Ptv.:Shaaron
Ha llegado el gran día, el día en que las chicas nuevas llegarían a la escuela. Estoy emocionada por verlas y a la vez siento que serán unas perras.
Me quedo sentada en mi cama unos minutos y reviso mi celular. Luego de eso me adentro en la ducha paso el jabón por todo mi cuerpo y siento algo áspero. Mierda me metí a la ducha sin haberme quitado el sostén. ¿A quien demonios se le ocurre meterse a la ducha con sostén? Pues a mi, a la querida Shaaron Tussie. Me quito el sostén y lo tiro en algún lugar del baño. Salgo de la ducha luego de bañarme me visto y me hago un moño despeinado ya que no quería perder el tiempo peinandome.
-Buen...s.-bostezo- Día...s.- ok creo que hoy no será mi día.
Tomo mi desayuno y subo a agarrar mi mochila para irme con mamá hacia a la escuela. Luego de varios minutos debido al tráfico, llegamos al majestuoso "zoológico". Entro a la escuela caminando super lento por el pasillo principal. La gente me mira extraño, digo no a mi si no a mis pies. Observo mis pies y abro los ojos como platos llevaba una "converse" roja y otra violeta. Corro a mi casillero y veo la gloria. Gracias al cielo que tenia otros zapatos de la clase de educación física. Cambio de zapatos y en el acto de cerrar mi casillero oigo pasos detrás de mi. Me volteo para ver a Julian.
-Hola hermosa.-dice pasando su mano por mi rostro.
-Quítate wey.- digo aun dormida, osea con cara de zombie.
- ¿A donde vas?- pregunta él.
- A la mierda.
-¿Al salón?- dice riendo.
-No, a tu casa.- contesto sarcasticamente y me voy directo al salón.
Espero unos minutos y todos mis amigos llegan, y mis compañeros de clases también. El maestro entra por la puerta... "Nooo Shaaron por la ventana", acomoda sus cosas y luego da un un golpe en el escritorio indicando que va a decir algo.
- Alumnos, el día de hoy dos nuevas estudiantes harán su acto de presencia aquí en la escuela... y en este salón.- se oyen susurros por todo el salón, me imagino que estarán hablando de las dos chicas.- Por favor, Jessy y Naia, pasen y hagan una presentación.- entran las dos chicas morenas y esbeltas. Una de cabello corto rizado y la otra con el cabello hasta mitad de espalda e igualmente rizado.
-Buenas... am yo soy Jessy Marie y tengo 17 años.- dice cabizbaja la chica. Al parecer es tímida.
-Yo soy Naia Arias y tengo 18 años.- dice la otra con un tono seco y cortante.
-Bien pueden tomar asiento en aquella mesa.-el profesor señala nuestra mesa y yo miro los dos asientos disponibles para ellas dos.
Se acomodan y comienza la clase.
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Las clases estuvieron extremadamente aburridas. Irene no llegó nunca y nuevamente Damian fue a almorzar con Verónica, pero esta vez en la cafetería de la escuela. Es tan extraño acostumbrarme a verlos juntos.
-Hola, nosotras no tenemos amigas aquí en la escuela, así que quería proponerte ser nuestra nueva amiga.- dijo Naia.
- Claro, ¿por que no?- acepto la propuesta contenta.
- Si quieren vamos a la cafetería y tomamos algo juntas. Yo pago.- invita Jessy.
Estuvimos hablando un buen rato de cosas tontas, así como para conocernos mejor. Me presento y ellas continúan hablando y yo escuchando. Jessy y Naia son de padres diferentes, pero de la misma madre. Tienen una hermana pequeñita de 2 añitos de edad que es de un tono de piel más clara que sus hermanas, Jessy dice que salió a su papá, osea al esposo actual de su madre. Miro para el lado y veo a Verónica y a Damian riéndose. Mi sonrisa se desvanece y vuelvo a observar mi batida de fresa. Jessy se levanta y se va hacer otras cosas.
-Oh, ¿te gusta ese chico?
-No, no, no es sólo mi mejor amigo, nada más.- sonrio ante la pregunta.
-¿Y ella quien es?- pregunta mi nueva amiga.
- Es... su mejor amiga, Verónica.-contesto sin despegar la mirada de mi batida.
-¿Osea que el no te considera su mejor amiga?- pregunta asombrada.
-No. Bueno, no lo sé.- se queda mirandome por unos segundos- Mejor nos vamos a clases, ¿si?, se nos va a hacer tarde.
Nos levantamos de la mesa y nos fuimos al salón de Química. Llegamos temprano, por primera vez en mi vida que llego temprano a esta bendita clase. Esperamos unos minutos y mis compañeros llegan y se acomodan. La clase comienza con total normalidad. Jessy no había entrado a clases, no es extraño, pero tampoco es normal que ande pérdida por ahí en los pasillos, sabiendo donde quedan los salones gracias a la directora que se encargó de enseñarles a ambas. Le reste importancia y atendí la clase. Luego de terminar todas las clases que me quedaban decidí irme al patio con Naia.
-Estas muy triste, Shaaron.- dijo dándome un pequeño golpe en el hombro.
-No es nada, solo estoy aburrida.- dije dando una sonrisa forzada.
Caminamos unos minutos a lo largo del patio sin decir ninguna palabra.
-Vaya, Vaya , pero miren a quien tenemos aquí. Mi querida Shaaron.-volteo para asegurarme de que no sea la persona que estoy pensando, pero para mi mala suerte si lo es.
-¿Qué haces tu aquí?- espeto molesta y nerviosa a la vez.
-Bueno nena, ¿se te olvido que también estudio en esta escuela?-pregunta sarcástico.- Veo que estas mejor. Te propongo que repitamos lo de aquella noche.
-¡Cállate! ¡Vete de aquí y dejame en paz!- grite desesperada.
-Oye, no seas tan grosera...- dijo riendo. Cuanto daría por borrarle esa estúpida sonrisa de la cara.
-Te dijo que la dejaras en paz.- se interpuso Naia.
- Está bien cariño, como tu mandes.- se dirigió a ella- Y tu mi querida Shaaron , recuerda que eso solo fue el principio de lo que se aproxima.- dicho esto se retiró.
- Lo siento Naia, pero me tengo que ir.
Salí disparada de la escuela y corrí rápidamente a mi casa. Quería llorar, gritar y de todo, me sentía mal, me sentía impotente.
Cuando llegué a mi habitación cerré la puerta con seguro y me desparrame en la cama. Lloré y demasiado, no sabía que hacer para que el pagará por todo lo que me había hecho. Tampoco quería informarle a alguien de lo que había sucedido aquella noche. Solo se que esos recuerdos horribles quedarán en mi mente para siempre. Me levante de la cama me di una ducha aun soltando lágrimas. No tenia ganas de comer así que volví a mi cama me hice bolita y lloré hasta quedarme dormida.
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Mis corazoncitos, siento haberles prometido un nuevo capítulo el miércoles pasado y no cumplir mi promesa, pero la verdad es que no tenía la musa prendida y hoy se me encendió. Así que aquí lo tienen, corto y preciso. No quería dejarlos sin capítulo nuevo hoy, así que decidí escribir. Espero que lo hayan disfrutado. Nos vemos en el próximo capítulo.Los amodoro <3
~MaryL
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Dolido Corazón
Ficção AdolescenteNadie me da una mano para salir de este profundo pozo. Ocultar sentimientos y demostrar que estoy bien es una profesión para mi. Querer gritar y no poder, romper en llanto para desahogarme. Arrastrar y aguantar muchas cosas las cuales a veces quisie...