Daniel estaba cansado. El entrenamiento de Ember y Max era extenuante, y estaba afectando su sueño. Despertaba cansado y adolorido. Evidentemente tu comportamiento en el mundo de los sueños, como había decidido decirle, tenía repercusiones en el mundo real.
Desde ese día en que Natalia casi le quiebra el brazo a Mauricio y la suspendieron, tampoco volvieron a molestarlo. Bueno, no mucho. Paraban en cuanto Daniel los amenazaba con decirle a Natalia.
De esto hablaban con ella en la plaza, que quedaba a dos cuadras de la casa de Natalia. Sentados en los columpios, soplaba una agradable brisa otoñal, y las hojas teñían de carmesí el suelo. Y el cielo, que comenzaba a atardecer, parecía querer hacerles juego.
—No podés ser un debilucho en este mundo Daniel.
—¿Qué querés que haga?
—Yo te voy a entrenar, vamos. No podés no saber ni tirar un golpe.
—Se como tirar un golpe.
—A ver.
Natalia saltó de la hamaca y Daniel la siguió. La plaza estaba vacía. Ella se puso a dos metros de distancia y extendió la mano hacia él, con la palma abierta.
—Golpéa acá —dijo ella.
Daniel tiró un golpe soso, no quería lastimarla. Natalia frunció el ceño.
—Dale tonto. Pegá bien, no me vas a lastimar.
De golpe, Daniel se dio cuenta que ambos se estaban mirando a los ojos.
Natalia era hermosa. Su cabello y ojos castaños no destacaban, pero tenía un rostro redondeado y angelical, que te hacían creer que era incapaz de cualquier maldad. Parecía pura, inalcanzable, como de otro planeta.
Totalmente fuera de su alcance.
La frustración fue más fuerte con él, y atacó con fuerza.
—¿Ves que no sabés pegar? Me estás empujando, no me estás pegando. Y estás tirando todo el cuerpo para adelante, perdiendo el equilibrio. Yo te enseño.
Natalia comenzó a acomodarle el cuerpo. Donde quiera que lo tocaba sentía como si el cuerpo le ardiera. Le acomodó los brazos, las piernas, los hombros y la cabeza. Cuando terminó, estaba en una posición incómoda, pero de alguna forma se sentía estable, firme. Casi poderoso.
—En esa postura estás cubriendo todos tus puntos débiles, y estás en equilibrio. Ahora intenta dar un paso manteniendo la postura.
Daniel dio el paso, Natalia dio uno hacia atrás, para mantener la distancia.
—Auch auch —dijo Daniel —. ¿Por qué tiene que doler tanto?
—Ya te dije, porque sos un debilucho en este mundo.
—¿Y en el mundo de los sueños?
—¿Así le decís?
—Sí, ¿te parece mal?
—No. En ese mundo sos más fuerte que yo. Por eso hay que ayudarnos mutuamente. Ahora dando un paso con la pierna derecha golpea con la misma mano.
Daniel lo hizo lo mejor que pudo.
—Mal. Está mal, tu golpe tiene que ser como una explosión, tiene que ser rápido, no pesado. Mové las caderas y la cintura para darle la fuerza de todo tu cuerpo, pero hacelo como en una explosión, intenta de nuevo.
Esta vez el golpe de Daniel hizo "paf" al impactar la mano de Natalia.
—¡Muy bien! Sigamos así, dale. Uno, dos, tres —A cada cuenta Daniel tiraba un golpe, alternando el brazo y la pierna —. Uno, dos, tres.
Al tiempo el sol cayó, y ambos estaban transpirados y cansados. Volvieron a la casa de Natalia, que lo invitó a comer como si nada. La madre de ella no puso objeciones, y Daniel avisó a su casa que llegaría más tarde.
—¿Y tu papá? —preguntó Daniel.
El rostro de Natalia se ensombreció.
—Ah, perdón —dijo Daniel.
—No, está bien. Mi progenitor se fue al exterior cuando se enteró que yo iba a nacer.
La madre no hizo ningún comentario, solo suspiró.
—Pueden ir arriba chicos, yo los llamo cuando esté la comida —dijo.
Natalia lo guió por unas escaleras. La habitación que abrió estaba dominada por el rosa. Las paredes eran rosas, el cubrecama era rosa, y sobre este había varios almohadones de distintos tonos a combinación. Una biblioteca dominaba el lado derecho de la habitación, y un escritorio con una computadora portátil el lado izquierdo. En la biblioteca había libros, mangas, comics, y figurillas de acción. La pared estaba adornada con posters de animé y artistas marciales. Daniel reconoció varios, entre ellos posters de Fate/Unlimited Blade Works.
—¿Te gusta Fate? —preguntó.
—Sí, ¿a vos?
—Es excelente. ¿Jugaste la novela visual?
—¿La qué?
Daniel negó con la cabeza. No había caso, no solo tenía cosas que enseñarle en el mundo de los sueños.
—Vamos a descargarla, ahora te la muestro. Es la fuente original de la que surgió toda la franquicia de Fate.
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La Diosa Oscura (New Game)
FantasyDaniel es un adolescente tímido y retraído. Blanco de burlas en la escuela e ignorado por Natalia, la chica que le gusta, su único refugio son sus sueños, en donde es un asesino con grandes habilidades. Cuando Natalia aparece en su sueño atacada por...