Te recuerdo

Capítulo 39: Lo que yo quiero saber.

Estamos Sophia y yo sentados, mientras yo le sigo rogando a ella que intenta llamar una vez más a Ara. Los chicos y yo estamos a punto de hacer el soundcheck, de hecho Ara debería estar aquí, él chico de las fotos, su compañero ya está aquí. Todos menos ella, y todo es mi culpa.

-No contesta, su celular manda directo al buzón.- dice Sophie con una calma insoportable.

-Su celular debe de estar descargado, llamale una vez más...- le digo muy seguro, ella me lanza una mirada crítica.

-Alex, esta mañana salió del hotel con 100% de carga, Ara no quiere que las busquemos. Está en serio enojada, ¿qué le hiciste?

-¿No te ha contado?- le pregunto confundido.

-No, ¿por qué? ¿tan malo fue?

-No es eso, te pregunto porque me extraña que no te haya dicho nada.

-Me dijo que volviste a ver a tu ex, ¿cómo se llama? ¿empieza con A? ¿Araina? ¿Arianna?- dice rascándose el cerebro.

-¡Arielle!- grito moderadamente, luego carraspeo y digo con un tono de voz normal.- Arielle... se llama Arielle.

-Ay ya, ok, no grites, ya lo tenía en la punta de la lengua. Ah y también me dijo que te besaste con ella.

-Dijiste que no sabías nada...- le recalco malhumorado.

-No, en realidad si sabia, solo quería ver tu cara mientras decía todo.

-¿Por qué eres tan horrible a veces?

-¿Disculpa?, tu fuiste él que andaba haciendo cosas a las espaldas de su novia- hace una pausa rápidamente- digo... tu chica, o lo que sea que tú y mi mejor amiga sean.

-That sounded so...

-Culero- me interrumpe hablándome en español.

-I was going to say horrible, but I guess what you just said that can work in the same way. -le digo regalandole mi mirada al suelo, él cual está cubierto por azulejos blancos y negros que me recuerdan a ella. Ara es ese tipo de persona que tiene dos lados perfectamente definidos, casi siempre sabes donde inicia uno y cuando terminar otro, es como si dos personas vivieran ahí, sin mezclarse, y por eso sabes quién te está hablando cuando la ves, cuando te mira, se mueve o expresa. Ella es algo así tan, tan inexplicable y eso es lo que te hace preguntarte si sigues siendo tu, si ella no ha hurgado ya en tu mente y alma. It's gonna sound silly, but sometimes I feel like she can see things that nobody can, she can see things inside of me that I can't not. As if she had been sent from another era, from the 60s, but still fitting perfectly with the now.

-¡Alex!- grita despabilandome bruscamente la loca de la Sophia.

-¡¿Qué?! ¿¡qué quieres!?

-¡¡Ya llego Ara, baboso!!

-¿Qué? ¿Qué? ¿Dónde?- pregunto y paso los ojos por todas partes.

-JAJAJAJAJA.- cuando escucho reír con malicia y burla a Sophie caigo en cuenta de que estaba bromeando.

-¡¡Ya me tienes harto!! No te importa cómo puede estar tu amiga ¿verdad?- le digo frustrado y desesperado, ella se vuelve a reír, pero ésta vez como burlándose de mí por algo más, como si ella supiera algo que yo no. -Tú sabes dónde está, ¿no es así?

-Sí...- dice satisfecha.- Pero no pienso decirte, ella no quiere verte.

-En serio, no sé como Ara soporta ser tu amiga...- le digo y me me bajo del escenario para ir a fumar a un lugar donde no esté él ácaro de Sophia.

...

Los chicos y todo el equipo había ido a un lugar muy popular a tomar algo horas antes del concierto, yo los acompañe, pero me aislé del grupo la mayor parte del tiempo, Ara seguía sin aparecer, pero ya no estaba preocupado sólo por ella, ahora me preocupaba por lo que pasaría con nosotros. Ara tenía razón en estar molesta, me había comportado como un patán, cuando al mismo tiempo anuncio que la amo cada rato que puedo, lo que me refleja como un descarado.

