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Never Again - Tratie

Escrito por: ClaruPolo01

Never Again (Nunca más) - Tratie

Narra en 3ra persona

  Travis se corría a través de la colina de fresas, persiguiendo a su novia, Katie Gardner.

  El sabía de sobra que muchas veces metía la pata sin darse cuenta, pero normalmente Katie se reía de él por ser tan despistado, pero esta vez, ella estaba furiosa.

  — ¡Katie! — exclamó el chico, jadeante. Llevaba corriendo desde la cabaña de Deméter. Había llamado a la puerta para buscar a su novia, pero cuando esta lo vió, simplemente comenzó a gritarle que era un idiota, y luego salió corriendo, llorando a mares.

  — ¡Déjame! — gritó la chica desde lo alto de la colina, haciendo crecer un matorral de rosas cubiertas de grandes espinas, para poder frenar al hijo de Hermes, o por lo menos retrasarlo.

  Travis apuró el paso, dándole poca importancia a las espinas que se clavaban en sus pies y piernas, y ahogando algún que otro quejido.

  — ¡Katie! — volvió a gritar, pero lo único que obtuvo por respuesta fueron sollozos y un llanto ahogado —. ¡Por todos los dioses, Katie! ¿Puedes decirme por lo menos qué te sucede?

  La chica se detuvo un momento y se dió vuelta, hecha una furia. Sus ojos estaban rojos de tanto llorar, y tenía las mejillas empapadas en lágrimas.

  — ¡Tú! — gritó, señalándolo acusadoramente —. ¡Tú eres lo que me sucede!

  Travis no supo cómo reaccionar ante eso. ¿Qué le había hecho ahora?

  — ¡Katie! — parecía que el nombre de la chica era lo único que podía salir de la boca de Travis —. ¡Katie, espera!

  La hija de Deméter lo ignoró completamente y siguió corriendo. Ya estaban por entrar en el bosque.

  El hijo de Hermes apuró aún más el paso, y al fin consiguió tomar a su novia por la cintura. La dio vuelta, para así poder mirarla a los ojos.

  — ¡Suéltame, idiota! — dijo la chica con la voz quebrada, tratando de soltarse del agarre de su novio.

  — No — respondió su novio firmemente —. No hasta que me digas que rayos hice ahora.

  — Lo sabes perfectamente — gruñó Katie.

  — No, no lo sé. Sinceramente no tengo idea.

  — ¡Que sí!

  — ¡Que no! — A Travis no le gustaba enojarse con su novia, pero a veces era imposible. La chica negó con la cabeza e hizo la mirada a un lado.

  — Katie, jamás haría algo para lastimarte. No a propósito, por lo menos — suspiró el chico.

  — ¿No? Entonces explícame que hacías el otro día besando a Drew.

  Los ojos de Travis se abrieron con sorpresa.

  — ¿Yo y Drew...? — dijo, tratando de buscar algún tipo de sentido en lo que decía su novia —. ¿Quién en el nombre de Hermes te dijo eso?

  — Miranda. Los vió besándose junto al lago — la voz de la chica se fue apagando y rompiéndose.

  Travis no sabía si echarse a reír o a llorar, así que optó por la primera, soltando a su novia.

  — ¿Qué es tan gracioso? — exclamó la hija de Deméter, más enojada que antes.

  — El que besaba a Drew era Connor, por los dioses, y fue todo por una estúpida apuesta que tuvo conmigo — explicó.

  Las mejillas de Katie se tornaron rojas, pero esta vez no fue de furia, sino de vergüenza.

  — ¿Connor? ¿Apuesta? — murmuró con la vista perdida en los árboles —. Yo... Yo mataré a Miranda — volvió a hablar enojada, pegando una patada al suelo. Luego giró su cabeza hasta encontrarse con la mirada de Travis —. Lo... lo siento — balbuceó.

  Travis sonrió y secó las lágrimas de su chica con sus pulgares.

  — Si te hace sentir mejor — sonrió el chico —, Drew golpeó a Connor luego de que la besara. La nariz le sangraba como nunca.

  Travis consiguió sacarle una carcajada a su novia.

  — Nunca vuelvas a reaccionar así sin hablar conmigo antes — le dijo el chico, serio, pero abrazándola por la cintura tiernamente. Esta vez Katie no intentó soltarse.

  — Nunca más — dijo la chica sonriendo, antes de juntar sus labios con los del hijo de Hermes.