Capítulo 26: La Ilusionista.

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"Ara, ¿de casualidad eres experta en ayudar a construir ilusiones en los demás y poder actuar tan descaradamente después de eso?", eso ha estado en mi cabeza todo el día desde que se fue y hasta ahorita en esta madrugada, y no he podido dejar de analizarlo, he sacado mil de conclusiones, pero ninguna me satisface. Entiendo lo que dijo, pero porque yo lo ilusionaría falsamente. Yo nunca he actuado así con él, ¿o si?, estoy tan confundida. Y mi consejera, que se supone es 24/7, no ha llegado a casa. Volteo hacia él reloj en la pared y marca las 2:30 am, me pregunto donde estará sin su anillo de bodas, ya que lo dejo dentro de mi bolso. La puerta empieza a sonar y se abre, es Sophie que camina despacio con los tacones en la mano.

-Son las 2:30 de la madrugada y necesito una explicación.- digo encendiendo la lámpara que está a mi lado, sí como de película.

-¿Qué rayos haces levantada a las 2:30? ¿Me esperaste toda la noche?- dice espantada y yo pienso ojala y estuviera despierta por esto-¿Qué estás loca Ara?

-No se, no y sí. En realidad sólo quise hacer la escena de película con la lámpara.

-Oye, ¿cómo te fue en tu primer día de trabajo?

-No fui.

-¡¿Qué?!

-Porque me dijeron que se pondrán en contacto conmigo por correo hasta que este bien de salud, son amables...

-Ah... ¿En serio? -asiento y ella se deja caer en él sillón.- ¿Llamaste a Javier y Antonio? Bueno a todos...

-Sí...- le digo con enfado y tomo mis muletas para levantarme a buscar mi bolso.

-¿Si..? ¿Qué tienes?

-Pues tuve que llamarles a pesar de no tener ni un gramo de ganas de hacerlo.- digo refiriéndome principalmente a Antonio, ya que mi hermano no contestó, lo que contribuye a que siga despierta a esta hora; pero él resto de mis amigos no me molestan, al contrario me alegra que se hayan comportado normal y no exagerando en preocuparse por mi.

-No seas así Ara...

-Ay, es la verdad Sophie, Antonio estuvo llamando todo el día, todo el día...

-Están preocupados...

-Lo sé, y entiendo pero no tienen porque querer sofocarme...

-Estás molesta por algo más ¿qué es?

-Ah, o sea cómo, quieres decir que Antonio y mi hermano no son suficientes para mi enojo, lamento no poder complacerte, pero es lo que hay...

-Alex Turner...

-No empieces...

-Pues tu no evadas el...-dice pero la interrumpo.

-...No, en serio no, déjalo así no tengo ganas de hablar.- digo riendo con molestia, estoy enfadada, molesta y no quiero explotar.

-Vale...

-Ah, y cuidado donde dejas esto...- le digo groseramente caminando de regreso a donde está ella y poniendo su anillo violentamente en la mesa de centro, me doy cuenta que estoy molesta con Sophie por no contarme con quien se ha estado viendo, entonces me dirijo a mi habitación y azoto la puerta.

Analizo mis actos anteriores y me avergüenzo, que dramática soy y desagradecida, además de patética, imagínense a un chica en muletas azotando una puerta. Vuelvo atrás para abrir la puerta y digo: -Perdón, sí pasó algo, pero en serio no tengo ganas de hablar de ello.

-No te preocupes, y yo te pido perdón por lo del anillo, yo tampoco quiero hablar aún de eso, quiero que sea otro día.- dice Sophie que sigue sentada en el sillón.

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