roast yourself. ls

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Dedicado a: @GoldenRosesCrown , @YoureMyScxndal , @IvyRobalino

Pasaron dos días del impulso de Louis de seguir a aquel rizado que quería follarselo y a la vez lo odiaba con lo que parecía, todo su ser.

En esos dos días, había estado anotando en su pequeña agenda los comentarios que rimaban entre sí para iniciar el Roast Yourself. El vídeo sería grabado en la ciudad natal de Louis, Doncaster, y sus mejores amigos, y los fans que ganasen el concurso que sacaría serían parte de este. 

Odiaba cantar, y se sentía inseguro de su aguda voz, pero debía hacerlo, y esperaba que no recibiera tantos comentarios de odio, ya que en ese aspecto de su voz, él era realmente sensible.

Frotando su sien derecha con sus dedos, y dándole un sorbo a su té con su otra mano, siguió repasando las frases que tenía anotadas y pensando una lírica de fondo mientras miraba videos de Lana del Rey.

— Mmh, quizá la tematica de Born To Die o Love no es tan mala. Un vídeo bohemio y vintage.. —Dijo en voz baja a la vez que miraba ambos vídeos a la vez, en distintas ventanas cada uno.

La pantalla de su celular se encendió, mostrando que una notificación había llegado, y el sin ningún tipo de apuro lo tomo, apoyo su dedo para dar acceso al contenido y aplicaciones del mismo, y luego deslizo ese mismo dedo para ver el menú de notificaciones.

Instagram: Tienes una solicitud de mensaje de Harry Styles.

Los ojos de Louis se abrieron de par en par, en sorpresa, y sus manos empezaron a temblar, repentinamente nervioso por una razón que él desconocía. ¿En serio estaba nervioso por lo que un extraño pudiera decir de él? ¿Desde cuando Louis William Tomlinson está nervioso por lo que la gente piense, cuando en ese aspecto todo siempre le valió una mierda y la mitad de otra?

Tomó aire como su profesor de yoga le enseño.

Una.

Dos.

Tres veces.

Y apoyo su dedo en aquella notificación, que lo llevo a la aplicación de Instagram, y seguido, a la ventana de mensajes directos. Era la primera vez que aceptaría el mensaje de un ''seguidor'' o en este caso, un hater.

HarryStyles: ¿Qué mierda contigo? ¿Esto es por que dije que estabas bueno? ¡No quiero que me sigas, eres un niñato!

Louis, invadido por una rabia repentina al leer aquellas frases despectivas sobre su persona tocó el boton de ''Aceptar mensaje'' y luego busco el teclado para responder.

LouisTomlinson: ¿Y tú como sabes cómo o qué soy? No me conoces más de lo que yo quiero que veas, no soy como en mis vídeos lo ves. No sabes ni una cuarta parte de mi personalidad ni de mi vida ''Harry''. ¿Crees qué me conoces por saber dónde vivo gracias a mis vídeos, o por saber qué películas o juegos son mis favoritos? ¡Eso es una puta mierda! Ya deja de decir esas cosas sobre mi, por favor.

Apretó el botón de enviar, sin preocuparle que el tal Harry pudiese filtrar ese mensaje y hundir su carrera. Sin preocuparle que pudiese quedar como un grosero frente a la prensa o sus amigos. Él solo quería defenderse y cerrar la boca de aquel estúpido desconocido, del cuál aún no sabía nada, ni porque le afectaban tanto sus palabras.

Dios, necesitaba más té, sin dudarlo. Aquella candente bebida era lo único capaz de calmarlo tras semejante estrés que paso con este energúmeno. 

Estaba dispuesto a ir por su té con miel cuando su celular se encendió nuevamente y rodó los ojos al ver por la vista previa de notificaciones la respuesta.

HarryStyles: Te voy a hundir, zorra.

Louis tecleó una rápida respuesta desde aquella vista previa, sonriendo de medio lado.

LouisTomlinson: Con gusto, guapo.

Después de todo, no mentía con estar a gusto si esa situación ocurriese. Harry estaba demasiado bueno, aún que sus dichos fueran una mierda, eso no cambia sus rasgos de dios griego, y esos ojazos verdes que cargaba.

Uff, realmente necesitaba una ducha de agua fría para dejar de pensar en aquel hombre, que aún que no había visto ni una sola vez en persona, calaba dentro de su ser de una forma que solo se veía en las películas de amor que él tanto amaba mirar por Netflix.

Llevo su vista a la mesa y vio su libreta, recordando que estaba trabajando en algo importante antes de iniciar su pelea con el chico que intentaría no volver a mencionar jamás, en el bien de su salud mental.

Tomó su laptop y vio la hora en el menú de tareas: 01:00 am. Abrió Google Maps en busca de un bonito lugar en Doncaster para firmar el vídeo para su canción, y luego abrió Whatsapp Web para escribirle un mensaje a su mejor amiga.

Louis: Oye, Bebe. Necesitaré tu ayuda.

Esperando su respuesta, suspiró, pensando en la ardua y larga noche de trabajo que tenía por delante.