Esto no es un título

Al igual que esto no es un texto.
Nada de esto es lo que es en realidad.

Nuestra realidad se basa en pequeños hechos ficticios. Elementos de nuestra vida que viéndolos desde un tercer punto de vista se esfuman de nuestras entendederas. Los números, las palabras... son secuencias de sonidos a los que se les han impregnado una idea concreta, y ese simple hecho es lo que nos ha permitido avanzar y llegar a lo que somos hoy.

Unas simples palabras pueden hacer que todo se desmorone.
Solo hay que buscarle el orden correcto.

Por eso, me despido de una noche larga y tediosa,
donde el silencio truena en la mente
de aquellas almas en vigilia incapaces de dormir.

Esto tampoco es un final.