Amistad - Namjin

el principio del fin

Daba vueltas en mi cama sin poder dormir, no podía olvidar su sonrisa al verme, su disfrute al ver lo sorprendido que estaba

Me odiaba, lo odiaba, la odiaba

Porque te gusta, ¿no te das cuenta, que es un idiota?

¿Morirte por mi? Estupideces

La noche pareció interminable pero al fin el sol salio, lo observe desde el balcón, cuando el reloj dio las siete y media, baje a desayunar

—buenos días— dijo el omega

—buenos días— salude a mis padres y me senté

—¿como te sientes?

—muy bien

—¿quieres que te lleve?— dijo el omega

No conteste, estaba tan desanimado y lo peor era, que me enojaba estar así

—jin, no has comido nada — dijo el de cabello blanco

observe mi teléfono me levante bruscamente al ver la hora

—me voy

—te llevo —dijo el omega, dio un beso al alfa y salio

—adiós papá

—ve con cuidado cachorro

Subí al auto y el omega comenzo a conducir

—me mentiste ayer...

Con razón la amabilidad...

—lo hice

—¿por que?— dijo el omega con molestia

—porque era lo que querías oír

—Jin no te comprendo, ¿por que endurecer tu corazón de esa manera?

—enfrento así las cosas

-no, lo que haces es huir de las cosas, te haces daño, ¿por que no le dices lo que te molesta?

—no soy nadie — el omega freno frente a la escuela

—claro que si, si no fueras alguien, ¿acaso él hubiera hecho todo lo que hizo por ti?

—hablo de que no soy nadie, para exigir algo, papá, namjoon ha vuelto con su ex, si es que alguna vez terminaron, no puedo decirle que eso me molesta, me hace daño estar lejos de él, pero me lastima mas estar cerca

—¿que quieres decir?

—ya no quiero decirle que esta bien, que estoy bien, ya no puedo... lo dejare ir— abrí la puerta del auto

—¿renunciaras a lo que quieres?

—nos veremos en la tardé pa —cerré la puerta del auto

Entre al colegio y observe a jimin que llegaba con su mochila, hablando y riendo cómplice con el alfa pálido

—¡Jin hyung!— grito emocionado y corrió a abrazarme— ¿te encuentras mejor?— asentí

—que bueno que te tenemos de vuelta— sonrió el alfa

Los tres caminamos por el pasillo dejando las cosas que no usaríamos de la primera clase, en los casilleros

—¡NamJoon hola! —saludo el omega con la misma energía

Cerré mi casillero y camine hacia el salón, me pesaba ignorarlo, me pesaba intentar hacer como si no existiera, pero el alfa me había herido, quería devolvérsela, era lo que estaba haciendo, aunque me lastimaba el doble haciendo eso