Al momento de volver, las horas que antes dijimos nos habían alcanzado e íbamos tarde. Ahora que ya habíamos llegado, todos iban por sus cosas con calma, sin apresurarse, como si no tuviéramos que salir en 5 minutos, yo ya estoy listo. Busco en los bolsillos de mi pantalón una plumilla, pero no hay nada ahí. Veo a los chicos que ya vienen, pero yo voy de regreso a la habitación que nos cedieron a buscar una maldita plumilla. Cuando entro Ara está sentada en un sofá, tiene un plátano en una mano y en la otra su tableta. Cuando nota mi presencia alza la vista sin dedicarme una mirada significante, pero sé que me mira esperando algo de mi, que yo diga algo. Al ver que no hago sonido alguno, baja la mirada a su tableta, mientras le da una mordida a la fruta en sus manos. Está tan calmada, yo creí que...

-Alex, ¿te comió la lengua Arielle ayer que te beso que no dices nada?- suspira con lastima- Parece que te sorprende verme, pero creo que no es mi presencia en sí, si no que no estoy del humor esperado, ¿o me equivoco?- dice ella, con ese comportamiento propio de las situaciones que saborea. Luego me pregunto cómo por centésima vez desde que la conozco, como es que sabe lo que pienso.

-Te molestaste conmigo, no es como que esperará que me trajeras lo primero que viste al salir del hotel que te recordará a mi, pero tampoco que estuvieras tan de buen humor.- digo un poco molesto, tan sólo un poco.- Ara, sé que hice mal, pero me preocupaste, pudiste haber enviado un mensaje.

-Ay cálmate, no es como que haya desaparecido por días.

-Para mi querida fue algo así...

-Triste, ¿verdad?- dice y yo muestro un gesto que le dice a la chica que amo que no la entiendo, cuando me doy cuenta de que si entiendo, pero no quiero aceptar que tiene razón.- No saber dónde o cómo está una persona que te importa.

-Lo es...

-Oye, ademas de decirme lo obvio, ¿no tienes nada más que decirme?- me dice arrojándome al agua con los tiburones, porque yo no sé qué quiere que le diga.

-Tu sabes que lo arrepentido que estoy por haberte mentido, lo siento, a veces olvido que...

-Bueno, eso es demasiado obvio...-me interrumpe arrojando su cabello hacia atrás, para luego levantarse del sofá. .

-Cariño, ¿hasta cuándo me darás mi sentencia?

-¿La verdad?- me pregunta mientras tira la cáscara del plátano a un cesto de basura, yo asiento- Pues... eso sólo tú lo sabes.

-Cariño, ¿te gusta torturarme?

-Como haces preguntas... pero sí, a veces, pero esta no es una de esas ocasiones. Bueno ya vamonos, tenemos trabajo que hacer.- me dice a punto de salir de la habitación.

-¿Trabajo? Ara, por favor... - le digo tomándola suavemente del brazo para atraerla hacia mi, cuando tengo su oído cerca le digo- Te extraño, ¿tu no me extrañas?

-Más de lo que crees, así que ten en mente que ambos estamos pagando la penitencia.

-Entonces olvidemos esto...

-No puedo... - me dice en voz baja y su brazo se desliza entre mis dedos cuando se va.

Mientras se aleja, ella voltea a ver si mientras se va la sigo viendo y sonríe al ver que es así. Cuando la veo doblar la esquina salgo de algún tipo de estupor y corro a donde sea que tenga que estar, pero no sin antes preguntarme ¿qué quiere Ara de mi?

....

Hola! Nuevo capítulo, espero que me disculpen por estar subiendo cuando se me da la gana, pero es que el tiempo no alcanza queridos lectores. ¿Qué creen que sea lo que Ara quiere saber? Para mí que es lo mismo que todos ustedes, pero bueno, ni nuestro amado Alex Turner sabe, no tiene idea. Espero y les guste el capítulo, lo hice con mucho amor para todos ustedes y para conservar mi salud mental, espera khe?! JAJA. ¿Saben qué? el otro día estaba oyendo Four out of five, y me imagine preguntándole a mi crush (él que no es Alex Turner, ya que la presencia de Alex en mi vida es más imposible que la fregada) si quería ir conmigo al The Information Action Ratio, en fin, muy pronto le pregunto. Muchas gracias por leer, Love you all!