Vosotros diréis: "criticar el ver un deporte es muy divertido; pero...
¿Qué hará una persona de su tiempo desocupado?
¿Cómo ganará dinero?
¿Cómo ha de divertirse si no va a las carreras o al fútbol?"
Bien, es casi la solución de un acertijo el tratar de formar un programa que se adapte a todo joven ya sea rico o pobre, o de mediana posición, y que viva en la ciudad o en el campo. Que se desarrolle en invierno o en verano, a solas o en compañía, en un salón o al aire libre, de día o de noche. ¿Podríais vosotros formular tal programa?
Creo que no, pero he aquí en principio una sugerencia que puede ser útil.
El gran secreto es tener por divisa estas palabras: No haraganear.
El bogar sobre un mar calmado no tiene interés, pero el hacerlo impulsado por una suave brisa con el mar un poco alborotado y teniendo que enfrentarse a las olas una tras otra, eso ya es diferente.
Remando uno para sí en la vida, encuentra alegría al enfrentarse constantemente a una nueva ola de trabajo y actividad..
YOU ARE READING
Roverismo Hacia el Éxito
Non-FictionUn libro del Deporte de la Vida, para Jóvenes Por Baden-Powell