Ya llevaba un mes de casada y nada había cambiado Samuel seguía evadiendola aunque con Fernando era diferente así llegará a la hora que sea él le dedicaba tiempo, no era que sintiera envidia de su hijo pero si dolía la indiferencia pero quiera o no tenía que hacerle frente tendrían que hablar de algo importante.—¿Samuel podemos hablar?.— ella estaba colocando la mesa para desayunar era día sábado y Maru estaba de fin de semana libre así que ella debía hacer las cosas del hogar no era que eso le preocupara más bien le gustaba aunque se sentía extraña preocupándose por otra persona que no fuera Fernando.
—Dime.— dijo con mucha indiferencia.
—Bueno estoy al tanto que apenas estas disfrutando de Fernando pero yo antes de eso tenía compromisos que debo cumplir y....— pero él la interrumpió.
—Ya basta Camila di lo que tengas que decir de una vez por toda.— aquello le dolió él estaba siendo muy déspota y su corazón lo resentia.
—Viajo el lunes a Nueva York.—Alli si él dejo de hacer lo que estaba haciendo y puso toda su atención en ella.
—¿Cómo?¿Porque me lo dices hasta ahora?.— pregunto molesto.
—Porque no encontraba como decírtelo ademas tu actitud no ha Sido la mejor tienes que estar consiente de eso.— Samuel quiso refutar eso y cerró la boca pues ella decía la verdad.
—Puedes dejar el bebé conmigo e ir a trabajar todo el tiempo que quiera.— Camila dejo lo que estaba haciendo y lo miro.
—No Samuel jamás dejaré a mi hijo solo, él va para donde yo vaya.— Samuel la miró y en definitiva con Camila no pudo escoger mejor mujer para ser la madre de su hijo ella era magnífica pero eso no quitaba el hecho de la pronta separacion y eso a él no le agradaba.
—No quiero que vayas yo asumo la demanda y los demás contratos trataremos de traerlos hasta acá.—No quería separarse de ellos pero entendía que ella debía cumplir sino la demandaba podía con la primera demanda después le quedaría tiempo para solucionar los demás contratos.
—No haré eso yo voy a cumplir con esos contratos puedes ir con nosotros.—Dijo como alternativa.
—No puedo ir con ustedes.—ahora no podía dejar las terapias.
—¿Porque no?.— pregunto molesta cruzando los brazos Samuel alzó sus cejas.
—Solo conformate en saber que no puedo ir.— dijo sin más se fue de la cocina.
—¡Samuel ¿Porque siempre me tienes que dejar hablando sola?aún no hemos terminado!.— Camila estaba muy molesta y él solo se limitaba a ignorarla.
—Ya tomaste una decisión aunque si hay algo que no pregunte ¿por cuánto tiempo tienes que estar allá?.—mirando que estaba roja de la rabia.
—Tres meses.—Aquello hizo que el cuerpo de Samuel se estremeciera.
—¿Tres Meses sin venir?.—Ella asintió.
—No puedo hacer nada.— Su mirada fue profunda.
—Debiste hablarlo conmigo desde hace tiempo.— dijo con un suspiro y eso a ella la entristeció.
—Lo siento de verdad.— agachándose para tomarle la mano.
—Trata de volver antes por favor.— Aquella petición tenía mucho sentimiento.
—Tratare te lo prometo.— y se levantó, la molestia que tenía se le pasó un poco.
—Ve a buscar a nuestro hijo vamos a comer.—samuel fue por su hijo y a este le encantaba andar sobre las piernas de su padre en su silla.

ESTÁS LEYENDO
No Eres La Única #04(Completa En Edición)
RomanceSamuel Campbell había decidido no volver amar, a lastimar antes de ser lastimado, un hombre que lo tiene todo para ser feliz pero una mala experiencia lo sumergio en el oscuro mundo del resentimiento, una mujer cambio su vida y él cambiara la vida...