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La primera clase era trigonometría, aunque... A Isaac se le hacía difícil de entender.

Finalizó la clase e inició el recreo. Isaac buscaba como loco a Emanuel, mas no lo encontró. Estaba claro que él se estaba escondiendo.

Había un enorme problema, ya que las calificaciones de Isaac habían bajado bastante desde que él "cambió".
Me estoy descuidando mucho... Pero ya no es tan fácil como antes...
Isaac no tenía la cabeza para los estudios, él pensaba en sus amigos, en Zoey... Incluso hasta en Alice. Tenía muchas cosas en su mente y creía que otra cosa ya sería un estorbo.

Las clases terminaron, hora de salida.
Isaac siempre caminaba con Zoey por el pasaje en el que había conocido a Alice, no obstante él nunca se lo mencionó. Básicamente usaba ese pasaje para besar y " tocar" a Zoey, ridiculizando aquel pasadizo.
Pero ese día... Fue solo, debido a que las amigas de Zoey le impedían que pudiera interactuar con ella.
Sin embargo, conforme llegaba al pasaje, se percató que una chica yacía sentada en una esquina. Sentada de la misma manera en la que lo había estado Alice la primera vez: En posición fetal y agachando la cabeza.

Isaac estaba asombrado, pero decidió acercarse a aquella misteriosa chica.
-Oye, estás bien?
La chica levantó su cabeza al instante, mostrando una sincera y agradable sonrisa.
-Claro que estoy bien! Por qué no lo estaría?
Isaac seguía impactado ante aquella actitud tan extrovertida, la cual parecía que ella guardaba para el primer idiota que se le acercara.
-Si estás bien? Por qué estabas con la cabeza agachada?
-Estaba observando mis pies! - exclamó aún con la sonrisa, mientras meneaba sus pies de un lado a otro, Isaac se percató de aquella acción.

Hubo un ligero silencio que duro unos instantes simplemente. Ya que la chica se levantó y mostró la palma delante de Isaac, como si quisiera saludarlo de manera cordial y elegante, aunque a la vez algo vacilante y bromista.
-Bueno? Deme la mano e indiqueme cuál es su nombre? Si fuera tan amable. - dijo mostrando una exagerada cara de seriedad, para después volver a sonreír. Isaac obedeció y estrechó su mano, la cual se percató que era muy suave.
-Me llamo Isaac. - dijo con una sonrisa.
-Un placer conocerte, Isaac! Mi nombre es Melany, pero puedes llamarme Mimi-chan!
...
Mimi-chan?

Y ese había sido el día en el que Isaac conoció y se hizo amigo de aquella misteriosa y linda chica "otaku".

El ABC de la vida 2 (Terminada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora