Close to you ||Chittaphon||

03

Si Cheng llegó al rato.

Al parecer quién había decidido la hora llegaba tarde.

—Me hiciste correr para que no estuvieras aquí. —me quejé una vez que llegó a mi lado.

—¿Tienes clases ahora? —ignoró mi queja.

—No, ¿tú?

—Tampoco.

—¿Y que es lo que quieres? Me hiciste prepararme en pocos minutos, no me ha dado tiempo ni a ducharme.

—Solo quería darte los buenos días en persona.

—No me jodas, dime qué quieres.

—Me voy a ir de viaje dentro de una hora y quería despedirme.

—¿Solo es eso?

—¿Te parece poco?—se hizo el ofendido.

—Así es, bueno, ¿y cuánto tiempo te vas?

—Una semana. ¿Vas a poder sobrevivir sin mi?

—¿Por quién me tomas?

—Por alguien que no sabe cuidarse por sí sola.

—Voy a volver a la habitación.—dije después de escuchar varios pasos bajando las escaleras.— Espero que tengas un buen viaje.

Caminé en dirección a la cafetería dejando con las palabras en la boca a mi mejor amigo.

Me dediqué a buscar a Taeyong entre la multitud y en cada una de las mesas, pero no logré hacerlo y le envié un mensaje.

{Sun Hee}: ¿Dónde estás? 7:03 a.m.

A los minutos llegó la respuesta de este.

{Taeyong}: En el césped de la entrada.

Me encaminé hacia el lugar y pude ver cómo escribía en una pequeña libreta.

—¿Qué estas haciendo? —dije haciendo el intento de mirar lo que ponía.

Taeyong cerró la libreta y me miró sonriendo.

—Estaba componiendo una canción.

—¿Me dejas verla?

Él negó con la cabeza y después comenzó a hablar.

—Cuando esté terminada te la enseño.

Asentí y me tumbé en el césped.

Se sentía muy relajado el ver las nubes moviéndose lentamente.

—Si Cheng me dijo que se va a ir de viaje.

—Si, me acabo de encontrar con él, bueno más bien él me dijo que fuera.

Taeyong guardó la libreta en su mochila y se tumbó a mi lado.

—¿Que te parece si vamos a desayunar?

—Vamos a quedarnos un rato así.

Cerré los ojos unos minutos.

Cuando los abrí, hice contacto visual con Taeyong.

Al parecer él había estado mirándome todo el rato.

—Mejor vamos a desayunar.—dije levantándome.

Tenía miedo a volverme a enamorar y ser utilizada de nuevo.

Taeyong me siguió y nos sentamos en una mesa.

—¿Que desean pedir? —dijo al acercarse uno de los meseros.

—Un Donut.

—Yo quiero un café.

El camarero se fue dejándonos solos.

—¿Vas a poder sobrevivir sin Si Cheng?

¿Por que todos creían que sin él no iba a poder vivir?

Cierto, el siempre me sacaba de los malos ratos, de los momentos incómodos e incluso de mis días de tristeza.

Si lo pienso de ese modo, le debo mucho.

—Tu puedes ser su sustituto, ¿no?

Taeyong parecía sorprendido, estaba claro que se esperaba cualquier cosa menos eso.

No respondió y miró hacia el lado para ver como el camarero se acercaba de nuevo, esta vez con nuestro pedido.

—Me lo tomaré como un si.—le sonreí y empecé a beber de mi café.

(...)

—He conseguido unas entradas para ver una obra de teatro, vas a venir conmigo, ¿verdad?

Otra vez ella.

No he conocido a una persona igual en mi vida.

Ya me estoy empezando a cansar de ella.

—No creo que vaya a poder ir.—dije de una manera que no pareciera tan obvio que no quería ir con ella a ningún otro sitio de esos.

—Pero ya he comprado las entradas y no tengo a nadie más para que vaya conmigo...

Ahí va de nuevo.

Intentando dar pena para conseguir lo que quiere.

¿Cuánto más aguantaré esto?

—Está bien, voy a ir pero sabes que no me gustan ese tipo de sitios, no sé para qué te empeñas en llevarme.

Suni empezó a dar saltos de alegría, no porque no iba a malgastar el dinero, sino porque había conseguido lo que quería.

De nuevo.

(...)

—¿Que quieres hacer ahora? —dijo Taeyong una vez que salimos de la sala del cine.

Se estaba esforzando en ser el remplazo de Si Cheng.

Me encantaba cuando se tomaba las cosas en serio.

—Creo que ya podemos descansar por hoy, porque al final vas a gastar más dinero que lo que gastas en un mes.

—Es que por una vez que me dedicas el día completo a mi quiero hacerlo bien.

Comencé a reír por el comentario de este.

Era cierto que nunca pasábamos tiempo como este juntos.