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Narración normal (agarrence que se viene feo).

Un pequeño niño estaba encerrado en su cuatro preparando su mochila con ropa y cosas que le serian útiles, pensaba escapar de casa pues desde que su hermano murió su padre se volvió un alcohólico que le golpeaba cada noche.

Había terminado de empacar y su ruta de escape estaba lista, un hueco en su ventana provocado por el mismo con una piedra, era perfecto para escapar.

Estaba listo cuando se escucho el sonido de la puerta de la casa abriéndose y cerrándose bruscamente, su padre ya había llegado.

-Dejaloen paz, hoy tuvo un día difícil.

Era su madre tratando de que su padre no fuera violento con el pero no basto, el hombre trató de abrir la puerta.

-Te he dicho que no cierres tu cuarto.

Empezó a golpear bruscamente mientras el pobre niño se apresuraba a salir.

-¡¡¡ESTA ES MI CASA Y NO PUEDO TOLERAR ESTO!!!.

El pequeño niño empezó a llorar del estrés por tratar de huir, salio por en hueco de aquella ventana pero se corto con el vidrio al salir.

-Encontrare otra forma de entrar.

La puerta de la casa se volvió a abrir y azotar fuertemente lo que indico que su padre había salido a buscarlo, rápidamente corrió lejos, cerca de su casa el pastizal creía muy alto por lo que era un perfecto escondite. A pocos centímetros pero ya en el pastizal, el niño se cayo provocándose una herida en la pierna, escuchó cerca las pisadas de su padre por lo que no se movió y guardó silencio, su padre al ver el hueco gruño.

-¿Corriendo en la lluvia de nuevo? Lo lamentara cuando vuelva.

El hombre se fue gruñendo mientras el niño corría y corría bastante lejos de su hogar a la autopista.

Jamas volvió.

*10 años mas tarde*

Fred se encontraba solo en los pasillos de la escuela, guardaba todo lo que faltaba en su casillero, había sido el último en salir pero para el era casi una costumbre, cuando término cerro su casillero y casi al instante alguien por atrás tomo uno de sus mechones de su cabello y empezó a jugar con el.

-Oh Fred, no sabes como me costo encontrarte.

Al oír esas palabras y esa voz se volteo bruscamente chocando con los casilleros, miro sorprendido a quien tenia enfrente, un azabache con el cabello recogido en una coleta y un mechón cubriendo uno de sus penetrantes ojos naranjas.

-L-Lenny... ¿Como me-

Fue callado por el dedo del otro chico sobres sus labios.

-Eso no importa, ahora seras mio.

-Ya te lo dije Lenny, lo nuestro jamas funcionará.

-Oh vamos osito, dame una oportunidad al menos.

-Te di muchas oportunidades antes, no pienso darte mas.

Dicho eso se retiro dejando al azabache confundido.

-Con que te gusta jugar rudo ¿eh?, bien, seré rudo.

Al día siguiente Fred falto a la escuela.

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Mañana público los otros dos </3

A N T I S O C I A LDonde viven las historias. Descúbrelo ahora