You Only Live Once

Capítulo 9 - No quiero volver a verte cuando regrese!

 - Está bien! Lo siento nena – se acercó a mí – no quise gritarte de esa forma pero estoy algo cansado y sin contar que de verdad muero de hambre – me tocó la mejilla con su mano derecha mientras yo miraba al piso avergonzada – no voy a gritarte de esa forma otra vez – me tomó del mentón y me hizo verlo directamente a los ojos – de ahora en adelante seremos amigos, no quiero hacerte daño, confía en mí! – me dio un beso en la mejilla

 - Vaya vaya vaya! – dijo una voz desde la entrada de la habitación – primero la desprecias y ahora hasta le das besos, tú sí que necesitas ayuda para controlar tus instintos – Harry me miró abriendo sus ojos como platos y volteó a ver a su amigo

 - Basta Louis! Liam no deja de regañarme por tratar mal a esta chica y yo solo hago mi mejor actuación para que se quede tranquilo, no lo arruines que estaba haciendo mi mejor trabajo! – me miró y luego miró a Liam – ambos se la habían creído

 - Pues de actuación no le vi nada Hazza – dijo el rubio dándole una palmada en el hombro mientras dejaba unas bolsas en la mesa – más bien parecía una escena real

 - Cállate Niall que no sabes lo buen actor que soy, trajiste todo lo que te pedí? – dijo el rizado mientras abría una de las bolsas

 - Sí, CENA PARA 3! Mientras nosotros nos trajimos los postres para no verlos comer nada más – Dijo Niall emocionado – ven Maria, no sabíamos lo que te gustaba, así que decidimos traerte comida china

Yo había escuchado mi nombre ser mencionado por uno de los chicos pero no presté atención a lo que estaban diciendo, era como si la habitación se hiciera cada vez más pequeña y oscura. Cómo era posible que haya actuado de esa forma conmigo solo para que su amigo deje de fastidiarlo y cómo es posible que me haya hecho sentir absolutamente de todo con su sola mirada y tacto? Yo estaba en un grave error, un gran problema. Yo sabía que gustaba de ese chico desde el primer momento en que lo vi en la computadora pero jamás creí que este gusto podría llegar a ser tan fuerte una vez que lo tenga frente a frente y es que si nos ponemos a estudiar lo físico; sus hermosos y alborotados rizos castaños adornando esa cara que luce como la de un ángel por la piel tersa y blanca, sus rosados y bien definidos labios que eran gruesos, aquellos ojos verdes cual bosque profundo del amazonas que lograban desarmarte completamente si los veías directamente, ni que decir de su altura que me intimidaba de manera considerable y su tan bien trabajado cuerpo sin llegar a ser un ser exageradamente inflado. Sin lugar a duda todo ello haría que sea difícil no gustar de él pero si de algo hablamos que me gustó de él fueron sus manos; sus delgadas, fuertes y suaves manos que pude sentir al momento que caí sobre él y me tomó por los brazos JODER! Esas manos que te dejan sin respirar cuando tocan tu piel, esas manos que podían quebrarme de cualquier agarre. Eso era lo que me había llegado a gustar más de Harry Styles, eso y su manera tan servicial y amable que tenía de tratar a las personas, digo tenía porque a mí me trata como cualquier cosa menos como una persona. Tanto le molestaba que me haya chocado con él? Qué había hecho? Qué había dicho? Por qué era así?

 - María? Estás bien?

Una voz me sacó de mis pensamientos y sacudí mi cabeza para volver a la realidad, cuando lo hice tenía la mirada fija de 5 chicos sobre mí como inspeccionándome, estudiándome, escudriñándome. Todas las miradas eran distintas: Liam me miraba preocupado, como tratando de averiguar si me sentía mal. Louis tenía una sonrisa mientras esperaba que responda. Niall solo me miraba atento sin dejar de comer una tarta de fresa, Dios! Esos celestes ojos sí que eran hermosos. Zayn mantenía una mirada algo intimidante, de los 5 era quién, a mi parecer tenía los mejores ojos, y esos ojos los tenía clavados en los míos como leyendo mis pensamientos cosa que me hizo desviar la mirada casi inmediatamente hasta que me topé con el profundo bosque verde. Harry tenía una mirada que no podía descifrar, no sabía si estaba preocupado, enojado, cansado, aunque su ceño fruncido me decía que era lo segundo. No sé por qué pero no pude apartar mi mirada de la suya y así nos quedamos varios segundos, mientras él me escudriñaba con su mirada y yo solo moría con cada segundo.