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Would you marry me? - Percabeth

Escrito por: ClaruPolo01

Would you marry me? - Percabeth

Narra Annabeth

Percy y yo caminábamos por la playa, tomados de la mano. Hoy era nuestro aniversario de novios. ¡Ocho años! Ocho años habían pasado desde aquel primer mágico beso submarino.

Él y yo habíamos pasado muchas cosas juntos. Guerras. Batallas. Pérdidas de amigos. Habíamos ido al mismísimo infierno juntos. En fin, en su mayoría eran trágicas, pero juntos sabíamos cómo sobrellevar nuestro pasado.

De un momento a otro, Percy me tomó en sus brazos y me arrastró con él hasta el mar, donde nos sumergimos completamente. Creó una burbuja de agua en mi cabeza para que pudiera respirar.

- ¡Sesos de alga! - exclamé. No me gustaba terminar empapada, pero a veces valía la pena. De hecho, todo valía la pena por pasar un rato a solas con Percy sin las chismosas hijas de Afrodita siguiendo cada uno de nuestros pasos. - ¿Por qué hiciste eso?

El chico rió antes de responder.

- No lo sé - dijo -. Tal vez me gusta ver como te sonrojas.

Apenas lo dijo, me sonrojé. Odiaba cuando hacía eso. Sus palabras lograban tener un efecto muy extraño sobre mí.

Percy volvió a reír.

- Feliz aniversario, Annabeth - dijo juntando nuestros labios. Esto de los besos submarinos era algo que hacíamos todos nuestros aniversarios (en realidad, desde que todo estaba definitivamente tranquilo, lo hacíamos prácticamente todos los días, pero en nuestros aniversarios se sentía especial).

- A ti también, Perseo.

- No me llames así.

- ¿Así cómo? ¿Perseo?

- Sí.

- ¿Y qué tiene si quiero llamarte Perseo?

- No lo harías.

- Sabes que sí, Perseo.

- ¡No me llames así! - exclamó, provocándome una carcajada. Volvió a besarme, solo para callar mi risa. Me atrajo más hacia su cuerpo, rodeándome la cintura. Rodeé su cuello, mientras jugueteaba con su cabello. No nos separamos hasta que nos faltó el oxígeno a ambos.

- Annabeth... - dijo mi novio, de repente algo nervioso.

- ¿Qué? - pregunté.

- Hace un tiempo que quiero preguntarte esto...

Sacó una caja de terciopelo negro. Se arrodilló y la abrió. Dentro de ella, había un bello anillo plateado, con un zafiro azul ovalado en el centro, y dos pequeños diamantes cuadrados a los lados de este.

Pude sentir como los latidos de mi corazón comenzaban a acelerarse.

- Annabeth Chase, ¿te casarías conmigo?

Por unos segundos no supe que hacer. Percy estaba ahí, mirándome, y las palabras simplemente no salían. Era obvio que aceptaría, pero estaba tan atónita que no supe cómo responder.

- ¿Annabeth? ¿Listilla? - dijo Percy levantándose, preocupado. - ¿Estás ahí?

- Sí - murmuré.

- ¿Sí qué? ¿Si estás ahí o si te casas conmigo?

- Sí... - volví a murmurar -. Por supuesto que me casaría contigo.

Me volví a arrojar en sus labios y lo besé de la forma más tierna posible, mientras él deslizaba el anillo sobre mi índice derecho.

- Te amo, Listilla - murmuró el hijo de Poseidón sobre mis labios.

- Yo también te amo, Sesos de Alga.