EL TESTAMENTO (PARTE 2)

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Aparte de los papeles oficiales había dos sobres adentro, en uno estaba escrito mi nombre y en el otro el de mi hermano.

-Empecemos por lo oficial y luego lees con calma lo del sobre.

-Vale- respondí y empecé a leer

DON Nicolas Dempsey Conovan nacido en New York, el día 14/3/1970, con hijo de los consortes Don Jack Dempsey Leen y Doña Hope Dempsey Leen. Con D.N.I. número 58745214Q

Conforme al R.D. 54/2005, de 21 de Enero, deduzco fotocopia del documento de identificación precedente, que doy fe coincide con su original, y lo protocolizo, consintiendo el compareciente su trascripción en las copias.————————-

Declara que sabe y puede leer este testamento.——–

Manifiesta su propósito de otorgar testamento abierto, para lo cual tiene, a mi juicio, capacidad legal, y a tal fin expresa en este acto su última voluntad en la forma siguiente:

I = Declara que ha contraído un solo matrimonio con su esposa Doña Lucia Leen Gomez, de la cual tiene 2 hijos, llamados Jack Dempsey Leen y Hope Dempsey Leen, únicos del testador.———————————————–

-Hay mucho rollo más que no voy a leer, pasemos a lo importante

Para Hope: mitad de los bienes de la casa, el Ferrari y las joyas de su madre.

Para Jack: mitad de los bienes de la casa, el porche y todos mis títulos de boxeo.

Para la Asociación Española contra el cáncer: Todo el dinero.

Me parecía bien todo lo que me había dado, la verdad es que esto no me importaba en lo absoluto, de lo único que tenía ganas era de leer la carta que me había dejado.

-Te dejaré unos momentos a solas para que puedas leer con tranquilidad la carta de tu padre- dijo levantándose y abandonando el despacho.

Querida Hope:

Mi pequeña y mi más sagrado tesoro, sabes que lo eres todo para mí. Si estás leyendo esto es que seguramente ya estoy muy lejos, pero al mismo tiempo muy cerca de ti. Sé que seguramente no lo estarás pasando bien, pero las cosas siempre suceden por alguna razón. Puede que me vaya porque el destino cree que ya eres lo suficiente madura como para superarlo y porque llevo mucho tiempo con vosotros y vuestra madre allí arriba también me necesita. Ella ha estado esperando mucho tiempo y por fin nos podremos reencontrar. La espera se ha hecho eterna pero ha valido la pena al lado de tu hermano y tú. Sois lo mejor que me ha pasado en la vida, y jamás, me arrepentiré de un solo segundo pasado a vuestro lado. Sé que me amas, no te arrepientas por no habérmelo dicho más veces, porque créeme cuando te digo que lo sé y siempre lo sabré, ni que no esté contigo.

Tu madre nos dejo cuando no hacías nada más que despegar, en aquel momento me puede haber rendido pero seguí con vosotros igual que vosotros conmigo. Tu madre te amaba y sé que aún te sientes un poco culpable por su muerte. Sé que nunca he tenido el valor de decírtelo, pero esa noche no fue tu culpa, después de que discutirá contigo lo hizo conmigo, fue entonces cuando se fue en coche y tuvo el accidente. Nunca fui capaz de decirte nada por miedo a que no me volvieras a hablar. Espero que no me odies porque ni que no esté allí contigo es lo último que deseo en este mundo, tener una hija que me odie. Quiero que me recuerdes como el superhéroe que siempre creíste que era. He hecho muchas cosas mal en esta vida, pero si no las hubiera hecho puede ser que todo hubiera sido distinto. Eso nunca lo sabremos. Quiero que disfrutes la vida haciendo lo que te gusta sin tener miedo a que te juzguen, puedes ser una diseñadora boxeadora, nadie nunca te tiene que decir cómo ser, porque es eso lo que te hace original. El tiempo pasa muy deprisa Hope, aprovecha todos los momentos al máximo porque un día tú estarás en mi lugar, escribiendo una carta para tus hijos y entonces te arrepentirás de todo lo que no hiciste y pensaras en mi, en lo que te dije.

Te deseo todo lo mejor en esta vida, y confió en que Jack cuidará de ti y no te dejará ir por el mal camino. Me hubiera gustado conocer a mis nietos pero que sepas que esté donde esté os estaré observando a todos y ni que no te des cuenta te guiaré en tus decisiones y te seguiré apoyando pase lo que pase. Las decisiones equivocadas no te hunden, sino que te hacen más fuerte. Cuando tengas un día malo lee esta carta y créeme que tu día cambiara.

Te amo, pase lo que pase.

Tu papa, tu superhéroe.

Cuando terminé de leer la carta ya hacía mucho rato que lloraba, no me lo podía creer, me había dicho tantas cosas que estaba descolocada, la cabeza me iba a reventar. Dentro del sobre había algo más. Una foto de él y yo juntos, con los guantes de boxeo, riéndonos tirados en el suelo de un ring.

Abracé con fuerza la foto y lloré más fuerte, ¿porque la vida creía que me podía dar golpes por todos lados y yo seguiría de pie como si nada?. Ahora no tenía ganas de luchar, estaba desbastada, pero al mismo tiempo enrabiada por todo lo que me ha estado escondiendo todos estos años.

Enojada conmigo misma y sin saber cómo controlar todos mis sentimientos tiré todo lo que había en la mesa, incluido su portátil, lámpara... enfurecida me levanté y le empecé a dar golpes a todo lo que me encontraba.

-Hope, ¿pero qué has hecho?- dijo Lorenzo sorprendido, pero yo continué dando golpes.

-Toda la vida, lleva toda la vida mintiéndome- repetía una y otra vez porque no me lo creía.

De repente unos brazos fuertes me cogieron para que dejara de romper cosas.

-Chica, eres como un grano en el culo- me dijo el chico misterioso que no se en qué momento había llegado.

-Déjame en paz- dije soltándome de forma brusca.

-Entonces deja de destrozar mis oficinas- dijo soltándome.

-Me largo de aquí, dile a mi hermano que cuando termine de leer el testamento me llame- dije dispuesta a irme de aquí.

-Hope, espera por favor, tienes que firmar unos papeles y no puedo permitir que te vayas herida- dijo Lorenzo invitándome a sentarme otra vez.

-Lo siento- dije disculpándome por mi mal comportamiento, me sentía un poco avergonzada, pero el dolor por todo lo que había leído superaba todos los sentimientos que pudiera llegar a sentir.

-Lo entiendo- dijo Lorenzo dándome una palmadita en la espalda.

El chico misterioso aún estaba en el despacho y por lo que veía no se pensaba ir.

-Por favor ¿me puedes explicar el caso Lorenzo?- le preguntó.

-No, es privado ¿sabes lo que eso significa?- repliqué yo mirándolo.

-Soy su jefe y puedo saber todo lo que yo quiera- dijo de forma chulesca y yo rodé los ojos.

- Señor estoy llevando el caso del testamento de su padre Nicolas Dempsey.

-¿Eres la hija de Dempsey?- preguntó sorprendido.

-¿Que tanto te sorprende?- dije levantando una ceja.

-Sabía que tenía un hijo pero nunca me dijo que tuviera una hija- pero se calló de repente porque se dio cuenta que metió la pata.

Mi padre no hablaba de mi, ¿de verdad me quería?, todo esto tiene que ser una broma de mal gusto.

El boxeo, nada más. (PAUSADA)Where stories live. Discover now