Capítulo 8.

1.2K 54 1
                                    

Danielle POV.

Una semana después note a Carter viéndome trabajar la habitación y sé que él se admitió a si mismo que había cometido un error. Gigantesco.

Si él fuera mejor esposo, desearía volver en el tiempo y volver a representar la escena con Sara. Él la rechazaría, para después con algo de orgullo decirme de sus acciones y yo le daría sexo caliente como recompensa. Pero ya que él no lo hizo así solo le quedaba un destino.

Sufrir.

Camine entre los invitados como la señorita de sociedad que papá y mamá me enseñaron a ser, llevaba un lindo vestido lila en telas vaporosas y ajustadas al mismo tiempo, en lugar del negro que todas las mujeres, a excepción de Nikki parecían llevar. Aunque el clima se dirigía hacia el invierno yo despreciaba los deseos de la Madre Naturaleza y no llevaba nada abrigado. Oh, y cabe mencionar que estos tacones no serían de ayuda en las aceras heladas.

Temprano cuando me encontré con Carter en la sala lo desafié con la mirada, pero el mantuvo la boca cerrada por su bien, comento con educación el clima y me ayudo a subir al SUV. Todo el tiempo estuvo acompañado por el frío silencio que yo había mantenido por una semana completa.

Carter POV.

Irritación rasgaba a en mí, ella se había convertido en un cubo de hielo viviente sobre lo que a mi persona respecta. Danielle me había lanzado una figurita de cristal potencialmente peligrosa ¿Se había disculpado ella? No. Solo me trato como a un amable desconocido, ella se mantuvo fuera de mi camino, movió su ropa ella misma de mi dormitorio y se encerró en el de ella, y tomo todas sus cenas fuera de casa.

Su distancia me hacía querer zarandearla para que por lo menos se enojara, váyase a saber porque. Pero la soledad me estaba carcomiendo, extrañaba su calor a mi lado, su canturreo cuando usaba la máquina de correr y su charla animada durante la cena. Echaba de menos las llamadas sobre Nemo o algún video en mi bandeja de correo de Snow haciendo una pirueta.

En cambio, me  gane lo que pedí desde el principio.

Una esposa solo de nombre, una mujer de negocios que se mantenía a sí misma y dirigía su vida. Y la odiaba, quería a la Danielle molesta, la juguetona, la sarcástica, la que destilaba paz mientras dormía, deseaba a todas las Danielle’s.

El recuerdo de su último beso pasó por mi mente, pero estaba perplejo. Sentía demasiada nostalgia por ella. La noche de los perros ella había demostrado su interés en el mundo, desnudando su alma por una causa y yo le había lanzada a Sara como prueba de que era una horrible persona.

Pero esta horrible persona que soy nunca había soñado con Sara, nunca ha añorado una sonrisa de ella y que dios me ayudara, nunca la extrañaba como lo hago con Danielle, nunca quería pelear juegos tontos con ella y tampoco quise tener una vida junto a ella, pero Danielle ella era distinta.

¿Qué demonios me pasa?

Tome mi copa y me moví por la habitación, era el momento de averiguarlo.

Danielle POV.

-Esposo a la vista – se burló Nikki.

Levante la vista y vi a Carter atravesando la habitación, lo ignore y centre mis ojos en Nikki y Rebecca, la diversión brillaba en la primera y la otra parecía un poquitín culpable. Moví mi dedo hacia mis nuevas amigas.

-Déjenlo, chicas.

-¿No lo hago todo el tiempo, Dani? – masculló Becca.

-Esta es la cuarta vez en la noche que huimos para alejarme de mi marido – dije.

Serie, La esposa del magnate #1. A marriage only in name.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora