Natsu, a mi madre y se iba. Cuando me pregunto eso, lágrimas salieron de mis ojos, como odiaba que ella me preguntara cosas hací, era tan ingenua. Cuando lágrimas salieron de mi ojos, mi madre entro al living, me vio llorando y corrió a mi, me abrazo con Natsu, yo solo lloré en su pecho. A separarnos le dije.
— El me dejó por Hitoka, la manager de nuestro equipo. Yo lo amaba, el no— mi voz se quebró, baje a Natsu, y corrí a mi habitación. Cerré la puerta de esta, arroje mi mochila a alguna parte de esta y me eche en mi cama, tapándome hasta la cara con las sabanas. A los minutos Natsu y mi Madre tocaron la puerta, diciendo que la comida estaba servida, por si quería comer. A lo que les respondo que no, se escucharon sus pasos alejándose. Después de eso, intente dormir, pero cuando cerraba mis ojos, lo veía a el besándose con Hitoka.
Ya no puedo más, ¿porque me hiciste esto Kageyama?

Creo que me volví a  enamorar...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora