10 ventajas de ser callada.

Capitulo 3:

De todas las personas del mundo, bueno, de todas las personas que van a esa biblioteca.

Justo él.

Justo ese libro.

Me escondí tras un librero grande y viejo al parecer. Lo mire de lejos, él estaba allí, acercarme seria un gran error. Que no estaba dispuesta a cometer. Estaba tranquilo, parpadeaba cada cuanto; parece que le gusta el libro y mucho. De hecho me parece que esta demasiado concentrado, porque hace un buen rato que una chica le esta coqueteando.

Ella carraspea la garganta, lo mira pícaramente y pestañea como si su vida dependiera de ello.

Él sigue leyendo el libro, la ignora. Tiene los audífonos puestos, pero creo que aún sin ellos no cambiaría en nada la circunstancia.

Ella le toca el hombro, él voltea, ella dice algo que no llego a oir, él alza las cejas y sigue su lectura.

La chica, ya frustrada, se desparrama en su silla y saca su celular, ¿Por que está en una biblioteca si no va a leer?

En cuanto a Zac no lo veía leer mí carta. Solo lee el libro.

<<¿Que más crees que debería hacer con un libro? >> Me regaño mi conciencia.

Le doy la razón.

Se acerca otra chica una castaña con ropa que al parecer alguna vez fue de su madre, pero está sí capta su atención. Lo que molesta a la chica sentada a su costado.

Ella le habla, él alza una ceja. Él voltea a donde yo estoy, instintivamente me escondo más. Se para y deja el libro en la mesa, yo cojo el libro más cercano. Se acerca, yo pongo una pagina al azar. Se para al frente mío, yo finjo leer. Se apoya en el librero, yo sigo viendo el libro.

-Me estabas espiando.- afirma al pararse al frente mío.

Yo bajo mi cabeza y niego con esta.

- Te vieron espiándome.

Yo sigo negando como idiota.

-¿Supones que me mienten?

Me limito a encogerme de hombros.

-Y decían que yo era frió y cortante.- susurró.

-Que tenga un buen día.- digo y me doy vuelta.

Me deja irme, pero llego a escuchar su respuesta: ¨No existen días buenos, aún.¨ Yo volteo a verlo y él me mira. Y eso fue todo.

Deje el libro con la bibliotecaria sin decir nada. Y me fui, sin llevarme otro. Mala idea. La ventaja se iba a demorar en llegar, y la verdad, y no tenía nada en contra de eso.

Al día siguiente vuelvo a la biblioteca para enterarme que se llevaron prestado el libro de Amor en tiempos del cólera. La ventaja esperaría más.

Miro en la ficha de los que se han llevado el libro alguna vez y el último nombre que veo dice << Michael R. >>

Eso me alivia un poco. Eso me dice que Zac posiblemente no haya leído la carta.

¿Quien será Michael R. ?

Salgo de la biblioteca, sinceramente solo quería ver si él estaría ahí. Fue una estupidez y estoy plenamente consciente de ello.

Paso una semana, yo iba todos los días a la biblioteca y recorría esos largos pasillos llenos de palabras que algún día leería. Esperaba que llegara el chico que se llevo el libro de Amor en tiempos del cólera. Ya me había hecho amiga de la bibliotecaria, se llamaba Camila. Era joven, tenía 22 años y al parecer ser bibliotecaria era lo que siempre quiso ser. Y eso me hizo pensar que eso tal vez es lo que yo quiero ser, en realidad. Digo, pasar desapercibida y no importar; ya lo hago, es el trabajo perfecto. Ella también dijo que tenía un novio desde hace 2 años, se llamaba Felipe, y dijo que todo iba bien. Me contó casi toda su vida. Al parecer somos amigas, y no tengo nada en contra de serlo.

Un día vino un chico, castaño, con el pelo teñido un poco en las puntas y vestía como rockero. era todo lo que una chica normal podría desear, o eso parecía. la verdad, era muy culto aunque no lo aparentaba. Dejo un libro y se me perdió entre las estanterías. Camila me llamo, él se había llevado el libro de Amor en tiempos del cólera. Ahora si podía escribir la tercera ventaja. Aunque ese día me dedique a espiar a ese chico. Camila me dijo que cada vez que lo veia tenia otro color de pelo y eso la verdad me pareció muy interesante y divertido. Lastima que no le puedo hablar, bueno, lastima que no tengo el coraje para hablarle.

15 de noviembre del 2014:

Querido amigo ( o amiga):

Posiblemente te preguntes qué es este papel ( probablemente no). Bueno, ¡Haz encontrado una de las 10 ventajas de ser callada! .... Bueno sé que no te importa., pero igual. NO botes esta carta si no te gusta, solo devuélvela al libro. Posiblemente está sea la única carta que encuentres, a menos que seas suertudo y si no lo eres, pues confórmate con esta, supongo.

3° Ventaja de ser callada: ¨La poca notariedad¨

Bueno, la verdad, para MUCHOS, la poca notoriedad es horrible; pero es porque no quieren saber lo bueno que es tenerla. Digo, si cometes un error las personas tientan a no notarlo. Digo yo lo tomaría como súper poder, ser invisible. Yo soy de las personas con ese ¨poder¨. Paso desapercibida en todo, hasta cuando estoy al frente y se supone que todos me miran. Eso depende de quien están hablando, y ya que soy yo.

Nunca entenderé ese empeño que tienen en ser el centro de atención, digo, yo no querría serlo. porque si eres el centro de atención no puedes tener secretos. Le cuentas a uno y se enteran todos. No puedes confiar en nadie. Pero la mayoría de chicas disfruta esa atención. La mayoría de chicas que lo disfrutan, también muestran más de lo que deben.

Aparte, todos somos una copia de alguien a fin de cuentas. Alguna vez a alguien le gusto lo mismo que a nosotros, alguna vez alguien vistió lo mismo que nosotros. Lo único que nos diferencia es el pensamiento, y eso; todos adaptamos ideas de otras personas. Es más fácil pasar desapercibido por eso, no es que vean algo extravagante en ti; es que ven algo interesante en tus pensamientos. Claro estoy hablando del interés sano, otra cosas es el interés que quiere la mayoría, el interés en ser popular.

En conclusión: No es bueno ser notado, se te hace una carga. En cambio, si no te notan, tientan a no criticarte, a no herirte. pasas desapercibida y puedes esconderte tras algo, para que no se den cuenta de ti. Ves? Un súper poder. Siempre hay un limite, claro; pero en lo personal espero traspasarlo. aparte te salvas de exámenes orales, por ejemplo.

Con mucho cariño

,¨Nadie¨.

Doble la carta, como siempre, y la metí en el sobre. Esta vez no quise poner tanta cosa, resumir es una buena idea.

¨Tercera de las 10 ventajas de ser callada

Tú, termina de leer y devuélvela al libro, gracias.

De: Absolutamente nadie.¨

Lo metí en el libro y fui a dejarlo en la biblioteca.La biblioteca estaba más vacía que de costumbre, la bibliotecaria y yo.

Para mi suerte él no estaba allí, o eso creía.

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Sé que me demore en subir. Perdón. Pero, de verdad, tenia unos problemas.

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